El empleo temporal y la caída de la población activa reducen el paro un 3,47%

El verano y un crecimiento del PIB del 0,5% han aumentado el número de ocupados un 0,87% en de julio a septiembre; es decir, hay 151.000 personas más con empleo en el tercer trimestre. Pero como corresponde al tipo de actividad estacional típica de la economía española, la mayor parte de ese empleo es de carácter temporal: 122.400. Al tiempo, hay 26.700 contratos indefinidos menos respecto al trimestre anterior. Son los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente a los meses de julio a septiembre, que contabilizan además un descenso del paro en 195.200 personas, un 3,47%. La diferencia entre las cifras de ocupación y desempleo se explican por otro fenómeno preocupante: el continuado descenso de la población activa, de las personas entre 16 y 64 años en disposición de trabajar.

En el último trimestre los activos han caído en 44.200 personas, la mayor parte inmigrantes que han regresado a sus países por falta de trabajo en España. Aunque en esa cifra hay que contabilizar también a los españoles que emigran y a quienes desisten de buscar empleo en vista de las escasas posibilidades de encontrarlo. Más allá de lo ocurrido en los últimos tres meses, la caída de la población activa alcanza las 241.700 personas desde julio de 2013.

Pese a que las cifras de descenso del paro mejoran las del resto de los veranos desde que comenzó la crisis, también reflejan un frenazo respecto a las del segundo trimestre. La economía ha caído sólo una décima de un trimestre a otro, según el Banco de España –del 0,6% al 0,5%–, pero el número de nuevos ocupados ha descendido desde los 402.400 contabilizados por la EPA de abril a junio hasta los 151.000 de julio a septiembre. Lo mismo ha ocurrido con el paro: en el segundo trimestre bajó en 311.000 personas, por 195.200 en el tercero. En España hay, según la EPA, 5,42 millones de parados, lo que se traduce en una tasa del 23,67%. Si la ocupación se mide en términos desestacionalizados, sin contar las diferencias de calendario, ha crecido sólo tres décimas y media.

Es decir, una vez más, las estadísticas de la EPA y del paro registrado por los Servicios Públicos de Empleo confirman que el empleo se crea a muy bajo ritmo y es estacional y temporal. Pese a las medidas del Gobierno para estimular la contratación indefinida –tarifa plana de cotizaciones–, no ha cambiado la disfunción característica del mercado laboral español, la llamada dualidad: la tasa de temporalidad continúa subiendo, siete décimas el último trimestre, hasta el 24,64%. Si la lupa se coloca sobre los datos del último año, los contratos temporales crecen tres veces y media más que los indefinidos.

Más paro juvenil y entre los mayores de 55 años

La EPA también dibuja un retrato del paro español. Más de la mitad de los desempleados lo son de larga duración, 2,74 millones de personas que llevan más de un año sin trabajar. Si bien son un 4,2% menos que hace tres meses. El paro juvenil, el de los menores de 25 años, ha crecido en 27.000 personas en el tercer trimestre, un 3,2% más que tres meses antes. Son 867.000 jóvenes, el 52,38%, sólo siete décimas menos que en junio. El desempleo se ha reducido en todos los segmentos de edad menos en uno: los mayores de 55 años, donde ha crecido un 2,67% en el último año. Pero mientras entre los hombres de esa edad sube sólo ocho décimas, entre las mujeres se dispara el 5,34%.

En España se cuentan 1,78 millones de hogares con todos sus miembros activos en paro, 44.600 menos que hace tres meses. Al tiempo, han aumentado –3.000 más– aquéllos que carecen de cualquier tipo de ingresos –ni salario ni pensión ni prestación pública– y son ya 728.300. Los hogares donde ningún miembro permanece activo también crecen, un 2,21% en el último año, y alcanzan casi los cinco millones.

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Con temores para los próximos meses

CCOO destaca los datos “positivos” de descenso del paro pero también repara en su “dependencia” de la estacionalidad “que caracteriza a la economía española en verano”. No sólo apunta a la “intensa ralentización del empleo” observada en el último trimestre, sino también su carácter precario. Según UGT, además, tal y como se está creando empleo, “no se está produciendo un verdadero cambio en el mercado de trabajo”. El sindicato también alerta sobre un posible frenazo de la economía en los próximos meses: “Las nubes que se vislumbran en el horizonte europeo, fundamentalmente en Francia y Alemania, pueden ensombrecer la recuperación de la actividad y del empleo en España”.

Las mismas precauciones toma la patronal de las grandes ETT, Asempleo. “Aunque en términos interanuales se mantiene el ritmo de crecimiento de la ocupación (1,6%), si se analizan los datos depurados de estacionalidad, se observa cierta contención de la tendencia, algo de lo que venimos alertando, sobre todo, de cara a la parte final del año”.