Rajoy reúne a sus barones y no menciona a Cs: "Era para hablar de España y de los españoles"

La preocupación en las filas conservadoras ante el avance de Ciudadanos en las encuestas estuvo este lunes ausente del almuerzo al que Rajoy convocó a los presidentes autonómicos del PP. Uno de los debates más extensos tuvo que ver con la financiación autonómica, según coinciden las fuentes consultadas. El ministro de Hacienda, presente en la cita, aseguró que no se contempla ninguna quita de deuda.

La reunión fue convocada para marcar las prioridades del partido de cara a los próximos meses y para intentar establecer un punto de partida común para cuestiones relevantes, como la citada financiación autonómica. La relación con Ciudadanos en un momento en el que un sector importante del electorado conservador se siente atraída por la formación de Albert Rivera era otro de los puntos que los asistentes confiaban en que fuese puesto sobre la mesa por Mariano Rajoy. Pero no fue así. 

Los conservadores no ocultan que el partido naranja les ha comido terreno y que tienen que reaccionar si no quieren que en las autonómicas y locales del año que viene ocurra algo similar a lo ocurrido en Cataluña. Pero ven fundamental intercalar las críticas a este partido con poner el foco en la capacidad del PP para plantear y ejecutar medidas. Son un partido de Gobierno, destacan, que toma decisiones. "Y esto es algo que Ciudadanos no pueda hacer y que ni siquiera se atreve a hacer en Cataluña [en alusión a la negativa de Inés Arrimadas a intentar una investidura]".

"Ni un segundo. Ni un minuto. Nada", señaló el vicesecretario de Organización, Fernando Martínez Maillo, preguntado en la rueda de prensa posterior sobre el tiempo que se había dedicado a hablar del partido de Albert Rivera. Ni de Ciudadanos, "ni de crisis de Gobierno, ni de nada por el estilo"."Esta reunión no era para hablar de nadie más que de España y de los españoles", añadió.

Sí señaló en clave interna que el encuentro había servido para reflejar "la unidad del PP en torno al liderazgo de Rajoy".

Después diría que tampoco se mencionó la palabra "encuestas". El almuerzo se extendió por más de tres horas.

Que gobierne "la lista más votada"

Más allá de qué debe hacer el PP para frenar a Cs, sí se habló en la reunión del partido de Rivera de forma indirecta. Cuando se puso sobre la mesa el tema de Cataluña, uno de los focos se puso sobre Inés Arrimadas y su negativa a intentar someterse a un debate de investidura para "desbloquear" la situación. Y también cuando se tocó el tema de la reforma electoral que proponen Ciudadanos y Podemos. 

"Pedimos a Torrent que abra una ronda de consultas urgente porque esta parálisis provocada no puede continuar", dijo Maillo mientras pedía a Cs y a Arrimadas "que dejen de hacer la estatua de sal, que asuman su responsabilidad y que no conviertan el voto útil en una victoria inútil". 

Respecto a la reforma electoral, insistió en que se trata de un asunto que "afecta a la columna vertebral del Estado" y que "no debería modificarse sin consenso". "La propuesta de reforma electoral del PP es que gobierne la lista más votada en Comunidades y Ayuntamientos. Que apoyen esta iniciativa para que se respete el voto de los ciudadanos y que no se cambien en reuniones en bares o despachos", mantuvo.

El mensaje de Montoro

En el encuentro, Cristóbal Montoro lanzó un mensaje de tranquilidad a los barones del Partido Popular. A la salida de la cita, que había arrancado a las 13.45 con una foto de familia, los asistentes confirmaron que el titular de Hacienda había garantizado que no tiene en mente una quita de la deuda para el futuro modelo de financiación autonómica. Así lo aseguraron, por ejemplo, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo y el de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. Y así lo confirmaría después el vicesecretario de Organizacion del PP en rueda de prensa.

"No se contempla ninguna quita de ninguna deuda. Las deudas hay que pagarlas", dijo. Además, Martínez-Maillo zanjaba la posibilidad de cualquier división interna por esta cuestión: "En la reunión de hoy no ha habido ningún líder regional que haya defendido la quita. Ninguno".

Como ha insistido en las últimas semanas, Rajoy subrayó a puerta cerrada que no podrá haber un sistema de financiación autonómica sin el acuerdo del PSOE. En todo caso, el PP anunció que va a empezar a elaborar un documento de trabajo sobre esta materia para trasladárselo al Partido Socialista. También se trabajará para un pacto sobre el agua y una estrategia nacional sobre el reto demográfico.

A la cita, además de la cúpula de la formación y del ministro de Hacienda, estaba convocada la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que repasó los acuerdos de la Conferencia de Presidentes de hace un año.

"Ponerse las pilas"

A su llegada a la sede nacional del PP, los barones fueron preguntados por los periodistas sobre si existe preocupación por el auge de Ciudadanos en las encuestas. Un auge que se produce después de haber sido la fuerza más votada en Cataluña.

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Para José Antonio Monago, líder del PP extremeño, sería "absurdo" decir que no hay preocupación por el ascenso de Cs que recogen las encuestas. Pero a renglón seguido dijo que este hecho tiene que servir para que el PP se ponga "las pilas" y "mejorar" aquello que sea necesario.

"Que haya más competencia en tu espectro electoral tiene que ser un recurso para mejorar lo que tengamos que mejorar", sostuvo Monago. El dirigente conservador alabó que Mariano Rajoy convoque este encuentro de trabajo con sus barones territoriales para coordinar posiciones ante debates como el de la financiación autonómica.

Mientras, Juan Vicente Herrera consideró que el partido de Rivera ha venido "para quedarse" y que el PP debe "contar con ellos". Él mismo recordó que gobierna en Castilla y León con el apoyo de Cs y no es "ningún drama".