Guía para escapar de las subidas de precios de los cuatro gigantes del oligopolio telefónico

Es altamente probable que al lector le haya subido la factura del teléfono, aunque aún no lo haya advertido. Los cuatro grandes grupos, que gestionan 9 de cada 10 líneas, han anunciado subidas de precios desde noviembre. Movistar y Vodafone los subirán entre un 6,8% y 6,5% respectivamente a partir de este mes. Orange, los subirá entre dos y cinco euros a partir de marzo. El grupo MásMóvil los ha subido a su propia marca y también los de Yoigo, marca bajo el paraguas del grupo. El mercado es un espejismo de opciones, ya que este oligopolio controla decenas de marcas como O2, Lowi, Jazztel o Yoigo aunque algunas, de momento, no se han visto afectadas por las subidas de precios. ¿Cómo puede esquivar el usuario el aumento de la tarifa? 

Este pasado miércoles, la CNMC ha avanzado que está a punto de cruzarse un récord. En noviembre de 2022, último dato disponible, hubo 49,9 millones de líneas de teléfonos móviles con conexión a Internet de banda ancha. Esto es un 2,9% más que en el mismo mes de 2021 y un 18,5% del mismo mes de cinco años antes, 2017. En este último lustro, España ha sumado casi 8 millones de líneas de teléfonos móviles con acceso a Internet.  

Pese el crecimiento sostenido de las líneas y un gran número de marcas, la oferta se concentra en los cuatro grandes grupos empresariales. Según los datos de la CNMC, en noviembre Movistar controla el 27,7% del mercado; Orange, el 22,5%; Vodafone, el 22,2% y MásMóvil, el 20,7%. Esto suma el 93%. El 7% restante lo componen pequeñas compañías que alquilan las redes de las grandes. En el mercado de las líneas fijas de Internet no difiere mucho: las cuatro grandes amplían su presencia al 95%. 

Una concentración basada en adquisiciones

En poco tiempo, es posible que estos cuatro principales actores pasen a ser tres. La potencial fusión entre Orange y MásMóvil crearía el grupo de telefonía más grande de España, con una cuota del mercado de entorno al 43%. Está previsto que en el primer trimestre ambas compañías comuniquen su decisión a Bruselas, para que las autoridades de la competencia europeas den el visto bueno.

El mercado está compuesto por operadores con red propia y los llamados OMV (Operadores Móviles Virtuales): empresas sin red de cobertura propia que alquilan el uso a las más grandes. Aparentemente, la oferta de OMV es amplia: O2, Lowi, Jazztel, Simyo, CableMóvil, Embou, YouMobile, Yoigo, Pepephone, LlamaYa, Virgin, Euskaltel, R, Telecable, Lebara… Pero todas estas marcas pertenecen a los cuatro grupos mayoritarios. O2 es marca de Telefónica (dueña de Movistar), Lowi pertenece a Vodafone; Simyo y Jazztel, a Orange y todas las demás al grupo MásMóvil. 

En este proceso, donde las grandes operadoras van devorando a las pequeñas, muchas acaban diluyéndose completamente. Es lo que pasó con Amena, Tuenti o República Móvil: fueron absorbidas por las grandes, que acabaron empujando a sus clientes a migrar a otras marcas de la compañía. Por ejemplo, Orange está transfiriendo los clientes de Amena a Simyo; Telefónica hace lo suyo con los de Tuenti, hacia O2. 

Cuando una pequeña contraataca con bajadas de precio

Las principales marcas han subido. Movistar anunció una subida del 6,8% de media a partir de enero, justificando los costes crecientes de la prestación del servicio entre otros motivos, por la inflación y por cambios regulatorios. El paquete de televisión básica y el fútbol subirá un 5,6%. Vodafone subirá a finales de mes una media de cuatro euros sus servicios, lo que supone una subida del 6,5%. El comparador Kelisto ha calculado que este aumento de precios supondrá 486 millones en ingresos adicionales para ambas compañías.

Orange subirá los precios a partir del 12 de marzo. Todos los paquetes de móvil y fibra costarán dos euros más; los canales de televisión que incluyen el fútbol, cinco euros más. La justificación ha sido la necesidad de realizar inversiones en la red. "Hemos sido los últimos en aumentar los precios, hemos aguantado un tiempo pero ante la elevada inflación del año 2022 nos hemos visto obligados a tomar esta decisión", explicaron fuentes de la compañía tras el anuncio.

Otras marcas controladas por estos cuatro grupos sí han mantenido los precios. Es el caso de O2 (Telefónica), Lowi (Vodafone), Simyo (Orange) o Pepephone (Másmóvil). No obstante, los portales especializados en comparar tarifas han advertido que estas marcas han ido eliminando ofertas, promociones y sus tarifas más baratas, lo que en la práctica supone un recorte en la elección del consumidor.  

En este panorama, una empresa pequeña ha copado todos los titulares este lunes, al ir contracorriente y anunciar una bajada de precios, en un evidente esfuerzo por aumentar su cuota de mercado, aprovechando el encarecimiento de los servicios de los grandes. Se trata de Digi, el quinto operador móvil. Es de una OMV que usa la red de Movistar. La CNMC no dispone de datos precisos sobre su actual cuota de mercado, pero en cualquier caso, queda muy por debajo de las cuatro primeras compañías. 

La oferta de Digi es muy agresiva, a tal nivel, que ha sido recogida por numerosos medios de comunicación: fibra en casa por 500 megas por 15 euros al mes. A este servicio se le puede añadir una línea móvil con llamadas ilimitadas y varias opciones de tarifas de datos: 10GB (5 euros más), 20GB (6 euros más) o 50 gigas (8 euros más). Es decir, que por 23 euros ofrece un paquete completo de internet en casa y móvil, muy por debajo de los precios del sector.  

Con esto, Digi se corona en el ranking de los paquetes más baratos que incluyen servicio de internet y móvil. Según los datos comparativos que ha recabado infoLibre, la segunda en el ranking es Fi Network, otra OMV independiente, que ofrece servicio de fibra de 300Mbps, con llamadas ilimitadas y 10GB de datos por 29,90 euros. Le siguen Lowi, O2 y Simyo tres marcas pertenecientes a MásMóvil, Vodafone y Telefónica, por alrededor de 35 euros cada una.