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La Premier League prohíbe la publicidad de apuestas en las camisetas... pero hace la vista gorda en todo lo demás

Imagen de un partido entre el Manchester United y el Newcastle.

Sí, pero no. La Premier League se queda a medio camino en su decisión de prohibir la publicidad de las casas de apuestas en las equipaciones de sus clubes. La decisión, tomada al mediodía de este jueves por acuerdo de todos los equipos, tan solo afecta al patrocinio de la parte delantera de las camisetas, pero no a otros lugares de la ropa como, por ejemplo, las mangas o los propios estadios, donde se podrá seguir mostrando este tipo de publicidad

La Premier League destaca en el comunicado el carácter “voluntario” de la medida y que se ha tomado con el objetivo de “reducir la publicidad de las apuestas”. La prohibición entrará en vigor en la temporada 2026/27, lo cual permitiría a los clubs que ahora mismo tienen patrocinios en vigor terminarlos y obtener margen de maniobra para recalibrar las cuentas, ya que, actualmente, la publicidad de casas de apuestas genera un impacto económico de más de 60 millones de euros por temporada en la liga inglesa.

La decisión de la Premier se produce después de que el gobierno británico tuviera previsto publicar a finales de este mes de abril una regulación más fuerte sobre la publicidad de las casas de apuestas, que afectaría a los patrocinios actuales de los equipos. Por eso, la liga se ha adelantado y ha tomado esta decisión acordándola, además de con los clubs, con el Ministerio de Cultura, Medios y Deporte del gobierno presidido por Rishi Sunak.

La regulación de las apuestas deportivas en Reino Unido no es nada nuevo. El juego representa un problema creciente en la sociedad británica, el cual afecta a 430.000 personas, sobre todo en las capas más desfavorecidas de la población, afirman organizaciones que se dedican a prevenir la ludopatía. De hecho, según estimaciones gubernamentales, las pérdidas monetarias ligadas a las apuestas producen un suicidio al día en el país anglosajón. Este contexto llevó al anterior gobierno conservador de Boris Johnson a comenzar a tomar medidas para frenar el problema, como prohibir el uso de tarjetas de crédito para apostar o dar los primeros pasos para excluir el patrocinio de las casas de apuestas en el deporte.

La medida ha provocado reacciones enfrentadas en la sociedad inglesa. The Big Step, una asociación que busca erradicar la publicidad de las apuestas en el fútbol, opina, en declaraciones al diario británico The Guardian, que el acuerdo es “un paso enorme, aunque no es perfecto”, reconociendo “el daño causado por las apuestas”. 

Sin embargo, desde la misma asociación, también se califica de “incoherente” la medida, ya que tan solo mueve la publicidad de un lugar a otro de la camiseta y no ataja el principal problema creando así “un riesgo para la salud y las vidas de las jóvenes generaciones al postergar una prohibición total”. Además, el acuerdo no incluye formas mucho más visibles de publicidad de apuestas, como carteles LED o vallas publicitarias en los estadios.

Los clubs afectados

Los clubs que han acordado la prohibición son los 20 equipos que actualmente militan en la primera división del fútbol inglés, de los cuales tan solo 8 llevan publicidad de casas de apuestas. Estos son: Bournemouth, Brentford, Everton, Fulham, Leeds, Newcastle, Southampton y West Ham. Ninguno de los llamados “Big Six”, esto es, los cinco clubs más poderosos de la liga a nivel deportivo y económico (Manchester City, Liverpool, Manchester United, Arsenal, Chelsea y Tottenham) llevan este tipo de publicidad.

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En la Premier, existen actualmente acuerdos millonarios con las casas de apuestas. Uno de ellos es el del Newcastle, perteneciente a un millonario fondo saudí, que ingresa de la publicidad 6.5 millones de libras. Otro es el Everton, un histórico en horas bajas, al que la pérdida del patrocinio de 10 millones de libras por temporada le dejaría en una situación muy comprometida a nivel económico. Sin embargo, la proporción de equipos que tienen publicidad de casas de apuestas se multiplica cuando se baja a divisiones inferiores como la Championship (segunda división), donde más de la mitad de los clubs tienen este tipo de patrocinios. En divisiones aún más bajas, con equipos mucho más pequeños, los ingresos de este tipo son fundamentales para el mantenimiento y la supervivencia de los clubs.

La situación en España

Después del Real Decreto impulsado por el Ministerio de Consumo presidido por Alberto Garzón donde se regula y limita la publicidad de las casas de apuestas en horario de máxima audiencia, el patrocinio de las mismas en España ha decaído considerablemente. La prohibición ha propiciado que los clubs españoles no puedan mostrar publicidad de este tipo en ningún lugar de las camisetas ni en el campo durante el partido. Así, la legislación de nuestro país es mucho más restrictiva que el acuerdo llevado a cabo en el país anglosajón en la tarde del jueves. 

De hecho, la prohibición total en el caso español dejó, esta misma temporada, a algunos equipos sin patrocinador principal. Granada y Alavés, entre otros, salieron a jugar los primeros partidos de liga con camisetas vacías de publicidad al no haber cerrado acuerdos con empresas que sustituyeran a las casas de apuestas. 

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