Sevilla homenajea a Ana Orantes 25 años después de su asesinato: "Marcó un antes y un después"
El Ayuntamiento de Sevilla, a través del Área de Igualdad y Recursos Humanos, ha rendido este sábado un homenaje a Ana Orantes con motivo del 25 aniversario de su asesinato a manos de su ex marido, al considerar que "marcó un antes y un después" en la lucha contra la violencia machista, según informa Europa Press. El acto se ha celebrado en la calle que lleva su nombre desde 2019, junto a la Alameda de Hércules, según ha trasladado el Consistorio en un comunicado, donde ha añadido que el evento ha contado con la presencia de representantes del Consejo Municipal de la Mujer y de otras entidades de la ciudad, la delegada de Igualdad y Recursos Humanos, Clara Macías.
Macías ha destacado que "el caso de Ana Orantes y su relato público marcaron un antes y un después en las políticas de lucha contra la violencia machista en nuestro país, pero tenemos que hacer una reflexión sobre la situación en la que estamos". "La hacemos precisamente hoy que nos levantamos con una nueva muerte por violencia de género, en este caso el asesinato de una mujer en Montequinto. Tenemos que seguir luchando y remover las conciencias sobre esta lacra y, sobre todo, ante quienes se empeñan en seguir blanqueando la violencia machista", ha dicho.
Tras esto, el Ayuntamiento ha recordado que rotuló en 2019 esta vía se encuentra en el Casco Histórico, junto a la Plaza Pedro Zerolo y la Alameda de Hércules con el nombre de Ana Orantes. Esta iniciativa pretendía conservar la memoria de una víctima cuyo testimonio en televisión, dos semanas antes de su asesinato a manos de su ex marido sacó la violencia machista del ámbito doméstico para convertirla en un asunto de interés público e impulsó el cambio de la legislación, la judicatura y la perspectiva que se mantenía sobre estos asesinatos hasta ese momento.
Igualdad confirma un nuevo crimen machista y eleva a 41 las mujeres asesinadas en 2022
Ver más
Ana Orantes contrajo matrimonio con su entonces pareja, José Parejo, en 1956, y tuvo once hijos de los que murieron tres por causas naturales. Los restantes testificaron en la causa judicial los continuos malos tratos del padre hacia su madre y los abusos hacia ellos mismos, que provocaron la precipitada salida de muchos de ellos del domicilio familiar, como fue el caso de la segunda hija, de nombre Ana, que se casó con tan sólo 14 años. Las continuas situaciones de maltrato provocaron diferentes denuncias e intentos de separación a partir de los 80.
Después de la aprobación de la Ley del Divorcio, Orantes llevó a tribunales la situación, donde se decidió la separación legal de la pareja en 1996 aunque se permitió que compartiesen la propiedad, repartiéndose las dos plantas del inmueble. La mujer y sus hijos trataron en varias ocasiones de adquirir la titularidad de la planta baja de su marido a través de diferentes ofertas de compra que no aceptó.
En 1997 decidió manifestar su testimonio en un programa televisivo andaluz durante una comparecencia de 35 minutos en los que detalló agresiones así como intento de abusos de los hijos de la pareja. Trece días después, cuando Parejo volvía de recoger una nueva denuncia, se encontró con Ana Orantes en el jardín común de la vivienda que compartían, donde acabó con su vida.