La Diputación de Ourense retira la medalla de oro a Franco

Sesenta años después de aprobar la concesión de la primera medalla de oro de Ourense al dictador Francisco Franco, la Diputación de Ourense, la única de Galicia que todavía mantenía este reconocimiento, aprobó retirársela por unanimidad, en cumplimiento de la Ley de la Memoria Histórica y como homenaje a las víctimas de la dictadura, según informó Europa Press.

"Os tempos son chegados", señaló en referencia al himno gallego el portavoz socialista Francisco Civeira, que defendió la retirada de este galardón como "un ejercicio de memoria histórica, justicia y de rehabilitación de los perseguidos por el fascismo".

Civeira recordó que la concesión de la medalla se produjo en julio de 1956, con motivo de la visita de Franco a la provincia para inaugurar la línea férrea entre Sanabria y O Carballiño, y que su retirada es un símbolo de que las instituciones públicas "deben tener un posicionamiento claro de condena al golpe del 36 y a la dictadura".

En cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica

En su intervención, el portavoz conservador Plácido Álvarez confirmó el apoyo de su formación, "no podía ser de otra forma", en cumplimiento al artículo 15 de la Ley de la Memoria Histórica, y recordó que "cualquier reconocimiento al Dictador y al franquismo están completamente borrados en esta institución".

Álvarez reiteró el rechazo del PP a la dictadura franquista, pero "también a cualquier otra forma de gobierno o imposición a los ciudadanos donde no haya plena libertad de expresión y pensamiento".

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El portavoz del BNG, Ramiro Rodríguez, apuntó la necesidad de seguir avanzando en la condena al régimen franquista y puso como ejemplo Alemania, "donde la apología del nazismo es un delito con penas de prisión por negar en público y privado los actos del nazismo".

Rodríguez lamentó que en España "la ley no contempla la apología del franquismo", lo que "permite que cada 20 de noviembre" haya actos de homenaje en el Valle de los Caídos, "misas por el descanso del genocida" o "actos de exaltación como el que se vive cada año en Beade (Ourense)", que considera "deberían ser sancionados de forma inmediata".