Una jueza embarga a Bankia por no devolver lo invertido a dos preferentistas ancianos

La titular del Juzgado de Primera Instancia número 10 de Madrid, María Dolores Fernández Alcalde, ordenó –en un auto dictado el pasado 14 de octubre y al que ha tenido acceso infoLibre– embargar a Bankia los 26.708,15 euros que debía haber devuelto a dos de los hijos de un matrimonio ya fallecido, según había dictaminado en una sentencia del pasado 6 de junio. El banco les había vendido preferentes sin informarles del riesgo del dinero invertido.

En este escrito, la jueza da a Bankia plazo hasta el próximo viernes 24 de octubre para que manifieste una relación de bienes y derechos suficientes "para cubrir la cuantía de la ejecución". Asimismo, acuerda el embargo de cualquier ingreso procedente de la Hacienda Pública, así como del dinero que tenga la entidad en el Banco Santander y el BBVA hasta llegar a la cantidad reclamada. Un portavoz autorizado del banco indicó a este periódico que este impago se debe a "un error operativo en la tramitación del pago" y aseguró que "de forma inmediata" procederán "gestionar" el importe en el juzgado.

El 27 de mayo de 2009 el matrimonio formado por Julián C., que entonces tenía 91 años y padecía ceguera, y María C., que según sus hijos no sabía leer ni escribir, invirtieron en participaciones preferentes los 48.000 euros que habían recibido de la amortización de unos bonos de Caja Madrid suscritos dos años antes. Él había trabajado en la construcción y como guardés y ella había sido ama de casa. Y esos euros eran los ahorros de toda su vida. La "confianza con la entidad de muchos años", según explicó uno de sus hijos que estaba en el momento de la firma y compareció como testigo, llevó a este matrimonio de ancianos a suscribir la orden de compra. 

Lo hicieron creyendo que recuperarían su dinero a los cinco años. De hecho, así lo dejó manuscrito Julián en la carpeta en la que guardaba toda la documentación. La jueza determinó que ni se estudió el perfil de ambos "para ofertarles un producto complejo" ni tampoco se les dio la información necesaria para comprender el riesgo de pérdida del capital invertido "no solo por la posible depreciación del valor en caso de venta, sino por las especiales características del mercado secundario en el que cotizan". 

Falta de información 

En la sentencia, Fernández Alcalde señaló que tampoco se había acreditado que el matrimonio tuviera antecedentes de haber contratado productos financieros especulativos o de riesgo, pues habían invertido previamente en dos plazos fijos. Y tampoco que por sus estudios o profesión se les pudiera "atribuir conocimiento añadido en productos financieros complejos ni funcionamiento de mercados secundarios superior al de la media de los ciudadanos". "Por lo tanto ni los padres de los demandantes tenían un perfil inversor adecuado para el producto ni conocimientos personales o antecedentes de inversión que justificaran que lo contrataran. No consta que entendieran ni que se les informara suficientemente de la naturaleza del producto que contrataban y en concreto de su carácter perpetuo que no garantizaba rescatar el capital invertido", señaló en la sentencia. 

Bankia gana 696 millones hasta septiembre

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En 2012, cuando ambos fallecieron, sus hijos María Teresa y Lucio heredaron cada uno 101 títulos de esas participaciones preferentes por un importe nominal total de 20.200 euros. Sin embargo, se dieron cuenta de que no podían recuperar el dinero. Acudieron entonces a la justicia para reclamar que se declarase nulo ese contrato alegando falta de información. Tras el juicio, que se celebró el 3 de febrero de 2014, la jueza anuló la orden de compra y condenó a Bankia a restituir 10.100 euros a cada uno de los hijos más la suma de los intereses. A esa cantidad sólo había que restarle el importe de los rendimientos recibidos por cada uno de los demandantes. En total, la cantidad a abonar –que Bankia todavía no ha pagado– es de 26.708,15 euros (20.544,73 de principal y 6.163,42 de intereses). 

Beneficio de 431 millones 

Bankia obtuvo en el primer semestre de 2014 un beneficio de 431 millones de euros, lo que implica una subida del 48% respecto a los resultados obtenidos en el mismo periodo del año anterior. Estos beneficios se producen después de que la entidad financiera recibiera 22.424 millones del Estado para evitar la bancarrota.