El equipo de campaña de Alberto Garzón se agrieta a un mes de las generales

Nuevo lío en IU a las puertas de las elecciones generales. Según adelantó el diario El Confidencial, este miércoles dimitieron varios integrantes del equipo de campaña del candidato de Unidad Popular, Alberto Garzón, y entre ellos dos de los miembros más cercanos a sus tesis: el secretario de Política Electoral de IU, Ramón Luque, y la secretaria de Convergencia y mano derecha de Garzón, Lara Hernández. Los problemas, fundamentalmente, son dos: su rechazo a convertir el ataque a Podemos en un eje de la campaña para las generales, y el supuesto intento del PCE de presentar una candidatura alternativa en Cataluña a la coalición En Comú Podem, a la que EUiA –la marca catalana de IU– se ha sumado.

A un mes escaso de que se celebren los comicios, la apuesta de Garzón y de la propia IU parecía clara tras haber fracasado la negociación con Podemos para concurrir en coalición a las generales. El candidato no tuvo problemas en ser elegido cabeza de lista de la coalición Unidad Popular y, en la precampaña, ha deslizado varias críticas contra el partido de Pablo Iglesias para realzar sus diferencias. Pero entre los dirigentes más cercanos a Garzón no se contemplaba otra opción que el pacto con Podemos, y el hecho de tener que diseñar una campaña en solitario ha hecho surgir las discrepancias sobre el modo de abordarla.

En este sentido, los dirigentes más apegados a Garzón –especialmente Hernández, pero también Carlos Martínez, ex líder del Área de Juventud de IU que también ha abandonado y, a diferencia de los otros dos, deja igualmente la federación– no comparten que sea positivo convertir el ataque a Podemos en una de las claves de la campaña electoral. "No comparto la deriva del proyecto político de IU y el PCE en este último año, fundamentalmente en lo que representa a las decisiones tomadas por sus cuadros dirigentes", escribía Martínez en Facebook al anunciar su decisión, un espacio donde aseguraba que "el nivel de contradicciones asumidas durante todo el último año y medio ha llegado al límite, sobre todo en estas últimas semanas".

La segunda razón que ha hecho estallar las tensiones dentro del equipo de campaña de IU, sostienen fuentes cercanas a los dirigentes que lo han abandonado, viene provocada por la forma en la que se cerró el pacto para que EUiA concurra dentro de la coalición En Comú Podem –donde se integran además Podemos, Barcelona en Comú e ICV– para las generales en Cataluña, un acuerdo que la federación catalana de IU suscribió el último día del plazo legal y tras haber anunciado incluso que se presentaría junto a Unidad Popular. Y es que, según estas fuentes, el PCE habría intentado crear una candidatura alternativa a En Comú Podem, mientras que dirigentes comunistas se quejan de que no se les informó de las condiciones del pacto de EUiA con la coalición.

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Esta última es la razón fundamental que esgrime Ramón Luque –dirigente de EUiA, además de de IU a nivel federal– para haber abandonado el equipo de campaña. "EUiA ha desplegado al máximo los acuerdos alcanzados por el Consejo Político Federal de IU para llegar a un acuerdo de unidad popular", asegura Luque, que critica la "locura" de "algunos" al intentar montar una candidatura alternativa en Cataluña –Garzón tuvo que intervenir para impedirlo, afirma– y rechaza las acusaciones de haber firmado un acuerdo negativo para IU, que encabezará la lista por Tarragona y que ocupará el puesto número siete en la de Barcelona.

"Nosotros hemos llegado a un acuerdo que seguro que tiene imperfecciones y que no satisface plenamente a nadie, pero que es una expresión acabada de unidad popular, y tiene raíces y expectativas reales en Cataluña", sostiene el dirigente, que asegura que "otros sectores" contrarios a la forma en la que se ha terminado concretando este pacto "realmente nunca han visto clara la unidad popular". "Hay gente que nunca entendió el nacimiento de Podemos o las mareas y que busca siempre una excusa", critica Luque, que asegura que alaba la actitud poco "beligerante" de Cayo Lara en torno a una confluencia que, al menos al inicio del proceso, no veía con buenos ojos.

El dirigente, en cualquier caso, avisa de que no va a "entrar en descalificaciones e insidias" porque en las elecciones del próximo 20 de diciembre "el futuro de IU está en juego". "A partir del 20 de diciembre hablaré yo de lo que ha sido este ciclo político, y también lo harán miles de cuadros y afiliados de IU", señala Luque.