El apoyo fiscal de Madrid a la escuela privada cuesta 30 millones de euros al año

La campaña de la declaración de la renta de 2014, que se inicia este martes siete de abril, volverá a incluir beneficios fiscales para los padres de la Comunidad de Madrid que llevan a sus hijos a colegios privados. En 2010 el Gobierno regional del PP se plegó a la exigencia de la patronal de los centros privados (Acade), que venía reclamando más ayudas para las familias que llevan a sus hijos a este tipo de escuelas. Y este compromiso se plasmó en el establecimiento de deducciones fiscales del 15% en el caso de los gastos de escolarización en la etapa obligatoria fuera de la red pública o concertada y del 5% en el caso de los uniformes, prácticamente inexistentes en el ámbito de la educación pública. Estas rebajas –junto a otra del 10% para enseñanza de idiomas– pueden ser de hasta 900 euros por hijo y costaron a las arcas públicas 29,7 millones de euros en la declaración del IRPF 2012, la última de la que hay datos disponibles. En ese ejercicio se beneficiaron de ellas 137.243 contribuyentes con residencia en Madrid. 

Esta medida, puesta en marcha justo cuando empezaron los recortes educativos, pone de manifiesto el especial mimo con el que la Comunidad de Madrid trata a la enseñanza privada a pesar de las restricciones presupuestarias. Y ha sido muy criticada por los colectivos de defensa de la enseñanza pública y los partidos de izquierda, que consideran que son "un regalo fiscal que beneficia a las rentas más altas", al tiempo que afean al Gobierno regional que las mantenga mientras la compra de libros de texto o las cuotas para el comedor o el transporte no gozan de beneficio fiscal alguno en ninguno de los sistema de enseñanza en la Comunidad de Madrid. 

De hecho en 2012, al tiempo que los recortes se consolidaban en las aulas de la enseñanza pública, la Consejería de Educación elevó el nivel máximo de renta con el que se puede acceder a estas desgravaciones fiscales. Hasta entonces, sólo podían acogerse a estos beneficios las familias cuya renta no superara los 10.000 euros por miembro, incluidos los hijos. Esa cantidad se incrementó hasta los 30.000 euros por cada miembro de la familia. De esta forma, parejas con un hijo y con ingresos de hasta 90.000 euros o con dos e ingresos de hasta 120.000 pueden acceder a la deducción. Las ayudas tienen un máximo de 900 euros por hijo. 

Algo discriminatorio, según los padres de la pública 

Desde la Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA) argumentan que las deducciones por uniformes y por asistir a colegios privados atentan contra la igualdad de oportunidades y vulneran el artículo 40 de la Constitución, que indica que los poderes públicos "promoverán las condiciones favorables para el progreso social y económico y para una distribución de la renta regional y personal más equitativa". Según un estudio elaborado por la OCU en 2012, la compra de uniformes es "testimonial" en los colegios públicos. Y es obligatorio en el 87% de los concertados, por lo que toma sentido la crítica de este colectivo que, asegura, se trata de una disposición "discriminatoria".

Ana García, portavoz del Sindicato de Estudiantes (SE), que también engloba a enseñanzas medias, cree que esta es "una más" de las "muchas" estrategias que utiliza la Comunidad de Madrid para favorecer a la educación privada. Esta medida, concluye García, pone sobre la mesa la "hipocresía" de los conservadores. "En el PP no dudan en relajar los requisitos económicos para acceder a estas deducciones mientras para conseguir una beca universitaria hay que tener una renta bajísima".

Una asignatura pendiente del sistema educativo: sólo el 13% de alumnos extranjeros van a la concertada

Ver más

Una rebaja exclusiva de Madrid 

Madrid es la única autonomía que ofrece rebajas tributarias por estos conceptos. Otras comunidades mantienen algún tipo de deducciones para gastos educativos, la mayoría relacionadas con la compra de material escolar. Es el caso de Baleares, que rebaja hasta 200 euros por hijo a las rentas más bajas; Extremadura, que ofrece descuentos de 15 euros por hijo para las familias con rentas inferiores a 24.000 euros; o la Comunidad Valenciana, donde las familias con ingresos de hasta 38.800 en declaración conjunta o 24.000 en individual pueden ahorrarse hasta 100 euros por hijo. Aragón y Castilla-La Mancha han puesto en marcha deducciones similares a partir de este ejercicio de 2014. 

Además, en Canarias hay rebajas fiscales de hasta 1.600 euros para las familias cuyos hijos tienen que marcharse de la isla en la que residen para estudiar en caso de que no exista oferta pública. En 2012, hasta 6.672 contribuyentes se beneficiaron de esta deducción, lo que tuvo un coste de 4.420.385 euros. En Cataluña también son deducibles el 100% de los intereses de los préstamos solicitados para el pago estudios de máster y doctorado. En 2012, un total de 862 contribuyentes utilizaron esta deducción, lo que tuvo un coste total de 469.285 euros para las arcas públicas.