Marruecos
El rey agradeció los indultos de los que ahora se desentiende
La Zarzuela no quiere saber nada del indulto concedido por el rey Mohamed VI (y revocado anoche) al pederasta español de origen iraquí Daniel Galván Viña, de 63 años. Fuentes oficiales señalaron hoy que Juan Carlos I, en su visita el mes pasado a Marruecos, "se interesó", ante el soberano alauí y su primer ministro, Abdelilah Benkirán, "por la situación de los presos españoles" en el país vecino. Pero "en ningún momento" pidió indultos de reclusos españoles, siempre según fuentes de la Jefatura del Estado. Sin embargo, según el comunicado difundido el pasado 30 de julio por la agencia oficial MAP, Mohamed VI ordenó la liberación de 48 prisioneros españoles "condenados por diferentes tribunales marroquíes en respuesta a una petición formulada a este respecto por el rey Juan Carlos I de España". La Zarzuela no desmintió en ese momento el comunicado. Es más, Juan Carlos telefoneó al soberano alauí para agradecerle "profundamente" el gesto, que consideraba una "muestra singular de amistad entre los dos pueblos". Agradecimiento que reflejó en una nota oficial.
Según las fuentes de la Zarzuela consultadas por infoLibre, la gestión del monarca durante su visita a Marruecos el pasado julio fue "triple". Primero, desbloquear el asunto de las kafalas (modalidad islámica de adopción), dadas las peticiones de mediación que habían llegado a la institución por parte de las familias solicitantes. Dos, "interesarse por la situación de los presos españoles" en Marruecos, porque también habían llegado demandas de las asociaciones de reclusos. Y tres, el rey citó singularizadamente ante Benkirán a uno de ellos, Antonio García Vidriel, un camionero enfermo que permanece en Tánger y que fue detenido en 2012 junto a su hijo por transportar casi nueve toneladas de hachís.
Antes de que el monarca regresara a España, Benkirán le respondió al jefe del Estado que la situación de ese preso se desbloquearía. La gestión de Juan Carlos sirvió para que los trámites se aceleraran, pero sin embargo García Vidriel no figuró en la lista de los 48 indultados. Sí estaba, en cambio, Galván Viña.
"El rey no llevaba ninguna lista de presos a los que España quería que Marruecos indultase, ni tampoco hizo ninguna petición de indulto colectivo", subrayó categóricamente un portavoz oficial de la Casa Real. Entonces, ¿no hay contradicción? "Marruecos dijo que Mohamed VI procedió a la liberación 'en respuesta a la petición' del rey, pero no dijo que el rey había pedido los indultos. Ese es el lenguaje diplomático. Lo que pasó es que don Juan Carlos se interesó por la situación de los presos, el rey marroquí respondió con los indultos y don Juan Carlos agradeció la decisión", explicaron desde la Zarzuela.
Sin causas pendientes en España
Mohamed VI indultó a 1.044 presos con motivo de la Fiesta del Trono de este año, y entre ellos figuraban los 48 españoles. Galván Peña había sido condenado en 2011 a 30 años de cárcel en Marruecos por abusar de 11 niños. La medida de gracia indignó a un país sensibilizado con el turismo sexual de menores y desencadenó una oleada de protestas que, al final, obligó al soberano alauí primero a dar explicaciones –aclaró que "jamás" fue "informado" de la "gravedad de los crímenes abyectos" de Galván Peña y anunció una "profunda investigación"– y después a revocar su propia decisión, en un gesto absolutamente insólito. El comunicado de anoche, difundido por la agencia MAP, adelantaba que el monarca había dado instrucciones al ministro de Justicia, Mustafá Ramid, para "examinar con su homólogo español los pasos a dar tras la retirada de esta gracia".
Ello abre la puerta a que el pederasta pueda cumplir su condena en España. Pero no puede apresarlo –Galván se encuentra en paradero desconocido después de su excarcelación– si no media una orden internacional de búsqueda y captura, a través de Interpol y cursada por Rabat. El Ministerio de Justicia español, según informó Europa Press, dijo no tener ninguna comunicación formal sobre el indulto y lo juzgó normal porque los delitos se cometieron en Marruecos, y allí fue condenado y posteriormente liberado, mientras que en España no tiene ninguna causa pendiente.
Este lunes, el embajador español en Rabat, Alberto Navarro, confirmó a Efe que el Gobierno, a través de la legación diplomática, había presentado a las autoridades marroquíes dos listas. Una, con peticiones de indulto para 18 presos, y otra para el traslado de otros 30 reclusos, para que cumplieran en España su condena. Galván Viña estaba en este segundo grupo. Mohamed VI no hizo distinciones y liberó a los 48, sin excepción. Los dos estadillo habían sido verificados por el Ministerio de Asuntos Exteriores español "para comprobar que no hubiera ninguna persona con delito de sangre".
Navarro explicó que, tras el buen clima que presidió la reciente visita de Juan Carlos a Marruecos, Rabat ofreció indultos y traslados. "Nunca pensamos que se le podría indultar", expresó.
La oposición quiere que el Gobierno dé explicaciones
El rey puede estar hasta seis meses de baja, pero ni abdica ni se considera inhabilitado
Ver más
La oposición, mientras, ya ha reclamado explicaciones al Ejecutivo. El sábado pasado, la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ya adelantó que este lunes registraría en el Congreso una pregunta oral al Gobierno, para que el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, dijese quién había sugerido el indulto de Galván Viña y si se había supervisado la "oportunidad y la idoneidad de los casos incluidos" en la lista" para no perjudicar la alta gestión atribuida al rey". Hoy, el secretario de Relaciones Institucionales y Política Autonómica de los socialistas, Antonio Hernando, exigió al Ejecutivo que relate por qué obtuvo el pasaporte español "en tiempo exprés" para salir de Marruecos. El dirigente del PSOE volvió a indicir en que los delitos por los que se condenó a Galván son de los "más graves y repugnantes que existen" y pidió al Gobierno que lo detenga si está ya en España "para que cumpla" el resto de su pena.
También demandó explicaciones UPyD. Su portavoz, Rosa Díez, recalcó a Europa Press que el Gabinete de Mariano Rajoy debe precisar todas las circunstancias del caso, puesto que fue España quien requirió la medida de gracia. Mientras, Izquierda Unida, según informaron fuentes oficiales de la formación, se plantea pedir la comparecencia del director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz, en la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso, puesto que Galván fue un antiguo espía.
Galván trabajó para la Universidad de Murcia (UMU) en el Departamento de Relaciones Internacionales en dos periodos: de 1996 a 1998, como becario, y de 1998 a 2002, con un contrato de personal administrativo, tal y como confirmó el rector de la institución, José Antonio Cobacho. Este dijo haber consultado la ficha del pederasta y comprobó que es un hombre "con un gran conocimiento de idiomas, en concreto, del árabe", y la UMU es una universidad "con mucho interés en forjar relaciones con los países árabes". Su domicilio oficial en aquellos años, según constaba en la citada ficha, era Torrevieja (Alicante). La labor de Galván en la universidad, afirmó Cobacho, "fue absolutamente normal, e hizo satisfactoriamente su trabajo".