La acumulación de cargos de Cospedal complica al PP las exigencias a Susana Díaz

La polémica sobre la concentración de cargos en una misma persona en el Partido Popular y la forma de hacerlos compatibles dentro de unos estatutos que dejan por escrito el compromiso a la hora de promover una "gradual separación y limitación en la acumulación de cargos institucionales de gobierno y orgánicos" de la formación trasciende las fronteras del partido de Mariano Rajoy. Esta cuestión, que fue objeto de polémica en el último Congreso Nacional por el ajustado resultado de una enmienda contraria a que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, sumase este cargo al de ministra de Defensa, diputada y líder del PP de Castilla-La Mancha, y que da alas a aquellos dirigentes que quieren mantener más de un cargo, ha generado un agujero en el argumentario de quienes reclaman a la socialista Susana Díaz que escoja entre postularse para liderar el PSOE o dedicarse a la Junta de Andalucía.Junta de Andalucía

Fue este domingo, 12 de marzo, cuando la presidenta andaluza confirmó, a través de su entorno, que su puesta de largo como candidata a las primarias socialistas será el 26 de marzo en Madrid. Un día después, la reacción del líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, fue clara. En su perfil de la red social Twitter criticó que la región fuese "segundo plato" para Díaz frente a un PP que sí cree en Andalucía: "Nuestra tierra es lo primero y lo más importante", escribió.

 

Un día después, también a través de Twitter, era más contundente demandando a la presidenta de la Junta que escoja entra la Secretaría General de su partido o el Gobierno regional.

Desde la dirección nacional del PP defienden que el caso de Cospedal y el de la presidenta andaluza no son equiparables porque no se parte de la base del "igual a igual". Que, por tanto, no hay nada que chirríe en el discurso de Moreno.

"Cospedal es secretaria general del partido, es decir la número dos, mientras que Susana Díaz aspira a ser la número uno del PSOE, es decir, a ser equiparable a Mariano Rajoy", mantiene un miembro del Comité Ejecutivo Nacional. Otras fuentes recuerdan que el PP ya ha fijado su posición en casos como el que afecta a la dirigente socialista andaluza. Cuando José María Aznar se hizo con el liderazgo del partido en 1989, recuerdan, dejó la Presidencia de Castilla y León en manos de Jesús Posada.

A día de hoy, Cospedal es secretaria general del PP, diputada nacional y ministra de Defensa. El sábado revalidará su puesto como líder del PP de Castilla-La Mancha, lo que la ubica en el puesto de salida para encabezar la lista del PP a las autonómicas de 2019 por esta comunidad.

Pero también hay en el PP quienes creen que "para exigir a los demás hay que predicar con el ejemplo". "El PP andaluz es uno de los que más ha defendido dentro del PP la no acumulación de cargos y esto se vuelve ahora contra ellos", mantiene un dirigente regional en conversación con infoLibre.  

"Un mensaje envenenado"

Desde el Partido Socialista han intentado ya sacar partido de las lagunas del discurso de los conservadores acusando a Moreno de lanzar "un mensaje envenenado contra Cospedal". Así lo sostuvo el portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, tras escuchar al líder de los conservadores andaluces que era imposible compaginar la presidencia del PSOE con la Junta de Andalucía.

Este mismo martes, Vázquez garantizó que Díaz seguirá trabajando por Andalucía y reclamó "coherencia" a Moreno, que será reelegido líder del PP andaluz este domingo en un acto en el que será arropado por gran parte de la plana mayor de su partido. A su lado estarán Mariano Rajoy; la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; el vicesecretario de Autonomías y Ayuntamientos, Javier Arenas, y el coordinador general y vicesecretario de Organización, Fernando Martínez-Maillo.

A juicio de Vázquez, Moreno está demandando al PSOE asuntos que no demanda ni a su propio partido. 

Sobre las "incompatibilidades" de las que habla el PP andaluz, añadió el portavoz del Ejecutivo regional, hay que empezar por el propio Moreno, que es senador y preside la Comisión de Incompatibilidades del Senado, y ejerce la oposición en Andalucía, informa Europa Press.

Vázquez añadió que además hay presidentes provinciales del PP que son secretarios de Estado en ministerios, como José Antonio Nieto (Córdoba) o José Enrique Fernández de Moya (Jaén). Y Juan Ignacio Zoido, ahora ministro del Interior, fue concejal en el Ayuntamiento de Sevilla, portavoz en el Parlamento andaluz y presidente de los conservadores andaluces.

La ponencia Política y de Estatutos del congreso nacional del PP, aprobada el pasado febrero, fija las reglas de juego que el partido va a aplicar en los congresos regionales y, si se cumplen tal y como refleja la literalidad del texto, algunos cargos tienen complicado repetir. 

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Excepciones para las incompatibilidades

Esta polémica llega en un momento en el que dirigentes conservadores de varios territorios reclaman que el caso de Cospedal sea una excepciónsea una excepción y que no se tienda a la acumulación de cargos. "Los Presidentes y Secretarios Generales Provinciales e Insulares del Partido sólo son compatibles con cargos de representación institucional en corporaciones locales y provinciales, en Parlamentos Autonómicos y el Senado", puede leerse en los estatutos. Otro de los apartados refleja que "no podrá desempeñarse más de un cargo territorial de presidente o secretario general en el partido, ni acumularse a éste más de un cargo de representación institucional, local, autonómica o nacional".

Como recordaba el portavoz del Gobierno andaluz, uno de los principales focos de conflicto está en Andalucía. Afecta a Antonio Sanz, José Antonio Nieto y José Enrique Fernández de Moya. Antonio Sanz es presidente del PP de Cádiz y delegado del Gobierno en Andalucía. José Antonio Nieto es líder de los conservadores de Córdoba y secretario de Estado de Seguridad. Y José Enrique Fernández de Moya, presidente del PP de Jaén, es secretario de Estado de Hacienda. Si quieren seguir ostentado estos cargos, debe ser la dirección nacional del partido, a través de la Oficina del Cargo Popular, órgano de nueva creación, la que autorice las excepciones al régimen de incompatibilidades.