RTVE

El PP arremete contra el Consejo de Informativos y los sindicatos

“¡TVE es de todos!”

El Partido Popular está en guerra con los representantes de los trabajadores de RTVE. La declaración formal la han realizado en sede parlamentaria Ramón Moreno, portavoz de esa formación en la comisión de control parlamentario, y el diputado por Barcelona Antonio Gallego Burgos. Ambos han usado la formula de pregunta/alegato al presidente de la Corporación: Medidas para proteger a los servicios informativos de RTVE de las constantes intromisiones y dictados sobre los contenidos que ofrecen, atacan y descalifican su independencia (Moreno); Opinión del Presidente de la corporación RTVE acerca de si los profesionales de RTVE están suficientemente salvaguardados de presiones y chantajes, internas y externas, en el ejercicio de su función suficientemente salvaguardados de presiones y chantajes,(Gallego).

Así figuraban por escrito en la relación que facilitaron este martes los servicios de comunicación del Congreso antes de la sesión. Al verbalizar la suya, el portavoz del PP dijo: "Algunos mal llamados profesionales han elevado el diapasón de los ataques hacia sus compañeros hasta niveles que únicamente dan la razón a los que quisieran que RTVE no existiera... ; leer, oír descalificaciones profesionales, frases como la vuelta a las barricadas, o insultos como mercenarios, sicarios, fascistas, lo único que consiguen es demostrar la catadura moral de quienes desde el anonimato de una hoja sindical... demuestran que cualquier tiempo pasado no fue mejor". Por su parte, el diputado del PP por Barcelona señaló: "Nos llena de sonrojo observar cómo para el Consejo de Informativos hay dos varas de medir..., si se entrevista a alguién del PP, las preguntas punzantes son una oda a la liberta periodística; si se trata de un dirigente de izquierdas es un canto al sectarismo y a la intolerancia...; nos parece cuanto menos curioso que los sindicatos mayoritarios dejen a los pies de los caballos a los profesionales para defender a Pablo Iglesias".

Repulsa sindical y del Consejo

Unas acusaciones que, desde Comisiones Obreras, suponen confundir la esencia de las crítícas: "Nosotros –dice Maite Martín, secretaria general en la Corporación– estamos a favor de que se pregunte a Pablo Iglesias, y a quién sea, todo aquello que pueda ser noticioso y de interés general, tanto si se habla de ETA, como de cualquier otro asunto; todas nuestras censuras van a dirigidas a que se haga, como fue el caso, de manera insidiosa y malintencionada, lo de la enhorabuena era más una afirmación que una pregunta e implicaba una intencionalidad; pero es que el tono general fue de crispación, no de obtener información u opiniones".

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Para UGT, en boca de sus secretario general, Miguel Angel Curieses, "si hay un tiempo peor en RTVE es el actual, con un Gobierno que es el que la ha puesto en peligro; no cree en la radiotelevisión pública y, en consonancia, la asfixia económicamente, manipula la información y desprecia la producción propia. El resultado es la pérdida de oyentes y espectadores. UGT no cuestiona a los profesionales, ni defiende a Pablo Iglesias; pide precisamente que se deje a los profesionales trabajar con libertad y que se deje de presionar en favor del Gobierno".

Otro de los afectados es el órgano de representación de los Informativos, que ha declarado a infoLibre que "no tiene ni voluntad ni interés en entrar en una guerra de descalificaciones. Nuestra postura ante lo que ha ocurrido hoy en la Comisión de Control es que: el Consejo de Informativos es un órgano profesional, creado por la ley, cuyos componentes son elegidos democráticamente por y entre los profesionales de la Corporación (algo que suponemos conocen todos los legisladores y especialmente aquellos que forman parte de la Comisión de Control). Lo que ha hecho y hace el Consejo es cumplir con las funciones que le marca la misma Ley que los crea: velar por la independencia de sus profesionales y vigilar por la independencia de la línea editorial de la CRTVE".

Al margen de lo ocurrido este martes en sede parlamentaria, el presidente de ese organismo, Alejandro Caballero, afirma que "el Consejo no se ha puesto al lado de ninguna formación política. Si esa misma insidia en forma de pregunta (la que dirigió Sergio Martín a Pablo Iglesias) hubiera sido lanzada contra cualquier otro entrevistado, –fuera o no político y perteneciera a la formación que perteneciera–, el análisis deontológico y profesional hubiera sido el mismo. Para el Consejo no se trataba de un encuentro o un enfrentamiento entre el entrevistador y el entrevistado (no nos interesan los lenguajes frentistas e incluso bélicos) sino entre una forma profesional de hacer una entrevista y una forma poco profesional de hacerla".

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