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Rosa María Mateo reconoce su hartazgo ante una "campaña difamatoria" política y mediática

La administradora provisional única de la corporación RTVE, Rosa María Mateo.

La comparecencia urgente de Rosa María Mateo, administradora provisional de la Corporación RTVE, ante la Comisión Mixta de Control Parlamentario para explicar los motivos que la llevaron a crear una sociedad mercantil, ha sobrepasado la paciencia de la periodista. Mateo mantuvo este martes un tenso encontronazo con el diputado del Partido Popular Ramón Moreno, quien no sólo apeló a la actividad de la profesional, sino que sugirió un "conflicto de intereses" tras aludir al trabajo como traductor de su hijo, Germán Ponte Mateo, en diversos programas de la cadena de televisión años atrás.

Lo cierto es que Rosa María Mateo, tal y como confesó a su entorno más directo y como ella misma admitió a lo largo de la comparecencia, no incluía entre sus planes responder a las alegaciones del diputado conservador. Sus intenciones, no obstante, dieron un giro cuando Moreno centró su intervención en el hijo de la periodista.

"Su hijo, Germán Ponte Mateo, administrador de Yunbi SL y propietario del 49% de las acciones, explica en su propia web que trabaja y ha trabajado para RTVE como traductor de entrevistas, series, correspondencias y documentales" en programas como Días de Cine, Corazón Corazón, La Mandrágora, Gente, Así se hizo o Los conciertos de la 2. También explica, añadió el diputado, "sus labores como traductor para la sección Ideas de El País, perteneciente al grupo Prisa, con el que TVE ha mantenido relaciones empresariales este mismo año". Estos trabajos "suponen sin duda un conflicto de intereses familiares con proveedores de contenido relacionados con RTVE", zanjó.

Pese a que Rosa María Mateo aseguró en un primer momento que no contestaría al portavoz conservador, "porque no merece la pena", la periodista no tardó en estallar. "Es usted muy mezquino y muy miserable", espetó. "Ha sacado a mi hijo a relucir", añadió una vez el barullo fraguado en la sala remitió, "entienda usted que una madre se moleste". Después de insistir en que "nombrar a los hijos es algo que no se debe hacer", Mateo aclaró que su hijo "trabajó hace años como traductor en TVE", un empleo que negó haberle buscado. "Nadie supo que era mi hijo, trabajó como traductor de inglés y trabajaba esporádicamente cuando le llamaban", reiteró.

A raíz de este último episodio, Rosa María Mateo ha mostrado un manifiesto hartazgo respecto a una campaña que no considera únicamente política, sino también mediática. Una campaña, dice, basada en la personalización y en las acusaciones hacia la periodista, que reconoce albergar dudas respecto de su continuidad en el cargo, incluso en el actual periodo provisional.

En la propia comparecencia del martes, Mateo admitió que "todo el mundo" dice que "estas comparecencias son un teatrillo" y como tal no le deben "afectar". "Yo ya sé que están tirando contra el PSOE, pero es un teatrillo muy desagradable", lamentó, para finalmente añadir que "hay que atenerse a él porque la ley así lo dice y la democracia lo merece".

A lo largo de su primera intervención, Moreno ya había criticado con duras palabras a Mateo, asegurando que "tiene un problema grave" de "opacidad, desprecio al control democrático de su gestión y falta absoluta de transparencia". Su problema, añadió, es "sentirse impune y creer que al rebufo de tantos y tantos escándalos del Gobierno, el suyo iba a pasar desapercibido", en referencia a la sociedad patrimonial creada en 1993 y respecto a la que Mateo había dicho previamente no haber tenido "notificación alguna por parte de Hacienda en los 25 años de vida que ha tenido en cuanto a la liquidación de los diferentes impuestos de la que es sujeto pasivo".

Moreno denunció asimismo que la periodista se entregue al "secreto, desprecio, soberbia, insulto y déficit democrático de quien por su origen arbitrario se siente impune a cualquier control y a dar explicaciones". Tras la respuesta de Mateo, el diputado conservador subrayó que "jamás había visto un gesto parecido por parte de una compareciente" y añadió que "desde luego, pasará a la posteridad en esta Cámara por algo vergonzante". Este miércoles, el Grupo Popular solicitó amparo a la Presidencia del Congreso de los Diputados "por las faltas de respeto" de la administradora.

Campaña de desprestigio

La percepción de "campaña de desprestigio" denunciada por Rosa María Mateo es compartida. La parlamentaria de Podemos Noelia Vera afirmó también durante su intervención que el PP es el principal impulsor de dicha "campaña de desprestigio y tipo de oposición que han decidido hacer las derechas para desprestigiar al actual Gobierno del PSOE y cualquier tipo de acuerdo al que pueda llegar con otros grupos parlamentarios". El diputado socialista José Miguel Camacho, por su parte, pidió tranquilidad a Mateo porque el tema "no va contra ella", sino contra el Gobierno de Pedro Sánchez.

En su anterior comparecencia ante la Comisión Mixta, la primera de ellas, Rosa María Mateo también tuvo que asumir el tono bronco suscitado por los miembros del Grupo Popular. La administradora única provisional de la Corporación negó entonces la existencia de purgas en el seno del ente público –purgas que los propios trabajadores tacharon de "falsas acusaciones"–. El PP insistió en sus acusaciones de manipulación respecto a los actuales Informativos de TVE, a lo que Mateo recordó las más de 600 denuncias documentadas por censura y manipulación durante la etapa anterior.

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"Los cambios se han hecho por criterios de profesionalidad y dentro de la plantillas de TVE y RNE", mientras que "en la etapa anterior se realizaron más de 50 contrataciones externas, la mayoría procedentes de medios privados", afirmó la periodista, quien añadió que "no se ha echado a nadie de los cesados y todos los exdirectivos mantienen un sueldo anual de entre 65.000 y 70.000 euros".

Sin embargo, la "campaña de desprestigio" a la que alude Rosa María Mateo no atañe únicamente a las formaciones políticas. Ciertos medios de comunicación se han sumado, a través de la publicación de contenido cuyo principal propósito es "desprestigiar" a la Corporación, así como a la figura de su administradora y de los periodistas que dirigen algunos de los espacios más populares. En este artículo publicado por infoLibre, el periodista Xabier Fortes, vicepresidente del Consejo de Informativos de TVE, relata algunos de los dardos lanzados por parte de Alfonso Rojo en su web, Periodista Digital. También Ok Diario, periódico citado por el diputado conservador Ramón Moreno a lo largo de su intervención el pasado martes, es otro de los ejemplos más evidentes de la "campaña de desprestigio" alimentada también por determinados medios de comunicación, según el entorno de la administradora de RTVE. "Rosa María Mateo censura el pañuelo de Jesús Álvarez y Emilio de Andrés en TVE por parecer de derechas"; "TVE en su línea: entrevista al cantante proetarra Fermin Muguruza denunciado por la AVT" o "El lechero Fortes compara al Madrid en TVE con la ultraderecha italiana" son sólo algunos de los últimos titulares que dedica el periódico de Eduardo Inda al nuevo equipo de RTVE.

Pese a las lacerantes críticas, los datos más recientes respecto a la Corporación no parecen sugerir malas noticias. El programa dirigido y presentado por Fortes, Los desayunos de TVE, logró en octubre su mejor dato de temporada con un 13,8 de audiencia, mientras que en el mismo mes la audiencia de los Informativos de TVE se incrementó un 1,1%, la subida más alta de octubre desde el año 2011, tal y como reveló Mateo en la comparecencia del martes. "Audiencia y rigor no siempre van de la mano y a mí me preocupa más la calidad que la audiencia", subrayó el martes Rosa María Mateo ante los parlamentarios.

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