Los 'puntos oscuros' de la política urbanística de la candidata de Ciudadanos en Valencia

La trayectoria de Carolina Punset, candidata de Ciudadanos a la Presidencia de la Generalitat Valenciana y hasta ahora concejala de Urbanismo en Altea –tiene algunos puntos oscuros según consta en la documentación analizada por infoLibre.

En la vivienda de Carolina Punset está domiciliada una empresa que tiene como objeto social la "promoción inmobiliaria". El administrador único, su marido, sostiene que ya no ejerce esa actividad. Además, como concejala de Urbanismo, Punset impulsó en Altea –donde el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) está en fase revisión– dos actuaciones polémicas. Una de ellas, relacionada con la condición de urbanizable de suelo de una de las zonas de costa más cotizadas del municipio, beneficiaría presuntamente los intereses de un concejal del PP local.  Ella lo niega y sostiene que no hay "ningún trato especial ni de favor a ningún particular". 

Las empresas

Carolina Punset fundó en 2007 una plataforma ciudadana de corte ecologista y ámbito local llamada Cipal (Ciudadanos independientes por Altea). Surgieron como "reacción al destrozo medioambiental, el urbanismo salvaje y el nepotismo" que, a su juicio, se había instalado en el municipio. En las municipales de 2007 salió elegida concejala y gobernó con el PSOE, aunque dimitió tres años después. En los comicios de 2011 Cipal consiguió tres ediles, el partido pasó a gobernar con el PP y la ahora candidata a la Generalitat a ocupar la concejalía de Urbanismo. 

Sin embargo su marido, Carlos Moro, –con el que está en régimen de separación de bienes– mantiene vínculos con el sector de la construcción. En la vivienda habitual de ambos en Altea está domiciliada la empresa Pura Magia Producciones SL que, según la información depositada en el Registro Mercantil, tiene como objeto social dos actividades que parecen tener poca relación: la adquisición de terrenos, construcción de viviendas y promoción inmobiliaria, y la producción de películas. Preguntado por infoLibre, Moro afirmó que en la actualidad está desvinculado del negocio inmobiliario y que se dedica sólo al sector audiovisual. La empresa, que hasta 2003 se llamaba Casas Moro SL, tiene en la actualidad un capital de 138.232 euros. 

Según la versión de Punset y su marido, la empresa Pura Magia Producciones SL tiene un único socio –Carlos Moro– y la candidata no tiene acciones. La información mercantil consultada por este periódico recoge que la compañía dejó de ser unipersonal (es decir, de tener un único socio) en el año 2000. Moro aportó a este periódico unas escrituras firmadas ante notario de julio de 2003 en las que sí se recoge ese carácter de unipersonalidad, aunque desde entonces han pasado 12 años. 

Esta empresa, según admitieron en el equipo de prensa de Punset a preguntas de este periódico, adquirió de forma reciente una vivienda en Altea –"para utilizar como oficina"– procedente de un desahucio que, en el momento de la compra, era propiedad de la inmobiliaria Solvia del Banco Sabadell. Preguntada por su valoración sobre la compra de una vivienda procedente de un desalojo, Punset trasladó la siguiente respuesta: "No hacemos rastreo de dónde sacan las viviendas los bancos. Simplemente las venden".

La empresa Pura Magia Producciones SL, además, aparece como editora de la revista El Otro Diario de Altea que publica Cipal. A preguntas de este periódico, los colaboradores de la candidata aseguraron que es una cuestión de "puro formalismo" porque la empresa es la propietaria del nombre registrado y porque "pagó los primero números". "No se puede considerar una revista ya que no se vende, es gratuita. Todos los costes son de Cipal y están perfectamente documentados.  No aparece ni un apunte contable en las declaraciones de Pura Magia Producciones SL", añadieron.

Además, Punset también aparece como apoderada de la empresa Goa Catamaranes SL, que tiene como objeto social el alquiler y venta de embarcaciones. Moro no recordaba "en qué consistía exactamente el apoderamiento" otorgado a su mujer, mientras que Punse dijo no recordar si era apoderada de la sociedad.

El concejal favorecido

Otro de los puntos controvertidos de la gestión de Carolina Punset al frente de la Consejería de Urbanismo es la revisión del PGOU. El Ayuntamiento pretende desclasificar 7,9 millones de metros cuadrados de suelo urbanizable para conseguir que haya crecimiento pero "de baja intensidad" al tiempo que se recuperan espacios urbanos y se generan espacios libres y jardines públicos, según informó el alcalde en rueda de prensa. PP, Cipal y PSOE votaron a favor de su aprobación provisional y Compromís en contra. 

Ese nuevo planeamiento contempla modificaciones en la zona de Camp Blanc, una de las áreas de costa más cotizadas del municipio alicantino. En concreto desclasifica (mantiene como no urbanizable) la mayor parte del terreno de una zona concreta –la que ocupa el espacio entre el Camí Vell d'Altea y el paseo marítimo– pero excluye de la desclasificación (es decir, se podrá seguir construyendo) la parte en la que están ubicado un establecimiento hostelero y dos viviendas, que son propiedad precisamente de un concejal del PP en el Ayuntamiento de Altea y del padre de este. 

En el equipo de prensa de Punset aseguran que "no hay ni por asomo ningún trato especial ni de favor a ningún particular" y añaden que la delimitación ha sido una "cuestión técnica" obligada por la legislación de costas. No obstante, recuerdan que el proyecto está en fase de alegaciones y que agradecerán todas las aportaciones que se hagan al respecto, "de modo que el Bloc puede apuntar cuál es la suya, eso sí a la vista de lo que dice la legislación de costas, y no por lo que les venga en gana".

La cantera 

Otro de los aspectos cuestionados de la reforma del PGOU es el relacionado con la rehabilitación de una cantera, Les Quintanes, cuya explotación está prácticamente agotada. El plan expuesto al público en abril de 2015 incluye la posibilidad de implantar en esa zona, entre otras actividades, "centros deportivos, de ocio y de turismo activo ligado a la aventura", algo que ha sorprendido a los vecinos de la zona que esperaban una regeneración completa del espacio, que se recompusiera la topografía y se apostara por la repoblación forestal. 

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Además, hay otro aspecto que llama la atención. La empresa Gravera Quintares SL –propietaria de la cantera– presentó en 2010 un proyecto (que no llegó a aprobarse) que contemplaba precisamente la regeneración de la cantera rellenando el hueco con residuos inertes y su posterior revegetación. Sin embargo, en 2014, esta misma empresa presentó otro proyecto en el que, según la documentación a la que ha tenido acceso infoLibre, ya no se regenera la topografía original y que además incluye un cambio en el uso del suelo que pasaría a ser recreativo. Este proyecto fue presentado en julio de 2014, cuando el PGOU se presentó en abril de 2015. 

Este periódico preguntó al equipo de Carolina Punset si la empresa Gravera Quintares SL pudo tener acceso a información privilegiada. Y si no, cómo sabía en julio 2014 que el PGOU presentado en abril de 2015 iba a cambiarle el uso a la zona. La respuesta fue que lo que realmente hace el PGOU que está en fase de estudio es "quitar expectativas a la propiedad porque se limitan sus usos respecto a lo que recoge el plan que está vigente en la actualidad". 

Sin embargo, expertos en urbanismo consultados por este periódico sostienen que el nuevo PGOU allana el terreno para que en este espacio, en contra de lo que demandan los vecinos, se puedan llevar a cabo actividades con fines lucrativos en lugar de apostar por una regeneración del paisaje. De hecho, algunos de ellos sostienen que lo recogido en el PGOU coinciden con las informaciones que manejan referidas a la futura explotación de un camping de caravanas en el parcela de la cantera.