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INVESTIGACIÓN

Sarkozy recibió tres millones del fondo de Borja Prado en Luxemburgo por una supuesta asesoría financiera

El expresidente de Francia Nicolas Sarkozy.

Fabrice Arfi / Yann Philippin (Mediapart) / Begoña P. Ramírez (infoLibre) / Stefano Vergine (Il Fatto Quotidiano)

A Nicolas Sakorzy le tocó la lotería. El 10 de agosto de 2018, el expresidente de Francia recibió en una de sus cuentas bancarias personales, abierta en la sucursal parisina del banco Edmond de Rothschild, dos transferencias bancarias por un total de 3,15 millones de euros. El dinero procedía de dos sociedades luxemburguesas gestionadas por un fondo de inversión llamado Peninsula Capital, creado por el presidente de Mediaset España, Borja Prado, y dos antiguos directivos de la italiana Mediobanca, Javier de la Rica y Stefano Marsaglia.

Es bien sabido que el expresidente francés se gana muy bien la vida como abogado y conferenciante en países de todo el mundo. Ahora también se dedica a las finanzas. Los abogados de Peninsula Capital escribieron a Edmond de Rothshild para justificar el origen de ese dinero. Según la carta, “estrictamente confidencial”, Nicolas Sarkozy asesoró a Peninsula Capital sobre una inversión en NTV, el operador privado italiano de alta velocidad, y recibió una participación en los beneficios sobre la plusvalía conseguida.

Pero hay un problema: los testimonios y documentos obtenidos por Mediapart y sus socios de la red European Investigative Collaborations (EIC), a la que pertenece infoLibre, ponen en duda la realidad del trabajo de Nicolas Sarkozy en esta operación. Según las fuentes consultadas por EIC, los tres millones de euros recibidos por el expresidente francés pueden haber sido pagados por una sociedad financiada principalmente por los Emiratos Árabes Unidos (EAU), un país del Golfo tan rico como autoritario. La operación también benefició a Jean Sarkozy, hijo mayor del exmandatario y empleado de Peninsula Capital. Y, sobre todo a su familia política, que obtuvo un beneficio de 13,8 millones de euros gracias a la misma operación.

Ante todos estos descubrimientos, se ha levantado un muro de silencio: ninguno de los protagonistas ha respondido a las preguntas que les ha hecho EIC, incluidos Nicolas Sarkozy y los Emiratos Árabes Unidos, una petromonarquía dirigida por el jeque Mohamed bin Zayed Al Nahyane, conocido como MBZ.

Importante cliente de la industria militar francesa y española –120,6 millones de euros en exportaciones sólo en 2021, según la Secretaría de Estado de Comercio–, los EAU están implicados en la mortífera guerra de Yemen, donde la población civil sufre una de las crisis humanitarias más graves del mundo. Algunos de los siete emiratos que componen el país, entre ellos Dubái, figuran también entre los paraísos fiscales más opacos del planeta: ofrecen asilo a delincuentes de guante blanco, capos de la droga o, más recientemente, a oligarcas rusos que huyen de las sanciones tras la guerra de Ucrania.

Después de haber sido objeto de investigaciones penales en Francia por sus vínculos con Libia, Catar y Rusia, las revelaciones de EIC confirman el apetito de Nicolas Sarkozy por el dinero de autócratas extranjeros. Lo que no deja de ser problemático, dada la influencia que Nicolas Sarkozy sigue ejerciendo en la vida política francesa y el hecho de que el actual presidente, Emmanuel Macron, le pida regularmente que represente a Francia en actos oficiales en el extranjero.

Para entender la historia, hay que acudir a Peninsula Capital. Con sedes en Luxemburgo y Londres, este fondo de capital riesgo se creó en 2016 para invertir en empresas del sur de Europa, principalmente en Italia, España y Francia.

Su fundador y principal jefe, Borja Prado es, a los 66 años, uno de los gestores españoles de mayor influencia. Presidente de Mediaset España, filial del imperio televisivo de Silvio Berlusconi, desde marzo del pasado año, Prado es amigo y ha asesorado en asuntos financieros al patrón del Real Madrid, Florentino Pérez. Entre 2009 y 2019 presidió la compañía energética Endesa, un cargo que compaginó hasta 2014 con la jefatura para Iberia y Latinoamérica de la italiana Mediobanca.

Para crear Peninsula, se asoció con dos financieros que trabajaron para Mediobanca, el italiano Stefano Marsaglia y el español Javier de la Rica. Según informaciones de prensa contrastadas por EIC, el dinero que invierten procede principalmente del Golfo Pérsico: el trío convenció primero al poderoso fondo soberano Qatar Investment Authority (QIA), que aportó varios cientos de millones de euros, y después a fondos soberanos y miembros de las familias reales de Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Bahréin.

Resulta que Nicolas Sarkozy está cerca tanto de Catar –al que ayudó a obtener el Mundial de Fútbol de 2022–, como de su enemigo acérrimo, los Emiratos Árabes Unidos. Como reveló el EIC gracias a Football Leaks, el expresidente francés ayudó al club inglés Manchester City, propiedad de un destacado miembro de la familia real emiratí, a librarse de sanciones por dopaje financiero.

Jean Sarkozy, el fichaje de Peninsula Capital

Además, Peninsula Capital Advisors, la estructura de gestión del fondo con sede en Londres, contrató en marzo de 2017, como director ejecutivo, a Jean Sarkozy, el hijo mayor del expresidente. Su fichaje para tan alto cargo resulta sorprendente. Jean Sarkozy no tenía entonces ninguna experiencia profesional en el mundo de la inversión. Licenciado en Derecho, fue diputado electo y luego vicepresidente de la asamblea del departamento de Hauts-de-Seine –uno de los distritos del Gran París– mientras trabajaba como asesor jurídico en Realyze, antes Claude & Sarkozy, el bufete de su padre.

Entre septiembre de 2016 y diciembre de 2017, Jean Sarkozy siguió una formación continua en la prestigiosa escuela de negocios ESCP, lo que le permitió obtener un máster en ingeniería financiera y fiscal en marzo de 2018. Cuando Peninsula Capital le contrató como alto ejecutivo en la primavera de 2017, por tanto, ni había terminado su formación ni había obtenido su diploma.

Preguntados por Mediapart sobre esta contratación, tanto Jean y Nicolas Sarkozy, como Peninsula, QIA y el Gobierno de los EAU no han respondido.

Peninsula Capital logró su primer gran éxito financiero justo después de la llegada de Jean Sarkozy. El 29 de junio de 2017, el fondo compró por 66 millones de euros el 12,8% de NTV, empresa italiana que explota trenes de alta velocidad bajo la marca Italo, en competencia con el antiguo monopolio público Trenitalia.

Y menos de un año después, en abril de 2018, el fondo de inversión estadounidense Global Infrastructure Partners (GIP) compró todas las acciones de NTV por 1.980 millones de euros. Así que, en menos de un año, Peninsula se embolsó una colosal plusvalía de 181,5 millones de euros. El dinero llegó en dos plazos, en abril y luego el 31 de julio de 2018. Diez días después, Nicolas Sarkozy recibió 3,15 millones de euros en su cuenta del Edmond de Rothschild de París.

La carta de los abogados luxemburgueses

El bufete luxemburgués Van Campen/Liem, asesor de Peninsula, envió una carta al banco para justificar los pagos: “Desde 2018, Nicolas Sarkozy [...] ha sido asesor principal [senior advisor] de Peninsula Capital II”, la sociedad luxemburguesa que gestionó la operación de NTV. La carta añade que a Sarkozy se le remunera mediante una participación en los beneficios, y que tras “salir Peninsula de la inversión mantenida en NTV, el asesor principal recibió parte de los intereses a los que tiene derecho”.

Pero el bufete de abogados incluyó, al principio de su carta, un extraño descargo de responsabilidad: “No asumimos ninguna responsabilidad por la exactitud de la información que figura a continuación” y que dice haber “recibido de Peninsula Capital II”.

En efecto, la carta contiene varias incoherencias. Dado que Nicolas Sarkozy había sido contratado en 2018, no podía haber participado en la inversión en NTV, realizada en junio de 2017. Además, al año siguiente, el fondo estadounidense que compró la empresa adquirió los títulos de todos los accionistas, no sólo los de Península. Por tanto, el fondo no estuvo en primera línea durante la negociación y no tuvo necesidad de que Nicolas Sarkozy defendiera sus intereses.

Es más, los extractos bancarios de Nicolas Sarkozy, obtenidos por Mediapart, muestran que recibió 152.164 euros adicionales en abril de 2019 –lo que suma un total de 3,3 millones de euros cobrados por el expresidente– a pesar de que la operación de NTV se había liquidado un año antes.

Dos ejecutivos de Peninsula, entre ellos su fundador Borja Prado, han asegurado a EIC que el ex jefe del Estado no trabajó para el fondo. “Sarkozy nunca ha asesorado a Peninsula. Peninsula no ha contratado a ningún asesor para esta operación ni para ninguna otra porque el fondo tiene un comité de inversiones que se encarga de revisar las operaciones”, dijo Prado a EIC durante una breve conversación telefónica.

Prado era entonces copropietario y cogestor, con sus dos socios, de la sociedad Peninsula Capital II, que supuestamente había contratado a Nicolas Sarkozy. ¿Facilitaron información falsa al bufete de abogados? Interrogados por escrito, ni Peninsula ni sus tres socios respondieron, ni sobre este punto ni sobre el resto de la historia. Antes de colgar el teléfono, Borja Prado también aseguró que “nadie había pagado a Sarkozy”. Los extractos bancarios de Nicolas Sarkozy demuestran lo contrario.

¿De dónde procede el dinero?

El origen de ese dinero también es problemático. La carta redactada por los abogados de Peninsula afirma que Nicolas Sarkozy era asesor de Peninsula Capital II, lo que puede parecer lógico: se trata de la sociedad gestora de la operación NTV, cuya finalidad es cobrar el carried interest –interés devengado o participación en las ganancias– de los gestores, su parte en los beneficios de la venta.

Sin embargo, Nicolas Sarkozy no cobró de Peninsula Capital II, sino de otras dos sociedades luxemburguesas: Peninsula Associates II, que pagó un total de 300.000 euros, y Peninsula Partners II, que abonó tres millones. Esta última sociedad es propiedad al 100% de los inversores de Peninsula que financiaron la compra de acciones de NTV. En resumen, Nicolas Sarkozy no fue pagado por el fondo Peninsula, sino directamente por algunos de sus inversores, que sacaron el dinero de su parte de los beneficios de la operación NTV.

La identidad de esos accionistas de Peninsula Associates II es secreta, gracias al estatuto especial de esta sociedad, que le concede la ley luxemburguesa para garantizar el anonimato de los inversores en fondos establecidos en el Gran Ducado.

Pero, según dos fuentes que participaron en la primera línea de la operación y que pidieron el anonimato, el principal inversor detrás de la sociedad que pagó a Nicolas Sarkozy es una entidad de Emiratos Árabes Unidos. “Se suponía que íbamos a comprar una participación mayor en NTV, pero al final tuvimos que adquirir sólo la mitad, ya que Catar decidió no invertir”, explica a EIC un ejecutivo de Peninsula.

Si no fue Catar, ¿quién invirtió en Peninsula Partners II? “Emiratos y otros de la zona”, responde el mismo directivo. Según una segunda fuente conocedora de la operación, “el dinero procedía de Emiratos, en concreto del family office [oficina de gestión de patrimonios familiares] del jeque Mohamed bin Zayed”. El emir de Abu Dabi y presidente de Emiratos Árabes Unidos.

Conferencias en Abu Dabi

Una coincidencia: Nicolas Sarkozy viajó dos veces a Abu Dabi en 2018. Invitado a un foro en marzo de ese año, pronunció un discurso sorprendente, en el que elogió a los jefes de Estado autoritarios, incluido el presidente de los Emiratos: “¿Quiénes son hoy los grandes líderes del mundo? El presidente [chino] Xi, el presidente [ruso] Putin [...], el gran príncipe Mohamed bin Salman [de Arabia Saudí]. ¿Y qué serían hoy los Emiratos sin el liderazgo de MBZ?”.

En diciembre de 2018, Nicolas Sarkozy estuvo de nuevo en la capital emiratí. Según el diario francés Le Parisien, esta vez participaba en “un seminario a puerta cerrada sobre los grandes problemas del mundo”, junto al ex primer ministro británico Tony Blair y directores generales de grandes empresas.

Pero es poco probable que los 3,3 millones pagados por Peninsula sólo remuneraran su participación en estos eventos. Los extractos bancarios de Nicolas Sarkozy muestran que nunca cobró oficialmente más de 147.000 euros por las conferencias que da en el extranjero.

Entonces, ¿por qué recibió una cantidad tan elevada? ¿Y por qué el dinero fue pagado por Peninsula bajo la apariencia de un trabajo de asesoramiento cuya realidad es cuestionable? Ni Nicolas Sarkozy ni el Gobierno de los Emiratos han respondido a ambas preguntas.

También se benefició una sociedad de suegro de Jean Sarkozy

Pero la operación de NTV no sólo benefició a Nicolas Sarkozy. Según las informaciones a las que ha tenido acceso EIC, Peninsula invitó como coinversor a una sociedad belga llamada Golda Darty Partners, que aportó cinco millones de euros a la compra de acciones del operador ferroviario italiano.

Pues bien, uno de los directivos de esta sociedad es Jean Sarkozy, como se recordará también director ejecutivo de Peninsula. El hijo del expresidente francés está casado con Jessica Sebaoun, nieta de Bernard Darty, uno de los fundadores de la famosa cadena de tiendas de electrodomésticos. Bernard se exilió fiscalmente en Bélgica tras la venta del grupo Darty a una empresa británica en 1993.

Cuando coinvirtió en NTV con Peninsula, Golda Darty Partners pertenecía a Bernard Darty –fallecido a finales de 2018– y a su esposa. Gracias a esta operación, se apuntaron una plusvalía de 13,8 millones de euros en solo un año, según los datos en poder de EIC.

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Su participación plantea una serie de interrogantes. Los inversores emiratíes no necesitaron socios externos para reunir los 66 millones de euros invertidos en NTV. ¿Fue un favor concedido a Jean Sarkozy y a su familia política? Jean y Nicolas Sarkozy, Peninsula, el Gobierno de los Emiratos y la viuda de Bernard Darty no han respondido a estas preguntas, que les formularon los periodistas.

Tras el éxito de la inversión en NTV, Jean Sarkozy ha sido recompensado con un nuevo puesto en la gestión del patrimonio de la familia Darty. En enero de 2020, varios miembros de la familia crearon una nueva sociedad belga, Golda Darty Invest, de la que Jean Sarkozy fue nombrado “representante permanente del administrador”, es decir, presidente no ejecutivo.

Finalmente, de nuevo aparecen los Emiratos en otra operación financiera poco clara, que esta vez afecta a dos de los tres socios de Península: Javier de la Rica y Stefano Marsaglia, que en 2018 poseían cada uno un tercio del capital, junto a Borja Prado. El 11 de diciembre de 2018, ocho meses después del acuerdo con NTV, ambos vendieron sus participaciones en las sociedades gestoras de Peninsula a dos sociedades registradas en Sharjah: MBB Holding y Casan Holding. Éstas, a su vez, las volvieron a vender, ese mismo día, a una sociedad luxemburguesa, Peninsula Holding, propiedad al 50% de las mismas sociedades emiratíes de Javier de la Rica y Stefano Marsaglia. [Puede leer aquí todos los detalles sobre esta singular operación].

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