Los libros
En un solo día
WassalonSalvador J. TamayoEolasLeón2017Wassalon
Un día después de los atentados terroristas de Bruselas en marzo de 2016, un joven inmigrante español en Bélgica acude a lavar su ropa en una lavandería pública de Brabantdam y encuentra el cuerpo de una mujer dentro de una lavadora. A partir de esta anécdota el autor, un alter ego del protagonista, recrea la vida en la capital europea de los que como se afirma al comienzo de la novela, no lavan la ropa sino que alistan un uniforme para la batalla. Un barrio donde conviven sin mayor problema inmigrantes llegados de multitud de países, de culturas y religiones diferentes se convierte después de los atentados en un foco de atención mundial donde se cree que pueden estar refugiados los terroristas no detenidos. Ser diferente se convierte entonces en una posibilidad de ser también sospechoso en una ciudad en que hasta el modo de lavar tu ropa te identifica con una clase social. Mezclada con la historia de suspense del cadáver encontrado, al que el protagonista decide bautizar como Sara, esta breve novela nos cuenta cómo un joven español se ve obligado a dejar su país por no encontrar un trabajo acorde a su formación y termina en otro país, con otro trabajo que tampoco tiene que ver nada con lo que estudió en España, y además en otro idioma que no había estudiado anteriormente. La historia del cadáver no es sino una excusa para mirar alrededor y –como afirma el propio autor– tratar de explicar el momento en el que transcurre la historia, cómo el personaje se relaciona con su entorno, con el poder, con su cuerpo y con su tiempo.
“Nunca me habría planteado venir a Bélgica si no fuera por Marta”, se dice a sí mismo como justificación de un viaje sin billete de vuelta; un viaje para el que todo lo necesario cabe en una maleta de veinte kilos. Los recuerdos no pesan, el país que se dejó atrás sí pesa, aunque sólo dos horas de vuelo te separan de tu casa: “¡Yo no tengo casa!”, dice Ernesto a quien quiera escucharle. En esos recuerdos y en esos recuentos que el protagonista hace conversando con Marta o pensando, mientras vuelve de la comisaría donde le han interrogado acerca del cadáver encontrado, aparecen desde Nina Simone a Luis Cernuda, desde los cereales japoneses importados a las canciones de Nirvana, desfilan dinosaurios y periodistas del New Yorker, Ramón J. Sender, Ana Rossetti o Almodóvar.
La novela sucede en un sólo día, desde el hallazgo del cadáver y el traslado a la comisaría hasta que Ernesto, el protagonista, puede volver a por la ropa que dejó olvidada en la lavandería y ponerla por fin a lavar y a secar como hacen otras muchas personas en Bruselas, Londres, Madrid o Berlín, jóvenes en su mayoría que buscan la oportunidad de una vida mejor, o distinta, o simplemente en paz. En medio de esas horas en que sucede la novela, el autor nos cuenta cómo transcurre la vida en la ciudad, cómo un joven islamista es detenido antes de llegar a Siria tras cometer el error de llamar a su madre desde Estambul, cómo Marta abandona a Ernesto y este encuentra a Alicia, a quien sólo preocupa si tiene o no lavadora en su apartamento, mientras Europa deja de ser un espejismo y se convierte para muchos en un espejo que acaba por devolvernos nuestra propia imagen, la de un país cuyos jóvenes, como el protagonista de esta novela, llegan a un aeropuerto, por ejemplo el de Zaventem en Bruselas, y sueñan con ir todavía más lejos, viajar al espacio al ver allí un cohete de siete metros idéntico al que aparece en Aterrizaje en la luna, de Tintín, y en comer patatas fritas bajo gravedad cero escuchando música de Strauss mientras piensa: “No quiero morirme tan lejos de casa. Un país no tiene que estar en guerra para que quede destrozado. Todos los exilios son políticos. Soy expatriado, soy emigrante, soy exiliado. Aunque estés entre nosotros no eres uno de los nuestros”.
Salvador J. Tamayo (San Fernando, Cádiz, 1986) es Licenciado en Historia y Master en Estudios Hispánicos. Su primer libro, una colección de relatos titulada Salitre fue publicado en 2013, y con esta primera novela confirma un rumbo ascendente en su narrativa. Wassalon es un libro reflexivo, irónico y tierno al mismo tiempo, descarnado en algunos momentos y fiel a una realidad que vemos pero no siempre miramos detenidamente.
*Javier Bozalongo es poeta y editor. Su último libro, Javier BozalongoTodos estaban vivos (Esdrújula, 2016).