Las declaraciones de Hernando exigiendo a los pensionistas que den las gracias avivan las protestas: “Vamos a seguir manifestándonos"

En el momento de su entrega en el Congreso de los Diputados, el pasado 3 de abril, el secretario de Estado de Presupuestos y Gastos, Alberto Nadal, dijo que los de 2018 son “los presupuestos más sociales de su historia”, discurso que, todavía bajo la incertidumbre de si finalmente serán aprobados con el apoyo del PNV, mantiene el Gobierno y el Partido Popular. Este domingo fue el portavoz parlamentario de los conservadores, Rafael Hernando, quien defendió los Presupuestos Generales del Estado que presentó hace tres semanas el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. Lo hizo durante un acto con las Nuevas Generaciones del partido en Madrid, cuando defendió el incremento de las pensiones mínimas y no contributivas que incluye el proyecto. “Nos pedían el 1% y las vamos a subir el 3%. Tres veces más de lo que nos pedían”, dijo. Y añadió algo que, desde las asociaciones de jubilados y pensionistas, ha resultado polémico: “Yo lo que les pido a los que se manifestaban cuando decían que solo las subíamos el 0,25% y querían que las subiéramos el 1% es que ahora salgan a manifestarse, pero a dar las gracias al Gobierno, porque las vamos a subir un 3%”. 

El discurso del PP sobre las pensiones ha cambiado bastante en cuestión de semanas. Las continuas y masivas movilizaciones de los jubilados obligaron al Gobierno a cambiar el “sólo se pueden subir las pensiones un 0,25% porque no se puede gastar lo que no se tiene” por el “ahora podemos ser generosos” que defendió hace unos días el ministro de Economía, Román Escolano. El documento incluye, así, una subida de las pensiones mínimas y no contributivas del 3%, el doble del IPC previsto para este año, así como un alza del 1,92% de algunas pensiones de viudedad, del 1,5% para las de jubilación que no lleguen a los 700 euros mensuales y del 1% para las que se sitúan entre 700 y 860 euros. El resto de las pensiones, 4,87 millones, se revalorizarán sólo el 0,25% que fijó el Gobierno en un real decreto el pasado 29 de diciembre.

“Que salgan por favor a darle las gracias al Gobierno”, insistió Hernando, este domingo, hasta dos veces. Pero los pensionistas, lejos de hacer caso a sus palabras, criticaron duramente sus declaraciones. Saldrán a manifestarse, sí, pero no a darle las gracias al Ejecutivo, responsable, en su opinión, de la situación en la que están. “No le tenemos que dar ningún tipo de gracias porque gracias a este Gobierno estamos en la situación que estamos. Vamos a seguir manifestándonos contra las medidas que están llevando a cabo”, afirma a infoLibre Victoria Porta, portavoz de la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones. 

Lo hicieron, sin ir más lejos, este mismo lunes en Bilbao, donde cada comienzo de semana, desde hace varias, miles de jubilados se concentran para reclamar el mantenimiento del sistema público de pensiones. Entre gritos de “PNV, mójate”, “ni un paso atrás” y “pentsionistak aurrera (pensionistas adelante)”, avisaron al PP: “No nos van a engañar con la 'zanahoria' de Montoro”. Son los que más salieron a las calles desde que comenzaron las movilizaciones, y afirman que continuarán, lejos de los consejos de Hernando. “Este señor tiene que dejar de insultarnos”, critica Luki Gómez, portavoz de la Coordinadora de Jubilados, Pensionistas y Viudas de Barakaldo. 

“No resuelve la pérdida de poder adquisitivo”

Una pensión de 400 euros, tras la subida, aumentaría hasta los 412 euros. Otra de 347 euros mensuales se convertiría en 357,41 euros al mes. “Sigue siendo una pensión indigna para poder vivir”, critica Gómez. Esta es una de las principales críticas de la medida incluida en los PGE: la subida del 3% de las pensiones mínimas y no contributivas no resuelve el problema del bajo presupuesto mensual con el que cuentan los jubilados. Pero, además, tampoco consigue que los pensionistas recuperen el poder adquisitivo perdido en los últimos años. “Aun subiendo ese 3%, no se acaba recuperando lo que de verdad se ha perdido”, lamenta Porta. 

Lo perdieron desde que en el año 2013 el Ejecutivo de Mariano Rajoy aplicara la medida que, ahora, todas las organizaciones de pensionistas quieren derogar –aunque desde la Coordinadora piden también la eliminación de la reforma de 2011 aprobada por Zapatero–. El mecanismo, además de desvincular la revalorización de las prestaciones a la subida de los precios, supuso la creación de un ajuste automático llamado factor de sostenibilidad, que entrará en vigor en enero de 2019 y que recortará las pensiones según aumente la esperanza de vida, por un lado, y de acuerdo con la relación entre ingresos y gastos de la Seguridad Social, por otro. Por eso, desde hace cinco años, las pensiones sólo han subido un 0,25% anual, el mínimo legal mientras persista el déficit de la Seguridad Social.

“Las demás pensiones las subirán o al 1,5% o al 1%, pero el IPC previsto para este año es del 1,6%, así que está claro que todo lo que suba por debajo de ese porcentaje seguirá suponiendo la pérdida de poder adquisitivo”, insiste Porta. Por ello, las organizaciones de pensionistas y jubilados insisten en que lo prioritario es que, de nuevo, vuelvan a ligarse las revalorizaciones de sus retribuciones a los precios. Aunque, desde la Coordinadora, solicitan también “que se devuelva todo lo perdido”. Gómez, además, va un poco más allá e insta a que las pensiones mínimas se equiparen al salario mínimo interprofesional y que se vayan revalorizando como el IPC. “Pedimos al Gobierno que deje de engañarnos y de jugar con nosotros”, critica. 

Por su parte, la Mesa Estatal por el Blindaje de las Pensiones (MERP), defiende que la subida es buena para toda persona a la que beneficie pero, en cambio, cataloga la medida de insuficiente. La asociación, como explica Joanen Cunyat a infoLibre, pide al Gobierno que lleve a cabo una reforma constitucional para blindar las pensiones. “Queremos que las pensiones no sean un derecho condicionado y pasen a ser un derecho fundamental y pedimos, además, que el artículo de la Constitución que lo recoja prohíba la privatización o degradación del poder adquisitivo”, afirma. “Hay que cerrar el debate, porque este 3% es para este año, ¿y el que viene? ¿Y el siguiente? ¿Habrá que seguir saliendo a la calle?”, se pregunta. 

Continuarán las movilizaciones

La respuesta a la pregunta de Cunyat es que, por el momento, sí. Los pensionistas contestan a Hernando asegurando que, por ahora, continuarán las movilizaciones, aunque con un objetivo muy distinto que el de darle las gracias al Ejecutivo por esta subida. “Tenemos claro que el cambio de postura del Gobierno se ha producido por nuestras manifestaciones. Esto no es un aplauso al Ejecutivo, es un aplauso a la gente mayor que se ha concentrado en las calles y nos da más ganas y ánimos para tener claro que la única medida que tenemos para presionar es la reivindicación de la calle”, asegura Porta. 

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“El lunes volveremos a salir a la calle, y para el sábado 5 de mayo preparamos una macromanifestación”, explica Gómez. “Esto nos motiva. Ojalá este señor [Hernando] haga más declaraciones porque suma a más gente”, añade. 

La MERP, además, inicia esta semana una campaña de recogida de firmas. La presentarán, como confirma Cunyat, este miércoles en la Universidad de Valencia, donde se iniciará la acción que llevarán a cabo en universidades de toda España. “Se trata de una movilización de recogida de firmas por los centros educativos de todo el país durante los días 2, 3 y 4 de mayo”, continúa. En Madrid, por su parte, la campaña empezará el día 3. 

“Tenemos muy claro que pasito a pasito esta lucha la tenemos que ganar, y no vamos a dejar las calles hasta que la gente recupere lo que ha perdido”, sentencia Porta.