Cahuzac: El gestor que lo sabe todo (III)

No se trata de ese tipo de cosas que hace uno mismo, sobre todo cuando se es un hombre metido en política. Para gestionar su importante fortuna personal, parte de ella en forma de activos no declarados, Jérôme Cahuzac ha contado durante años con la colaboración de un hombre de su confianza. Mediapart está en disposición de desvelar la identidad de ese hombre. El gestor de su fortuna es Hervé Dreyfus. Este hombre conoce todos los secretos financieros del actual ministro de Hacienda, tal y como hemos podido saber, a raiz de nuestra investigación sobre su cuenta en Suiza.

Según nuestras fuentes, Jérôme Cahuzac hablaba con Dreyfus, a finales del año 2000, en la conversación grabada por error y en el transcurso de la cual el futuro ministro de Hacienda hacía alusión a su cuenta en el UBS de Ginebra, meses antes de convertirse en alcalde de Villeneuve-Sur-Lot (Lot y Garona). «Me jode tener una cuenta abierta allí, sobre todo porque el UBS no es precisamente un banco desconocido», explicaba Jérôme Cahuzac, en el transcurso de esta conversación de negocios.

Dreyfus, de 59 años, da nombre a dos sociedades diferentes, pero que responden a la misma denominación: Hervé Dreyfus Finance. La primera es una sociedad de «prestación de servicios en el ámbito de las finanzas, en Francia y en todos los países» y fue creada en 1994. En el momento de su fundación, en el capital de la empresa estaba presente, además de buena parte de la familia de Hervé Dreyfus, un magnate suizo de las finanzas, Dominique Reyl, fundador en Ginebra de la Compañía financiera de estudios y de gestión, que dio lugar a Reyl & Cie en 1988, y que cuenta a día de hoy con filiales en Hong Kong, Singapur y en Luxemburgo.

La «disolución anticipada» de “HDF” se declaró a principios de 2011, sin que se produjera su liquidación, y el patrimonio de la empresa fue transferido a la otra sociedad de Hervé Dreyfus, un holding encargado de gestionar las participaciones, fundado en el año 2000.

Hervé Dreyfus también es desde 1994 uno de los administradores y socios del grupo Raymond James Asset management internacional (RJAMI), aprobado por la Autoridad de los mercados financieros. En el seno del grupo, ocupa el puesto de «gerente de particulares».

Las dependencias del grupo RJAMI se ubican en un inmueble señorial del distrito VIII de París. Se trata de oficinas discretas y bien vigiladas, es imposible acceder a ellas sin disponer de una tarjeta acreditativa, salvo que te acompañe una recepcionista. En la 5ª planta, trabaja más de una quincena de personas. Hay moqueta y tabiques de imitación a la madera, el ambiente es acogedor y denso, pero es muy difícil acercarse a Hervé Dreyfus. Las numerosas demandas que Mediapart realizó al gestor, por correo electrónico o por teléfono, no dieron ningún fruto.

Dejaremos de lado en este asunto al grupo RJAMI. «Raymond James AMI no es ni accionista ni dirigente y no se ocupa de ninguna operación con o por cuenta de Hervé Dreyfus Finance. Se trata de dos sociedades diferentes», asegura Isabelle Delattre, directora general delegada del grupo.

Hervé Dreyfus es un viejo conocido de la familia Cahuzac. Es un hombre discreto y aplicado que trabajó a principios de los años 90 en el Crédit comercial de Francia (CCF) como gerente en el mercado de eurobonos, después como «responsable de la gestión de la cartera de clientes particulares no residentes» (es decir, de los extranjeros que no dependen del Fisco francés), tal y como consta en su biografía en la página web del RJAMI.

Un tal Antoine Cahuzac, el hermano pequeño del ministro, trabajó también en el CCF entre los años 1989 y 1991, cuando fue corredor de bolsa. También nos hemos puesto en contacto con él en varias ocasiones, pero tampoco ha respondido a nuestra petición de entrevista.

Ahora bien, precisamente es Antoine Cahuzac, pronto convertido en presidente del consejo de administración de HSBC Private Bank en Francia —actualmente dirige EDF Energies Nouvelles— quien le presentó a su hermano a Hervé Dreyfus. Con el paso de los años, los dos hombres afianzaron su relación, basada en la confianza y también en la discreción, tan preocupado como estaba Jérôme Cahuzac por que trascendiera esta vinculación. Tiene motivos: en el origen de sus confidencias se halla una cuenta no declarada en el banco UBS de Ginebra, tal y como reveló Mediapart el martes 4 de diciembre.

Para Jérôme Cahuzac, Hervé Dreyfus, desempeñaba el papel que Patrice de Maestre ha representado durante años con Liliana Bettencourt, la heredera del imperio L'Oréal. Gestiona sus activos legales, se ocupa de una inversión y otra, rinde cuentas de sus inversiones… pero también es el que, en la sombra, hace de intermediario en todo aquello que no debe saberse, bajo ningún concepto. De ahí la extrema discreción que caracteriza los encuentros que mantienen estos dos hombres. Casualidad o no: Cahuzac y Dreyfus viven a día de hoy a pocos metros el uno de otro, en la avenida Pierre 1er de Serbie.

Contactado en varias ocasiones durante los últimos días, el ministro de Hacienda no ha dado respuesta a nuestras preguntas relacionadas con su amistad con Hervé Dreyfus.

Una fortuna misteriosa

La carrera política de Jérôme Cahuzac es un mero decorado detrás del cual hay mucho dinero, oculto o no. El grueso de su fortuna proviene de dos máquinas de hacer dinero creadas al principios de los años 90: por un lado, la clínica Cahuzac, lanzada con su mujer en 1991; y por el otro, su gabinete de consultor, Cahuzac Conseil, abierto en 1993, y gracias al cual ha podido al cual pudo estrechar lazos con la industria farmacéutica.

La clínica prosperó en un nicho que es tremendamente ventajoso desde el punto de vista económico, en el de los implantes capilares. Sin embargo, nada hacía prever que Jérôme Cahuzac trabajaría el cuero cabelludo, ya que en el hospital universitario Assistance publique-Hôpitaux de Paris (AP-HP), se formó en «cirugía general» (sobre todo, digestiva), en principio como médico residente (de 1979 a 1983), después como «jefe de departamento », a partir de 1984, una vez concluidos sus estudios de especialización.

¿Por qué se pasó a los implantes? Jérôme Cahuzac ha explicado en numerosas ocasiones que no consiguió plaza en el hospital universitario AL-HP después de pasar por el gabinete de Claude Evin, entre 1988 y 1991, como consejero técnico responsable de la farmacia y del instrumental pesado. Partidario de Rocard, pudo haber sufrido la vendetta de los socialistas hostiles a la «segunda derecha» de Michel Rocard, muy presentes en los hospitales; además, es posible que pagara los platos rotos de la tensión que se vivía en algunas especialidades (entre cardiólogos, radiólogos etc.), vapuleadas por una serie de decisiones tomadas por el gabinete Evin. En parte, es cierto.

Sin embargo, no todos los hospitales de París le incluyeron en la lista negra, ya que consiguió, al dejar el Ministerio en mayo de 191, un puesto de tres meses en el hospital Ambroise Paré, según las informaciones facilitadas a Mediapart por el AP-HP. Dado que no se trataba de un puesto de profesor universitario, el trabajo se presumía mal pagado y las dietas poco gratificantes.

Junto con su esposa, dermatóloga, Jérôme Cahuzac se decantó por la «capicultura» como les gusta decir a los cirujanos en tono burlón, la retirada de implantes de la nuca, que se reimplantan en la parte superior del cráneo. Jérôme Cahuzac no poseía ninguna formación al respecto, pero no se trata de una de las intervenciones quirúrgica más complicadas.

«El cuero cabelludo no se encuentra entre sus capacitaciones en un primer momento», se irrita Sébastien Garson, secretario general del Sindicato nacional de cirugía plástica reconstructiva y estética. «¡Fue gracioso ver cómo se presentaba ante la prensa como cirujano estético!».

El 16 de diciembre de 2003, un año después de su derrota en las legislativas de junio de 2002, Jérôme Cahuzac intentó dar un paso más para ver reconocida su capacitación profesional como «cirujano plástico», de forma oficial. Sin embargo, en septiembre de 2004, el consejo departamental del Colegio de médicos echó por tierra su solicitud, debido a la «falta de formación en la materia».

Insistente, Jérôme Cahuzac interpuso inmediatamente un recurso de apelación. Volvió por sus fueros, pero el 27 de abril de 2006, el consejo nacional del Colegio, rechazó en esta ocasión definitivamente su petición: «La actividad liberal [de Jérôme Cahuzac] desde 1990 en París con una actividad exclusiva dedicada a la cirugía del cuero cabelludo no permite establecer que haya adquirido los conocimientos y la experiencia requeridas», escribe el Colegio. Y precisa: «Si es miembro de la Internacional society of hair restauration surgery, no figura recogido ni entre sus trabajo realizados ni en sus publicaciones».

Inscrito hasta 2011 en las páginas amarillas en la sección de «Médicos: cirugía plástica reconstructora y estética», el nombre de Jérôme Cahuzac desapareció en 2012.

En cuanto a la actividad de la sociedad Cahuzac Conseil, llevada en paralelo, se revela más opaca, pero igual de ventajosa. La empresa se puso en marcha mientras que Jérôme Cahuzac estrechaba lazos con algunos laboratorios farmacéuticos durante su paso por el Ministerio de Sanidad. Apenas un año después de su creación, Jérôme Cahuzac adquirió, en octubre de 1994 y por un montante de 6,2 millones de francos, un apartamento de lujo en la avenida de Breteuil, en París.

Al año siguiente, en el ejercicio 1995-96, la empresa declaró 814.526 francos (124.00 euros) de resultados (antes de impuestos) y repartió 400.000 francos (61.000 euros) de dividendos. En 1998-99, al tiempo que Jérôme Cahuzac entraba en la Asamblea Nacional y participaba en la redacción de textos relacionados con medicamentos, el beneficio de la compañía alcanzó los 156.081 francos (23.800) euros, gracias a «dos facturas por un montante global de 250.000 francos sin IVA (38.000 euros».

Tras los desmentidos, los apuros

Después de conocerse las primeras investigaciones de Mediapart, el actual ministro de Hacienda del Gobierno socialista, que ha presentado una denuncia por difamación, en un primer momento, desmintió la existencia de una cuenta en el banco UBS de Ginebra; eso fue antes de presentar versiones discrepantes sobre ciertos aspectos concretos de nuestra investigación.

Por un lado, con relación al alerta que saltó en 2008, a propósito de la cuenta de Suiza, cuando un agente del Fisco le investigó. En esa época el ministro de Hacienda era Éric Woerth (UMP). Entonces, Cahuzac, en un primer momento desmintió la información, para, a continuación, admitirla. Más tarde, en los relativo a un desplazamiento discreto a Ginebra a principios de 2010, en la fecha en la que cerró formalmente su cuenta antes de transferir los activos a un paraíso fiscal más lejano.

Después de haber desmentido, de forma implícita, este viaje a Ginebra durante una entrevista con Mediapart, en su despacho, el martes 4 de diciembre, Cahuzac aseveró finalmente al día siguiente (ante los micrófonos de RTL) que era «probable» que se produjera, cuando explicó de manera enrevesada que había tenido que desplazarse a Suiza en esas fechas para verse con informadores secretos por asuntos de «naturaleza fiscal»; sin decir nada más.

Jérôme Cahuzac, por el contrario, nunca ha desmentido personalmente la grabación (realizada en condiciones rocambolescas) de la conversación, de finales del año 2000, con su gestor. El motivo: el ministro sabe que es auténtica. Durante esta conversación de más de tres minutos, descubierta por error, Jérôme Cahuzac, entonces diputado socialista, habla abiertamente de su cuenta en el UBS, cuya existencia parece molestarle ante la proximidad de la convocatoria electoral, después de hablar con su interlocutor de inversiones.

«A mí, lo que me molesta, es seguir teniendo una cuenta abierta en el UBS, pero ya no hay nada allí, ¿no? ¿La única forma de cerrarla es desplazándome allí?», insiste el diputado socialista a su gestor, cuya voz se escucha con dificultad, al contrario de la de Jérôme Cahuzac.

«Me jode tener una cuenta abierta allí, sobre todo porque el UBS no es precisamente un banco desconocido», añade el ministro de Hacienda en esta grabación. Después, se refiere a las elecciones municipales de marzo de 2001 a las que es candidato por Villeneuve-sur-Lot, en Lot y Garona: «Sobre todo, porque no se puede descartar que sea elegido alcalde en marzo, por lo que no quiero de ninguna forma que haya la menor ambigüedad».

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En una entrevista publicada en el Journal du Dimanche el primer ministro Jean-Marc Ayrault se reafirmó en su apoyo al ministro de Hacienda: «Ha desmentido formalmente estas acusaciones en la Asamblea. No tengo razones para dudar de su palabra. Jérôme Cahuzac ha presentado una denuncia. Deseo que pueda defenderse y que lo haga lo antes posible».

A día de hoy, la única investigación judicial abierta por la Fiscalía de París está relacionada con acusaciones de difamación contra Mediapart. Por el contrario, no se ha iniciado ninguna investigación sobre las cuestiones de fondo de las informaciones relativas a la cuenta suiza. Existen dos posibilidades para que se abra una investigación de ese tipo. Ya sea a iniciativa de la administración tributaria o por iniciativa de la Fiscalía ante un eventual delito de «blanqueo de fraude fiscal». 

Traducción: Mariola Moreno