"Un adjetivo no condiciona nuestra existencia": discapacidad y entorno laboral a debate en infoLibre
La lucha por los derechos de las personas con discapacidad ha sido una de las pocas causas que ha unido a un Congreso de los Diputados totalmente polarizado. El pasado 18 de enero de 2024, se aprobó la tercera modificación en la historia de nuestra Constitución, un cambio en el artículo 49 que ha permitido eliminar una discriminación histórica: la expresión "disminuidos físicos, sensoriales y psíquicos". Este hecho recoge un cambio social que se va abriendo paso y que las empresas e instituciones se están desarrollando al captar a personas que, pese a contar con limitaciones en algún área, exhiben un enorme potencial de aportación. "La discapacidad es una fuente de talento que aporta valor a la compañía" comenta durante un encuentro organizado por infoLibre con la colaboración de Acciona, moderado por el director Daniel Basteiro, Camino San Millán, directora de Inclusión y Diversidad en Acciona.
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"Nosotros somos personas y un adjetivo no condiciona nuestra existencia", según reivindica Jesús Martín Blanco, director general de Derechos de las Personas con Discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. Un consenso amplio, pero que, según Blanco, "no es unánime" porque Vox se quedó fuera. Las empresas están siendo otro de los agentes que más se están implicando en esta transformación y algunas están superando incluso la cuota obligada del 2% de contrataciones. San Millán detalla que "en Acciona ya hemos alcanzado el 4%". "Hay que trabajar en accesibilidad y en un modelo de liderazgo que valore todas las cosas que aportan las personas con discapacidad", añade la directora de Inclusión y Diversidad en Acciona.
La integración laboral de este colectivo ha llegado hasta el punto de que "es rara la empresa que no nos llama para integrar a personas con discapacidad", según detalla Ana Muñoz de Dios, directora general de la Fundación Integra. Además de la cantidad de contrataciones, Muñoz pone el foco en la calidad y la adecuación de las habilidades respecto a los puestos de trabajo. "Pensar en que las personas con discapacidad son un cupo es un error. Hay que olvidarse de que son las personas con discapacidad y fijarse en sus verdaderas capacidades", apunta la directora general de Integra.
A pesar de los avances, este colectivo sigue sufriendo una brecha importante en algunos aspectos. Los expertos han apuntado que toda la política de empleo también tiene que ir de la mano de la política educativa, ya que muy pocas personas con discapacidad consiguen realizar estudios superiores. Aunque los esfuerzos en la contratación por parte de las empresas y la Administración Pública se consideran notables, los autónomos son otra tarea pendiente. Josefa Torres, directora de FEACEM y miembro de la Comisión de Inclusión Laboral del CERMI, ha achacado que "el autoempleo no tiene que ser una opción cuando no hay otra. Los apoyos públicos se tienen que reforzar para crear un ecosistema de apoyo".
