Crisis del coronavirus
Casado insiste en acusar a Sánchez de mentir y certifica en el Congreso su negativa a llegar a acuerdos
Las posibilidades de que el PP llegue a acuerdos con el PSOE al hilo de la mayor crisis sanitaria, económica y social que ha vivido España en muchos años son iguales a cero. Es es, al menos, lo que se desprende las palabras de su líder, Pablo Casado, en la sesión de control de este miércoles en el Congreso, en la que acusó al presidente Pedro Sanchez de mentir a todo el mundo y de hacer “el ridículo”. Algo que, apostilló, no puede pedirle que haga también él. Las palabras de Casado aclaran el recorrido que cabe esperar a de la comisión parlamentaria para la reconstrucción económica y social que él mismo acordó con Sánchez la semana pasada.
Al tono muy crítico empleado por el líder conservador respondió Sánchez recordando que en las crisis “hay salidas y salidas”. Esta vez, subrayó, lo que está pasando no servirá de “excusa” para recortar el Estado del bienestar, para abandonar el objetivo de aplicar “una fiscalidad justa” o para renunciar a la transformación ecológica de la economía. En estas medidas, reconoció, hay “ideología”: el “anhelo de justicia social de este Gobierno”.
Previamente Casado había acusado al presidente de mentir a todo el mundo: a los manifestantes del 8M, de ocultar recomendaciones de la OMS, de mentir sobre el número de fallecidos, sobre los recortes sanitarios del PP, de ocultar a la Unión Europea el déficit español y de defender una “agenda radical” contra el rey, la justicia y los medios de comunicación. Sin olvidar, como cada vez que se dirige a Sánchez, su demanda de declaración de luto oficial sin esperar a que la pandemia siga cobrándose vidas humanas como se comprometió Sánchez a hacer este martes.
En la misma sesión de control, Sánchez evitó negar ayudas públicas a las empresas que no hayan cumplido con sus obligaciones fiscales en España como le pidió el portavoz de Más País, Íñigo Errejón, y devolvió las críticas que le dirigió el portavoz de Ciudadanos, Edmundo Val, recordándole que su partido gobierna en la Comunidad de Madrid, uno de los focos principales de la enfermedad.