La presidenta del PP madrileño da un paso atrás y anuncia que no volverá a liderar el partido

Esperanza Aguirre anunció este martes que da un paso atrás y que no volverá a ser candidata a liderar el partido. Lo hace después de no haber conseguido la Alcaldía de Madrid y ante las presiones de sectores de su partido para que ceda el testigo. Se avecina, no obstante, tormenta interna. Ella quiere congreso extraordinario ya y Génova no lo autorizará hasta después de las generales. La polémica, pues, está servida.

Aguirre hizo este anuncio ante la plana mayor de su partido, en el Comité Ejecutivo Regional. Una cita a la que no faltaron ni el secretario general de la formación regional y presidente de la Comunidad en funciones, Ignacio González, ni su más que posible sucesora, Cristina Cifuentes. A la exdelegada del Gobierno en Madrid la consideran la sucesora natural de Aguirre, aunque tendrá que pasar por un congreso.

Aguirre da el paso atrás pero pone sus normas. Pide primarias: "Un militante, un voto". Y ofrece toda su "experiencia" para este periodo de transición. "Es hora de la humildad y la generosidad de todos", añadió.

Antes de hacer este anuncio de que se retira pero que quiere un congreso extraordinario cuanto antes, lo que le abre a Rajoy una nueva vía de agua en el partido, la todavía presidenta de los conservadores reconoció que los resultados del 24-M no han sido los esperados. "Es urgente que todos los que formamos el PP de Madrid y, en primer lugar los que formamos el Comité Ejecutivo Regional, busquemos las causas", dijo.

Pero acto seguido citó a los escándalos de corrupción, a la postura mantenida en Cataluña, a la reforma de la ley del aborto y a las políticas en materia de impuestos. Eso, por parte del partido. Porque por su parte también hizo autocrítica. Y admitió que haber "polarizado" la campaña tanto centrándose en Manuela Carmena (Ahora Madrid) pudo tener el efecto contrario y haber generado un voto de rechazo hacia ella.Fallar en el tono

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Fallar en el tono

"Es posible que no acertara con el tono de mi campaña. Con mis críticas contribuí a algún rechazo a la candidatura del PP, al polarizar la atención en la candidatura de Podemos", admitió.

También citó a las informaciones desveladas por infoLibre sobre su declaración de la renta de 2013, año en el que se embolsó 369.000 euros. Aguirre sostuvo que si esta noticia demostró que había dejado el sector privado para pasar a ganar menos dinero en la política, también la perjudicó. De hecho, añadió que ese jueves, cuatro días antes de la cita ante las urnas, los sondeos internos del partido ya le daban "12 puntos menos" que el día anterior en un sector del electorado muy concreto: "Los pensionistas", dijo.