La joven con un contrato basura que puso en apuros a Rajoy: “Soltó los datos y se quedó tan a gusto”

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acudió el sábado al programa La Sexta Noche para responder a las cuestiones directas que dieciséis ciudadanos le plantearon frente a frente de cara a las elecciones del 20-D.  Una de ellas, precisamente una de las últimas, discurrió de un modo más tenso de lo esperado.

Sara Moreno, una estudiante de 25 años de Periodismo y Comunicación Audiovisual procedente de Guadalajara, le preguntó al candidato del Partido Popular si consideraba como una “victoria” los datos del desempleo que deja tras esta legislatura cuando “el paro juvenil es de los más altos de Europa y los sueldos son inestables”.

Sara explicó a Mariano Rajoy que desde febrero ha encadenado trabajos temporales en una empresa sin posibilidad de convertirse en fija, al mismo tiempo que estudia en la Universidad. No sólo eso, su padre, de 52 años, trabaja cuatro horas por la tarde –es el principal sostén de la economía familiar– y su hermano se encuentra en una situación laboral similar a la suya.

La frustración de esta ciudadana se hizo palpable en su rostro conforme el presidente del Gobierno respondía a su cuestión. Para Rajoy, su caso es “fastidiado, terrible”, pero sostuvo que las personas con su mismo tipo de contrato “no llegan al 1% de los que trabajan en España”, frente al “75% de los indefinidos” que trabajan por cuenta ajena.

“Hay muchos trabajos que por su propia esencia son temporales”, prosiguió pretendidamente didáctico Rajoy, que añadió que Guadalajara es un claro ejemplo de zona agrícola en la que se darían ese tipo de contratos. Rajoy agregó que “se han creado un millón de puestos de trabajo y si perseveramos en la política económica crearemos más”.

El presidente del Gobierno explicó a continuación a Sara y al resto de la audiencia las medidas que el PP tomará si sigue en la Moncloa tras el 20-D: “Para la próxima legislatura, quien convierta un trabajo temporal por uno indefinido, no va a pagar por los primeros 500 euros de sueldo durante los primeros cuatro años y el trabajador tampoco”.

Rajoy finalizó su intervención, Sara se sentó y se quedó sin respuestas. “Soltó los datos, lo que ha propuesto de los 500 euros y se quedó tan a gusto”, apuntó Sara este domingo a infoLibre añadiendo que su cuestión “iba más allá” de su caso particular. 

Sara trabaja en un almacén de logística donde les "renuevan cada mes o cada cuatro meses". "Cuando llegas al año no te renuevan más porque te tienen que hacer fijo”, explica. “Estoy allí desde febrero y llevaba casi un año sin trabajo”, añade.

Tanto ella como su hermano tratan de ayudar en casa con la economía familiar. Su padre, principal fuente de ingresos del hogar, “trabajaba –hace siete años– en un matadero de pollos en Guadalajara, pero el matadero cerró, estuvo nueve meses sin cobrar y a día de hoy no ha recibido lo que les deben”.

Además, estaba empleado –y hoy en día continúa– “en una serigrafía de la ciudad por las tardes cuatro horas”. No obstante, no es suficiente para la familia. “En este tiempo se ha terminado de sacar el graduado [de la ESO]”, comenta, así como ha buscado “por todos los medios” un trabajo que le permita mantener a su familia. “Tampoco es que sea mayor pero lo tiene difícil”, concluye. 

En su intervención, Rajoy afirmó que el caso de Sara no llegaba a un 1% de los contratados en España, una cifra que contrasta diametralmente con la realidad laboral. Aunque el presidente no concretó a qué se refería, los datos son los siguientes: en noviembre de 2015, el 91,72 de los contratos eran temporales. Además, según la OCDE el 22% de jóvenes españoles se ven obligados a aceptar un minijob, y tardan una media de seis años en encontrar un empleo fijo. Por otra parte, en 2008 los contratos a tiempo parcial representaban el 24,75% de la contratación. Se firmaron 4,1 millones. En 2014, equivalían, según los últimos datos oficiales, ya al 34,8%%.   

Alberto Garzón fue el que más me convenció

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Sara ha asistido en las últimas semanas a La Sexta Noche y por sus oídos han pasado las respuestas de los diferentes líderes políticos que se disputan la Presidencia del Gobierno. Reconocida votante “de izquierdas”, apunta que sólo Alberto Garzón le convenció: “El resto llevaban sus discursos aprendidos”.

“Les preguntases lo que les preguntases, aprovechaban para venderte lo que ellos querían”, afirma. “Garzón hablaba más de verdad y decía las cosas como las pensaba, era más sincero”, reconoce.

Sin embargo, pese a todo admite que a día de hoy continúa "entre los indecisos". "No lo sé, supongo que optaré por Unidad Popular" pero, tras escuchar las respuestas de todos en directo, "todavía tengo que pensarlo".