Universalidad fiscal
Dirigentes, mujeres y hombres del PP nacional y de las comunidades donde gobiernan con la ultraderecha no han roto la camadería y siguen aplicando, de la mano ultra, las políticas de la extrema derecha, incluida la propuesta de los regalos fiscales a los ricos y la no contratación de profesores y profesoras para la educación pública o personal para sanidad pública, además de los regalos fiscales a quienes más patrimonio poseen, incluida la Iglesia Católica.
Saben que bajando o perdonando el pago de tributos a los ricos y poderosos del dinero se benefician los jefes del PP y Vox, por eso ocultan sus intenciones ultraliberales de desmantelamiento del Estado del bienestar y practican donde gobiernan las políticas recortadoras, privatizadoras, para instaurar el sistema anglosajón (EE.UU), donde manda el dinero con un sector privado fuerte y un sector público débil de subsistencia para someter a la limosna y la beneficencia a la ciudadanía con menos recursos.
Dirigentes del PP/Vox/Junts y asociados: pagar tributos es un deber, regulado en el artículo 31 de la Constitución española, y no querer pagar tributos es no cumplir el deber constitucional para sostener los gastos públicos en esa necesidad de mantenimiento del Estado, fuerte, con recursos humanos y materiales para garantizar el Estado del bienestar.
Dirigentes del PP: tributar es deber de contribuir al sostenimiento de los gastos públicos conforme con las capacidades económicas de cada uno de nosotros y nosotras. Que las fuerzas políticas de derechas y ultras, unidas para incumplir este principio universal de la proporcionalidad fiscal y la progresividad tributaria, un ejemplo, doña Isabel y su novio defraudador deben contribuir más que los trabajadores, trabajadoras que limpian el ático millonario, porque sus rentas son más altas, ingresan más dinero en sus cuentas corrientes y tienen más patrimonio. ¿Pagan más o menos impuestos los enamorados que la clase trabajadora?
Doña Isabel Díaz Ayuso: de los impuestos que recauda el Estado a través de la Agencia Tributaria, una parte alícuota sirve para financiar a la Comunidad de Madrid para unos objetivos y fines que usted incumple
Las constituciones europeas de nuestro entorno también tienen preceptos que se ocupan del deber de sostenimiento del gasto público para pagar los salarios de los políticos de derechas y ultras que se niegan a pagar impuestos.
Les recomiendo a los negacionistas fiscales que por una vez sean valientes y se declaren “objetores fiscales”, y así tienen más dinero en sus bolsillos y dejen de utilizar al resto de contribuyentes que cumplen con sus obligaciones fiscales de pagar tributos proporcionalmente para mantener al Estado español y contribuir al desarrollo y protección del Estado del bienestar que corrige las desigualdades, paga las pensiones y jubilaciones públicas, ah, y la sanidad pública, la educación pública, los servicios públicos y la formación profesional pública, que los gobiernos autónomos del PP y camaradas han desinvertido para beneficiar al sector privado, sin vergüenza.
Doña Isabel Natividad Díaz Ayuso: de los impuestos que recauda el Estado a través de la Agencia Tributaria, una parte alícuota sirve para financiar a la Comunidad de Madrid para unos objetivos y fines que usted incumple, además de pagar su salario y el de sus consejeros, consejeras, que pagan menos impuestos que la mayoría de los trabajadores madrileños.
El sistema tributario español no es confiscatorio, es progresivo, y se estableció de acuerdo con la ley y es la ley la que establece las reglas recaudatorias para el sostenimiento del gasto público, y sería recomendable ante su falta de transparencia y ética que la caja de la Hacienda pública no pague sus regalos fiscales y caprichos privativos.
Quite sus manos privatizadoras y recortadoras de lo público, es de muy mala educación utilizar al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, como cortina de humo para ocultar sus errores, maldades y responsabilidades en su nula gestión de lo público. No olvide explicar sus últimas cacicadas para salvar a su novio defraudador confeso.
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Victorio Martínez Armero es socio de infoLibre.
