Perfil
Carlos Cuadrado: un fijo en la trastienda del equipo de confianza de Albert Rivera
Los problemas judiciales que Carlos Cuadrado, el tesorero de Ciudadanos, está teniendo en Brasil y de los que ha dado cuenta infoLibre no deben sorprender en la cúpula del partido. Antonio Robles, el que fuera secretario general de Cs en su primera etapa —acabó abandonando su escaño en el Parlament catalán y su militancia en la formación naranja cuando Rivera pactó una coalición con Libertas, un partido de derecha extrema, en las europeas de 2009— asegura que así se lo advirtió en varias ocasiones al propio Albert Rivera.
“Yo con Rivera, no ya como amigo sino como secretario general, me puse serio muchas veces diciendo que [Cuadrado] no podía seguir en la Ejecutiva porque me habían llegado todo tipo de rumores, todos tremendos, de sus negocios con Brasil”, explica en conversación con este periódico. “Pero Albert Rivera, no sé por qué, siempre me pidió confianza y siempre lo sostuvo. Incluso cuando yo insistí y le dije que no podía ser: ‘Aquí tenemos que tener gente que no tenga ningún tipo de sospecha de nada', le dije". Pero “él se negó. No lo entiendo, Albert no es así”, reflexiona Robles, ya apartado de la política activa después de una breve travesía con la desaparecida UPyD.
Carlos Cuadrado (Barcelona, 1968) encaja como un guante con el perfil más habitual entre los tesoreros de los partidos, los cargos ejecutivos que se encargan de buscar dinero y supervisar en qué se gasta. Una posición complicada en un país en el que, desde hace décadas, la financiación de la política está permanentemente bajo sospecha.
El currículum oficial de Cuadrado es muy breve. Incluye una referencia a su formación académica que ni siquiera aclara si acabó sus estudios de ingeniería industrial ni dónde los cursó. Y deja constancia de su condición de “empresario de maquinaria industrial para el sector textil”.
Cuadrado lleva en la Ejecutiva de Ciudadanos, en un cargo tan relevante como el de tesorero, desde su fundación en 2006, algo que le vincula estrechamente con el presidente del partido, Albert Rivera, sobre todo después de que, superados los primeros tiempos más tumultuarios, este se hiciera con el control de la organización.
El PP ve “clarísimo” que la Fiscalía tiene materia para actuar contra el tesorero de Cs que ocultó sus causas judiciales al Senado
Ver más
Siempre en segundo plano, al menos hasta hace unos meses, su nombre no forma parte del grupo de dirigentes que con frecuencia acompañan a Rivera en el debate público, como Inés Arrimadas, José Manuel Villegas o Juan Carlos Girauta. No obstante, y aunque sólo sea por lo delicado de su cargo, todo el mundo da por hecho que se trata de un dirigente de la máxima confianza del presidente del partido.
A pesar de que sigue sin tener cargo público, su anonimato terminó el pasado verano, cuando el PP decidió convertirle en blanco de una estrategia dirigida a cuestionar las cuentas del partido naranja utilizando como instrumento la comisión de investigación de la financiación de los partidos políticos que puso en marcha unilateralmente en el Senado como respuesta a la que en el Congreso, esta sí con el apoyo de todos los partidos, trata de arrojar luz sobre la contabilidad de la formación de Mariano Rajoy.
Desde entonces, el PP ya ha hecho comparecer a Cuadrado en dos ocasiones. La última tuvo lugar en febrero, apenas unas semanas después de que el Tribunal de Cuentas hiciese público un informe en el que suspende la contabilidad oficial de Ciudadanos de 2015. La reunión acabó en una bronca monumental, con un grave intercambio de acusaciones entre Cuadrado y el portavoz del PP, el senador Luis Aznar.