El lío de la cuota de los autónomos: ¿bajará o subirá con la propuesta del Gobierno y Podemos?

Hace unos días, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, anunciaba tras su reunión en la Moncloa con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ambos habían alcanzado un acuerdo para establecer un sistema de cuotas progresivas para los autónomos. Iglesias aseguró que esta medida serviría para rebajar los "impuestos" a quienes trabajan por cuenta propia, pero sin embargo varias asociaciones de autónomos han asegurado que siete de cada 10 trabajadores por cuenta propia verán incrementada la cuantía de su cotización a la Seguridad Social si se pone en marcha el acuerdo.

La cuota que paga un autónomo en concepto de cotización a la Seguridad Social le sirve para poder disfrutar de ciertas coberturas, y es variable en función del número de servicios al que decida acceder cada trabajador por cuenta propia. La cobertura más básica es la que da derecho al autónomo a obtener una prestación si se ve obligado a cogerse una baja por enfermedad común o un accidente no laboral. Pero no todos los autónomos pagan lo mismo por esta cobertura de la Seguridad Social, y la cuota final que abonan depende, en parte, de ellos.

Por esta cobertura básica, los autónomos pagan –en 2018– una cuota mínima de 278 euros mensuales y una tarifa máxima de 1.121 euros. La diferencia entre una y otra cantidad la determina el propio empleado por cuenta propia, que puede elegir la base de sus ingresos mensuales a la que quiere que se le aplique el tipo del 29,9% vigente actualmente. Pagar la cuota, además, es obligatorio, se ingresen 600 o 6.000 euros netos al mes, y únicamente se puede modular la cantidad a abonar entre 278 euros y 1.121. Cuanto más dinero se pague al mes, el autónomo tendrá una mayor pensión en el futuro.

Actualmente, 2,1 millones de personas físicas en España trabajan como autónomos, y otro millón de trabajadores por cuenta propia lo son a través de una sociedad. De ellos, en torno a 600.000 no llegan a cobrar el salario mínimo anual de forma neta, pero aun así se ven obligados a hacer frente al pago mínimo de la cuota de autónomos, que asciende a 278 euros mensuales. El acuerdo que anunció Iglesias hace unos días establece, según dijo el secretario general de Podemos, que estos autónomos que no alcancen un ingreso mínimo mensual de 735,9 euros al mes en 14 pagas estarán exentos de pagar tarifa alguna.

Estos 600.000 autónomos, por tanto, serían los principales beneficiados de la medida, como admite y alaba la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), que asegura que es "de justicia" esta reducción. No obstante, ATA considera que la implantación de una cuota progresiva para los autónomos –la segunda pata de la propuesta que planteó Podemos– supondrá, en la práctica, que 7 de cada 10 trabajadores por cuenta propia terminarán pagando más a la Seguridad Social de lo que pagan en la actualidad.

Según explicó ATA tras conocerse el pacto entre Iglesias y Sánchez, de los 2,1 millones de autónomos que están ahora mismo registrados como tal en España, un total de 1,3 millones tienen beneficios netos mensuales superiores a la base mínima de cotización –que se sitúa en 932,7 euros–, la cuantía de la que sale la cuota mínima mensual de 278 euros mensuales al aplicársele el impuesto del 29,9% vigente. Y la mayor parte de esos 1,3 millones de autónomos, pese a tener beneficios superiores a 932,7 euros al mes, cotizan el mínimo de 278 euros mensuales, por lo que implantar un sistema impositivo progresivo impediría que un autónomo con un beneficio mensual de, por ejemplo, 1.600 euros, pudiera pagar una cuota de 278. Y, por ende, la cantidad que le tocaría abonar subiría, en lugar de bajar.

"De lo que estamos hablando es que, del total de autónomos (sumados societarios y persona física), el 70% declararon en 2016 a Hacienda unos rendimientos netos, sin descontar la deducción de la cotización a la Seguridad Social, superiores a la base mínima, por lo que la reducción en las cotizaciones sería para el 30% restante", explicaba ATA en su comunicado. Es decir: los que se beneficiarían de la reforma de Sánchez e Iglesias serían quienes cobraran menos de 735,9 euros mensuales, que quedarían exentos de cualquier pago, y quienes tuvieran beneficios de entre 736 y 932,7 euros al mes, que verían reducida su cuota con respecto a los 278 euros al mes que pagan ahora ya que se les aplicaría el tipo sobre sus beneficios reales y no sobre la base mínima de cotización.

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Por el momento, no se conocen detalles del acuerdo alcanzado por el Gobierno y Podemos, por lo que es imposible calcular cuánto subiría la cuota a cada autónomo en función del tramo de beneficios que obtuviera mensualmente, y el partido morado rechaza ofrecer ninguna explicación más porque la negociación con el Ejecutivo sigue en marcha. No obstante,  ATA y la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), las dos principales asociaciones del sector, consensuaron hace meses una propuesta para reformar el sistema de cotización de los autónomos en la que sí ofrecen una mayor concreción.

El planteamiento de las dos asociaciones coincide con el de Iglesias y Sánchez en rebajar a los autónomos "cuyos ingresos netos totales anuales no lleguen al volumen del Salario Mínimo Interprofesional" su cuota, aunque no en liberarles de ella: dicho grupo tendría la posibilidad de pagar únicamente 50 euros mensuales "durante dos años", prorrogables anualmente hasta un máximo de cuatro. Por otra parte, los autónomos que ingresen entre el salario mínimo y 30.000 euros anuales mantendrían el régimen actual y podrían seguir eligiendo la cuantía por la que cotizan "con las excepciones, bonificaciones o reducciones actualmente existentes".

Los que se verían más afectados por esta propuesta son los autónomos que más ganan, es decir, los que tienen beneficios netos anuales de "entre 40.000 y 60.000 euros" y aquellos que superan esa cantidad. Todos ellos podrían seguir eligiendo la base sobre la que cotizan, pero se les subirían los mínimos: con la normativa actual, la cuota para quienes ingresen entre 3.333 y 5.000 euros netos mensuales sería de al menos 417 euros cada mes, mientras que quienes superen esos 5.000 euros tendrían que pagar, al menos, 556 euros al mes.