España acude a la caza de inversiones a un Davos centrado en la amenaza de los riesgos globales

Este año hay menos nieve en Davos (Suiza, 11.100 habitantes) días antes de arrancar el encuentro anual del Foro Económico Mundial que lleva su nombre. El motivo, el inédito clima cálido que está sufriendo Europa este invierno. Pero nada más metafórico: un Davos sin nieve para la agenda económica y geopolítica más candente. El encuentro se extenderá de lunes a viernes de la próxima semana y tendrá por lema: “Cooperación en un mundo fragmentado”. Mientras los principales líderes políticos y económicos del mundo abordarán los riesgos globales a corto y largo plazo, España va con una misión: consolidar su posición internacional y atraer inversiones. 

El Foro supone la concentración de jefes de Estado, ministros, directivos de grandes empresas, académicos, organizaciones sin fines de lucro y representantes influyentes de la sociedad civil. Está previsto que acudan alrededor de cincuenta jefes de Gobierno, la mayor parte de ellos europeos. Este año abordarán lo que más preocupa a cualquier ciudadano: y ahora qué va a pasar. Después de una pandemia que ha puesto al mundo de patas arriba, de la invasión de un país en territorio europeo y de la mayor oleada inflacionista en los 40 años, los líderes globales se juntan para discutir cuáles son los mayores riesgos, para tratar de prevenir disrupciones del tamaño de las mencionadas.

El Foro Económico Mundial parte de la tesis de que la próxima década se caracterizará por una serie de crisis ambientales y sociales. El aumento del costo de vida será el riesgo global más grave en los próximos dos años y es el que concentra mayores preocupaciones de los expertos. La lista de principales riesgos globales está fundamentalmente copada por las amenazas que supone el cambio climático para la vida del planeta. 

La participación de Pedro Sánchez: más económica que política

Pedro Sánchez asistirá el martes, con motivo de la sesión plenaria del Foro. Será un día cargado de reuniones, encuentros y entrevistas que, por lo que detallan fuentes gubernamentales, tendrán un carácter más económico y financiero, que político, en comparación con otras ediciones.

Según estas fuentes, esto es resultado de la experiencia positiva en el pasado de este tipo de encuentros para atraer inversiones. Por ejemplo, subrayan el anuncio de Cisco en noviembre de abrir un centro de microchips en Barcelona, tras reunirse Pedro Sánchez con el director general, Chuck Robbins, en la edición de Davos de 2022.  

Este año destaca la reunión que tendrá el presidente del Gobierno con Larry Fink, el director general de BlackRock, que es la gestora de activos más grande del mundo, con unos activos estimados en siete veces el PIB de España, y que mantiene un peso muy significativo en los accionariados del Ibex 35. Es el segundo encuentro de Sánchez con Fink, tras el que tuvo lugar en la gira que hizo por EEUU en julio de 2021. También destaca el encuentro que mantendrá con las máximas autoridades del fondo soberano emiratí Mubadala.

Sánchez se reunirá también con ejecutivos de la empresa de microprocesadores Qualcomm, con el director general de la compañía danesa de logística Maersk y también con el del fabricante chino de turbinas eólicas Envision. También mantendrá encuentros con el presidente del Banco Interamericano del Desarrollo, Ilan Goldfajn, y con la directora general de la ONG Oxfam Internacional. 

Asimismo, mantendrá un breve encuentro con los presidentes de las principales empresas del Ibex como Ana Botín, de Banco Santander; José María Álvarez-Pallete, de Telefónica o Ignacio Sánchez Galán, de Iberdrola. Este encuentro, según fuentes gubernamentales consultadas, será breve y sin ningún tema concreto. Será un café informal, más que una reunión de trabajo.

Los grandes riesgos globales de 2023

El Foro abordará los riesgos globales más importantes a corto y largo plazo, es decir, a unos 2 y 10 años vista respectivamente. El ranking de los riesgos a corto plazo lo encabeza una crisis generada por el aumento de los costes de vida, desastres naturales provocados por el calentamiento climático, confrontaciones geoeconómicas y el incremento de la polarización, que lleve a una ruptura de la cohesión social. A largo plazo, la mayoría de los riesgos detectados son de carácter medioambiental, así como una inmigración involuntaria a gran escala. 

Esta es la opinión de un millar de personas consultadas por el Foro Económica Mundial, provenientes de una extensa red de instituciones académicas, empresas, agencias gubernamentales o miembros destacados de la sociedad civil. El informe destaca que mientras los gobiernos consultados mencionan conceptos como “crisis de deuda” o “fracaso en estabilizar la trayectoria de los precios”, las empresas muestran mayor preocupación hacia otro tipo de riesgos, como un “aumento del cibercrimen” o “incidentes medioambientales a gran escala”.