PSOE e IU exigen a Margallo que aclare su relación con una empresa de los Cotino investigada en la 'Gürtel'

La pertenencia del ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, entre 2007 y 2008, al consejo de administración de la empresa matriz de Sedesa, el grupo empresarial de la familia Cotino y que está siendo investigada en el caso Gürtel tanto en Valencia como en la Audiencia Nacional, ha movilizado a la oposición. 

Tras desvelar infoLibre ayer miércoles que Margallo fue consejero de Asedes Capital SL entre 2007 y 2008, PSOE e IU anunciaron sendas preguntas parlamentarias en el Congreso para que el jefe de la diplomacia española explique su relación con la familia de Juan Cotino, actual presidente de Les Corts Valencianes y vicepresidente entre 2007 y 2011 en el Gobierno de Francisco Camps. 

Los socialistas ya registraron ayer jueves la pregunta del diputado valenciano Antoni Such, confirmó él mismo a este diario. Su texto dice así: “¿Qué nivel de relaciones mantuvo el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, señor García-Margallo, con Asedes Capital SL y con el grupo mercantil Sedesa, cuyas operaciones investigan el Tribunal Superior de Valencia y la Audiencia Nacional y si en la actualidad mantiene algún tipo de relación o vinculación con dichas empresas?”.

Asedes Capital SL, a cuyo consejo perteneció Margallo entre febrero de 2007 –el anuncio fue publicado en marzo– y mayo de 2008, era y es la matriz del grupo Sedesa, uno de los principales adjudicatarios de contratos públicos de la Generalitat y cuyo máximo directivo, Vicente Cotino, permanece imputado en el caso de los papeles de Bárcenas así como en el de la presunta financiación ilegal del PP valenciano. Vicente Cotino Escribá es sobrino de Juan Cotino, quien durante su primer bienio como vicepresidente tercero de la Generalitat (2007-2009) desempeñó también el cargo de conseller de Bienestar Social.

"Consejero independiente"

Fuentes consultadas de nuevo ayer por infoLibre en el entorno de Margallo contestaron así a la pregunta de qué funciones específicas tenía el ministro como consejero independiente de Asedes Capital SL. “Era consejero independiente de la sociedad tal como consta en el Registro Mercantil”, fue la tautológica respuesta. 

Durante la etapa en que el titular de Exteriores perteneció al órgano de gobierno de Asedes Capital SL, compaginó su puesto de consejero con el de diputado al Parlamento Europeo. Entre 1994 y 2011, cuando se incorporó al Gobierno de Mariano Rajoy, Margallo ocupó un ininterrumpidamente un escaño en la Eurocámara.

Izquierda Unida, que registrará de forma inminente su propia iniciativa, ha puesto el foco en esa última faceta de Juan Cotino: la de conseller de Bienestar Social. A solicitud de la diputada autonómica Esther López Barceló, el diputado de IU Ricardo Sixto registrará una pregunta dirigida a conocer qué posición mantuvo García-Margallo como consejero de Asedes Capital SL cuando como conseller de Bienestar Social Juan Cotino aplicó ciertas modificaciones normativas, entre ellas el precio que la Generalitat se comprometía a pagar por cada plaza geriátrica concertada con cada residencia.

Y, según la federación, esas modificaciones tuvieron el siguiente efecto: propiciar un aumento “significativo” de los beneficios de las empresas del grupo Sedesa que gestionan en Valencia residencias geriátricas. Esta semana, EUPV (siglas de IU en la Comunitat Valenciana) presentó ante la Fiscalía valenciana una denuncia sobre el presunto trato de favor que Cotino habría dado a sociedades de su grupo familiar –Gerocentros del Mediterráneo y Centros Residenciales Savia–.

Un grupo bajo la lupa judicial desde 2009

El estallido del caso Gürtel en febrero de 2009 y la batida de registros que le acompañó destaparon literalmente la –presunta– contabilidad B del PP en Madrid y Valencia. Un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) de la Policía ya cifraba en 150.000 euros, IVA incluido, los costes del PP valenciano asumidos por empresas del grupo Sedesa, que camuflaban la donación aceptando falturas falsas emitidas por Orange Market.

Es decir, la filial local de la trama Gürtel y a cuyo frente se situaba Álvaro Pérez, El Bigotes a quien, sin saber que la Policía escuchaba al otro lado del teléfono, Francisco Camps definió como “amiguito del alma”.

Fechado el 20 de julio de 2010, el mencionado informe policial dice esto sobre las cuatro facturas por 150.000 euros que Sedesa abonó a Orange Market en 2008: "Las facturas extendidas a nombre de distintas empresas del Grupo Sedesa no se corresponden con una contraprestación de servicios real entre Orange Market SL y las mismas sino que se crean para justificar una salida de fondos de empresas del Grupo Sedesa a OM [Orange Market] que se dedica a financiar la deuda del PP con dicha mercantil, teniendo estas por tanto el carácter de ficticias".

Cotino: “¿Por qué tengo que dimitir? ¿Qué mal he hecho para que tenga que dimitir?”

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Si la investigación de la rama valenciana del caso Gürtel ya puso al holding de la familia Cotino en el centro del huracán político, la apertura, en la Audiencia Nacional, de la pieza separada de los papeles de Bárcenas empeoró su situación. O sea, la –supuesta– contabilidad B del PP que reflejan los manuscritos de Luis Bárcenas, extesorero del partido y hoy preso en Soto del Real, contienen una anotación a nombre de Sedesa. A tenor de esos documentos, cuyos indicios de veracidad crecen por días a tenor de las resoluciones que el juez Pablo Ruz va dictando, Sedesa hizo una donación opaca al PP de 200.000 euros.

Bárcenas anotó de su puño y letra esa entrega, también supuestamente realizada en persona por Juan Cotino el 11 de marzo de 2004, ya para siempre el 11-M, día de la masacre de Madrid. En su declaración como testigo ante el juez Ruz, Cotino admitió que esa jornada había estado en la capital y en la sede del PP de la calle de Génova. Pero negó tajante que le hubiera entregado un solo euro a Luis Bárcenas.

Ahora, el asunto de los geriátricos valencianos abre un nuevo frente para Sedesa y la familia Cotino. Acorralado tras la difusión de unas grabaciones cuyo contenido sugiere que pudo beneficiar a las empresas de su familia que gestionan geriátricos concertados, el presidente de Les Corts Valencianes ni se plantea dimitir: "¿Por qué tengo que dimitir, qué mal he hecho para que tenga que dimitir?", se preguntó Juan Cotino hace una semana.