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Los abusos de la banca

El enigma del contrato de Caja Madrid con Lazard de 28 de octubre de 2009

Rodrigo Rato entra en la Audiencia Nacional para declarar como imputado.

El 28 de octubre de 2009 Caja Madrid, todavía con Miguel Blesa de presidente, suscribió un contrato con el banco Lazard, entidad financiera en la que Rodrigo Rato Rodrigo Rato trabajaba bajo la dirección de Jaime Castellanos, amigo personal del propio ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).

La entidad financiera madrileña encargó al banco franconorteamericano, de forma “estrictamente confidencial”, la venta de las acciones que la caja tenía en la compañía asturiana de energías renovables Generaciones Especiales, SA (Genesa). Las acciones se vendieron en junio de 2011, siendo Rato presidente de Bankia.

Venta de Genesa

Lazard obtuvo 1,56 millones por este trabajo, que consistió en vender el 20% de la compañía Genesa al grupo portugués EDP-Hidroeléctrica del Cantábrico, el socio mayoritario, pues controlada el 80% de la empresa. Así, el trabajo del banco de fue sencillo, pues EDP poseía una opción preferente de compra sobre las acciones en poder de Caja Madrid.

Genesa, con sede en Oviedo, nació en 2004 por la fusión de la antigua Genesa, una sociedad de Hidroeléctrica del Cantábrico (HC) para el negocio de la cogeneración eléctrica, y Desa, una compañía madrileña participada por HC y Caja Madrid y dedicada a energías renovables. Las actividades de cogeneración fueron excluidas de la nueva Genesa y asumidas por HC.

Unos 250 millones

Según el diario digital elConfidencial.es, la operación no fue un gran negocio para Caja Madrid, pues apenas ingresó 250 millones, una cuarta parte de lo que esperaba conseguir por esta participación. El contrato hubiese pemitido a  Lazard obtener hasta 7,2 millones si la venta de las acciones hubiera llegado a los 1.000 millones de euros.

En total, los contratos otorgados por Caja Madrid y Bankia desde el 28 de octubre de 2009 se elevaron hasta los 19,6 millones de euros, aunque el banco de Castellanos percibió una cantidad inferior al no cumplir los objetivos marcados en los acuerdos. Como por ejemplo con una fusión bancaria, por la que estaba previsto que Lazard ganara 10 millones de euros.

Matías Amat

El contrato de 28 de octubre de 2009, mediante el cual la entidad financiera madrileña encarga a Lazard que le asesore para que Caja Madrid venda sus acciones en la empresa asturiana Genesa, viene encabezado con el nombre del consejero delegado de la Sociedad de Promoción y Participación Empresarial de Caja Madrid (SPPE), Ángel Córdoba.

Aunque no fue firmado por el director de negocios de Caja Madrid, Matías Amat, en calidad de responsable de la Sociedad de Promoción y Participación Empresarial de Caja Madrid, hasta el 2 de diciembre de ese año, tal y como queda registrado de forma manuscrita en el contrato.

Precisamente, el 2 de diciembre Rato, al que la prensa daba por seguro sucesor de Blesa, ya negociaba en Caja Madrid el reparto de los consejeros de su Presidencia, con lo que chocaba de forma directa con las intenciones del PSOE de Tomás Gómez.

Tarjetas B

Matías Amat fue una de las cuatro personas de Caja Madrid que mantuvieron las tarjetas black con la creación de Bankia, junto con el propio Rato; el ex secretario de Estado del PP José Manuel Fernández Norniella y el director general, Ildefonso Sánchez Barcoj.

La coincidencia de las fechas del contrato, que Jaime Castellanos denomina en la Audiencia Nacional “mandato”, con el periodo en el que Mariano Rajoy hizo pública su decisión de designar a Rato como sucesor de Blesa, han convencido al abogado de UPyD en el caso Bankia, Andrés Herzog, para presentar un escrito en el que solicita al magistrado de la Audiencia Nacional Fernando Andreu que solicite todos los correos electrónicos de Rato en su etapa en Lazard.

Pero también los de la etapa de Rato en Caja Madrid y en Bankia. De esta forma, UPyD quiere determinar si el contrato de 28 de junio de 2009, por el que Lazard acabó percibiendo 1,3 millones de euros, tuvo alguna relación con el cobro de 6 millones por parte de Rato en 2011.

Un millón de dólares

Según la declaración de Castellanos en la Audiencia Nacional, Rato percibía hasta su salida de Lazard el 22 de diciembre de 2009, un millón de dólares anuales, una cifra a la que había que añadir un plus en función de los objetivos conseguidos.

La documentación a la que ha tenido acceso infoLibre muestra que Castellanos facturó un total de 1,56 millones de euros a Bankia entre enero de 2010 y el 27 de junio de 2011 por la venta de las acciones de Genesa, por las que Caja Madrid obtuvo cerca de 210 millones de euros. Esta operación se produjo siendo ya Rato el hombre fuerte de Bankia.

Rato ocultó en su declaración de 20 de diciembre de 2012 en la Audiencia Nacional que en 2011 percibió “un poco más de 6 millones de euros”, un hecho que el exvicepresidente del Gobierno de José María Aznar solo reconoció tras las pregunta del fiscal Anticorrupción Alejandro Luzón en su segunda declaración como imputado, celebrada el 14 de octubre pasado.

Designado por Rajoy

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Pero la coincidencia del contrato con la designación de Rato por Rajoy no es la única a destacar. Pues según el abogado de UPyD Andrés Herzog, el 30 de octubre de 2009, tan solo dos días después de que se firmara el acuerdo por la desinversión de Genesa, el ex director gerente del FMI creó una empresa junto con otros tres compañeros de Lazard.

Rato se vio obligado a reconocer (tras negarlo inicialmente en sede judicial) que desde el 30 de octubre de 2009 tenía negocios con su "amigo" Castellanos, en concreto la propiedad de un local comercial.

El resto de socios en la sociedad denominada Paracuga eran personas vinculadas con Lazard, como por ejemplo Pedro Pasquín, que fue el encargado de firmar los contratos de asesoría a Caja Madrid y a Bankia.

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