Familia Franco
Patrimonios construidos, engordados y amasados sustrayendo ilegalmente los bienes ajenos durante la dictadura fascista del terrorismo franquista y sigue beneficiándose de todo lo robado durante la dictadura del pequeño dictador. Así llevan 49 años de democracia haciendo y deshaciendo a su antojo y sin rubor. Nos debemos preguntar por qué los jueces, juezas, magistrados y magistradas españoles no llevan ante los tribunales de justicia a esta familia para que devuelva todo lo desvalijado a las españolas y españoles y se integre al patrimonio nacional para disfrute de la ciudadanía.
Jamás entenderé cómo es posible que en una democracia parlamentaria los herederos del dictador Francisco Franco sigan haciendo negocios con el patrimonio hurtado a las españolas y españoles descaradamente, tanto despropósito de los herederos del dictador debe someterse a los tribunales de justicia para evitar que sigan enriqueciéndose con los patrimonios inmobiliarios despojados al pueblo.
El Poder Judicial debería, sí es competente, instar al juez de turno o tribunal a actuar ante los delitos encadenados (todo el patrimonio está contaminado por los hechos y las formas de obtenerlo por la familia el capital que nada es de ellos y ellas, todo hurtado). Aún siguen sin juzgar aquellos comportamientos de latrocinio de todo un régimen y exigir por vía judicial que devuelvan al pueblo español todo lo quitado. Los frutos de los inmensos beneficios, consecuencia de los negocios con un patrimonio mobiliario e inmobiliario hecho con lo sustraído a las personas indefensas o amenazadas durante todo el período dictatorial, tienen el mismo efecto. Es un enriquecimiento ilegal hecho con patrimonios despojados a sus verdaderos dueños, propietarios o poseedores de “buena fe”, que los sublevados, aprovechando la victoria, hurtaron.
Es un enriquecimiento ilegal hecho con patrimonios despojados a sus verdaderos dueños, propietarios o poseedores de “buena fe
Quienes apoyaron la sublevación con el crucifijo y el rosario, empresarios y bancos, triplicaron sus beneficios durante toda la dictadura fascista española, esquilmando las arcas de la hacienda u obteniendo contratos de todo tipo a beneficio de las empresas que apoyaron el Golpe de Estado de Francisco Franco y para los discípulos del régimen, los adictos y sus defensores, les permitieron caciquismo localista, provinciano y regional y una administración centralizada permisiva con el cohecho, tráfico de influencias y la apropiación indebida de lo ajeno a diario, sin pedir permiso ni autorización o adquirirlo de manera legal. Así construyeron las familias tradicionalistas, reaccionarias y franquistas sus patrimonios, todas no, pero en su mayoría sí.
Sé que los miembros del Poder Judicial no lo van a hacer, nada de nada, porque tienen mucho que callar sobre otras familias herederas del franquismo y su ideología o corporativismo de clase no se lo permite. Aunque si sería de justicia y cabe la posibilidad que el Poder Legislativo aprobara una norma contra las sanguijuelas de la dictadura que a fecha de hoy siguen haciendo negocios ilegales, caiga quien caiga, para que devuelvan todo lo que suyo no es, sé que es un sueño, dejadme soñar.
Victorio Martínez Armero es socio de infoLibre.