Cifuentes dice que no es su responsabilidad controlar a los ultras de fuera de Madrid

La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha asegurado este martes que "bastante" tiene con controlar los grupos violentos de Madrid "como para controlar" los de fuera y ha insistido en que la Policía no sabía que venían los ultras del Riazor Blues, señalando que se han podido malinterpretar las declaraciones del delegado del Gobierno de Galicia, Santiago Villanueva.

En una entrevista en Telecinco, recogida por Europa Press, Cifuentes ha insistido respecto a la pelea que se produjo el domingo entre ultras del Atlético de Madrid y el Deportivo de La Coruña en que la Policía no tenía constancia de que veían los hinchas del Riazor Blues y si lo hubiera tenido, se hubiera puesto un dispositivo policial como en otros partidos calificados de alto riesgo.

"En Madrid, hay cada dos semanas partidos de alto riesgo. Es muy habitual. Lo cierto es que la Comisión Contra la Violencia no lo declaró como alto riesgo y no se pudo poner un dispositivo como en otras ocasiones", ha reiterado.

La delegada ha explicado que los autobuses que trasladaron a los ultras del Deportivo se alquilaron en Lugo, pero salieron desde A Coruña. Para Cifuentes, es evidente que "eludieron" y pusieron todas las "precauciones" para evitar la vigilancia policial, ya que lo que se suele hacer es acompañar los vehículos con los aficionados para "evitar que estos ultras puedan estar solos". "Venían a lo que venían", ha aseverado.

Preguntado sobre por qué no se tuvo noticia de que venían, ha señalado que, por un lado, la comisión no valoró que hubiera motivos de pensar que se podrían producir incidentes, ya que en los últimos seis años no se ha producido un choque directo entre los aficionados de ambos equipos. Y por otro, ha precisado que la forma más eficaz de saberlo es a través de la venta de entradas.

"El Atlético dio al Depor unas 350 entradas y es el equipo quién debe controlar a quién lo vende. No se informó de que se había vendido un número elevado de entradas a los Riazor Blues. No sabíamos que venían", ha insistido.

"Son grupos de delincuentes que aprovechan el fútbol para resolver sus diferencias. Su actividad delictiva se limita a los partidos. Yo soy delegada del Gobierno en Madrid y bastante tengo con controlar los grupos violentos de Madrid cómo para controlar los de otras provincias", ha reseñado en alusión a que catorce de los detenidos son hinchas del Deportivo, dos de Bukaneros y uno de Alcork Hooligans.

De este modo, ha aseverado que esto demuestra que "no fue un encuentro casual, ya que "había voluntad para pegarse" incautándose barras de acero y otras armas.

Tras reseñar que no se descartan más detenciones, Cifuentes ha subrayado que la máxima prioridad es determinar quién es el autor o autores del crimen de Francisco Romero, el ultra del Deportivo que falleció en la pelea.

Sobre si ha hablado con el delegado del Gobierno de Galicia, Santiago Villanueva, ha indicado que lo hizo el pasado domingo y el lunes, apuntando que no sabe si se están "malinterpretando sus declaraciones" sobre los incidentes.

"Yo lo que digo es que la Policía Nacional no tenía conocimiento de que venían estos radicales porque se hubiera puesto un dispositivo. Me remito a las palabras del director general de la Policía y del Secretario de Estado de Seguridad", ha apostillado.

Además, ha reseñado que ella siempre documenta todo y desde un primer momento pidió informes a la Policía. "Insisto en que no voy a entrar en esa disputa. Si ha habido errores y fallos hay que superarlos y hacer lo necesario para que en el futuro no se repitan", ha agregado.

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Por ello, ha considerado que hay que atacar el problema de raíz, ya que sin duda todo esto es "un cáncer que tiene el fútbol español". "Algunos equipos como el Real Madrid y el Barça lo han atajado y el resto de equipos deben hacerlo porque no tiene nada que ver con el deporte porque son grupos de delincuentes y tendrían que tener prohibida la entrada en los estadios".

"Yo no acuso a nadie. Cuando ocurre, las responsabilidades se comparten. Tan responsable es el Deportivo como el Atlético. Hay involucradas personas de ambos equipos. La culpa la tienen igual. Cuando hay partidos que se producen fuera de una provincia, el equipo de visita está obligado a informar a qué grupos o peñas van a parar las entradas. Esta implicación de los clubes ayuda mucho a resolver esta situación", ha señalado.

"No pienso que el Depor diera la entrada a los de Riazor. Nos hubiera informado. Creo que al parecer ha sido un grupo de peñas quienes proporcionaron las entradas al Riazor Blues por encima de la Dirección del grupo y sin notificarlo", ha concluido.