Las autoridades mexicanas encuentran una fosa común con 250 cráneos en el estado de Veracruz

Este martes el fiscal del estado mexicano de Veracruz, Jorge Winckler, confirmaba la aparición de la que podría ser "la mayor sepultura clandestina de todo México y quizás del mundo". La fosa, en la que se encontraron "cerca de 250 cráneos", se encuentra situada en las Colinas de Santa Fe, una zona en la que se espera que aparezcan más narcofosas.

El Colectivo El Solecito, conformado por madres de desaparecidos y ubicado en Veracruz, comenzó el pasado mes de agosto las labores de búsqueda de cuerpos en fosas comunes, contando con el apoyo de dependencias estatales y profesionales, y el pasado viernes dieron cuenta del descubrimiento a la Policía Científica, con el objetivo de que ésta llevara a cabo los estudios necesarios para confirmar la identificación de los cuerpos.

A falta de confirmación de las autoridades, la fosa es la más grande de México. Tal y como aseguraba la fundadora y coordinadora de la agrupación, Lucy Díaz, a BBC Mundo "hemos encontrado (cadáveres) con muchísimo tejido y otros ya esqueletizados" y añadía que "la edad promedio es muy joven, calculo de entre 14 y 24 años", así como que basándose en la ropa de los restos "hay muchas chicas".

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Sobre la situación de Veracruz, Winckler aseguraba a la cadena Televisa que "durante muchos años el crimen organizado desapareció personas con complacencia de la autoridad", añadiendo que "las botaron en fosas que fueron específicamente para esto". De ahí que en la actualidad se espere la aparición de más narcofosas, como son denominadas, ya que este estado se encuentra actualmente sumido en una guerra entre los cárteles, particularmente entre Los Zetas y Jalisco Nueva Generación.

La situación se intensificó a lo largo del mandato del gobernador Javier Duarte, del oficialista Partido de la Revolución Institucional (PRI), y que actualmente se encuentra prófugo de la justicia desde el pasado mes de octubre, poco después de que dejara su cargo 48 días antes de que finalizara su mandato.

Así mismo, Winckler aseguraba que "durante el gobierno de Javier Duarte se dedicaron a engañar a los colectivos de familias de desaparecidos", a los que se les tomaban muestras de ADN asegurándoles que se compararían con los restos encontrados, aunque ésto no se llevaba a cabo. Por ello, además de estar acusado de malversar recursos públicos, Duarte está señalado por incumplimiento del deber legal y tolerar la violencia en el estado.