España consigue su plaza en el Consejo de Seguridad para el bienio 2015-2016

España se sentará finalmente en el Consejo de Seguridad de la ONU en el bienio 2015-2016. La gran apuesta de política exterior del Gobierno logró salir adelante. Pero costó.

Hicieron falta tres votaciones para saber la identidad final de cinco de los diez asientos no permanentes del Consejo que ocuparán su silla a partir del próximo 1 de enero y por un periodo de dos años. En la primera salieron elegidas, directamente –dado que consiguieron la necesaria mayoría de dos tercios de los miembros de la Asamblea General de la ONU–, Angola (190 papeletas), Malasia (187), Venezuela (181) y Nueva Zelanda (145). En esta primera ronda, España obtuvo 121 votos (necesitaba 129, ya que emitieron su sufragio los 193 miembros de la Asamblea), y Turquía, 109.

Como ninguna de las dos pasó el listón, el presidente de la Asamblea, el ugandés Sam Kutesa, convocó una segunda vuelta. 120 votos para España, 73 para Turquía. Ninguna recabó la mayoría de dos tercios, y fue necesaria una tercera vuelta. En esta, España recabó 132 papeletas, y su rival turca, 60. En esta última fase se emitieron 192 votos a candidaturas y una abstención, por lo que la mayoría necesaria bajó a 128 apoyos. Así, España superó la barrera por cuatro votos. 

Las cinco vacantes que se liberan a partir del 1 de enero se reparten entre grupos regionales. Y el único en el que había competencia era en el de Europa Occidental y otros Estados (WEOG), al que pertenece España, y para el que había dos sillas por cubrir. El Gobierno de Mariano Rajoy rivalizaba con Turquía y Nueva Zelanda. Ambos, duros contrincantes, como reconocía Exteriores. El escenario de una victoria de Nueva Zelanda en la primera ronda y un posterior cuerpo a cuerpo con Ankara era el que manejaba el equipo del ministro de Asuntos Exteriores, el que ha defendido la campaña, informa Europa Press. 

España se jugaba un puesto muy codiciado, un escaño en el máximo órgano de decisión del mundo en cuestiones de paz y seguridad, el que abre la puerta a la política internacional de primer nivel. Un asiento que ha venido ocupando una vez cada 10 años desde su ingreso en la ONU en diciembre de 1955. Así, se convirtió en miembro no permanente del Consejo en los bienios 1969-1970 (en los años finales del franquismo), 1981-1982, 1993-1994 y 2003-2004. Este último periodo estuvo marcado por la guerra de Irak y el apoyo que le prestó el Ejecutivo de José María Aznar a EEUU. 

Prácticamente nada más acabar su último bienio, en 2005, España, bajo la presidencia de José Luis Rodríguez Zapatero, presentó su candidatura para 2015-2016, apuntalada en los valores del diálogo, la prevención del conflicto y la participación en las misiones internacionales de la ONU. El Ejecutivo también puso en valor que es el sexto donante mundial de Naciones Unidas, un peso que le daría derecho a un puesto no permanente en el Consejo de Seguridad al menos una vez cada década. 

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Las caras, primero de decepción y luego de alegría, eran visibles en la delegación española, encabezada por el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, y al que acompañaron en la sala el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Gonzalo de Benito; el embajador de España ante la ONU, Román Oyarzun; el director general de Política Exterior, Ignacio Ibáñez; la directora general de la Oficina de Información Diplomática (OID), Cecilia Yuste, y la directora general de Medios y Diplomacia Pública, María Claver. 

Desde Milán, en donde participaba en una cumbre euroasiática, Mariano Rajoy se felicitó de la victoria de España. Nuestro país "ya fue miembro durante un periodo de dos años. Revalidar la confianza que nos dieron en aquella etapa es algo de lo que nos podemos sentir legítimamente orgullosos y satisfechos", dijo el presidente, en una declaración sin preguntas. "Es una excelente noticia", enfatizó, informa Europa Press. También el principal partido de la oposición se congratuló del triunfo en Nueva York. La portavoz de Exteriores del PSOE, Trinidad Jiménez, felicitó al Gobierno por el "importante triunfo" que supone la vuelta de España en el Consejo de Seguridad de la ONU y subrayó el trabajo por haber llevado "todo el peso de las negociaciones". Es una "muy buena noticia para España", apuntó.

El Consejo de Seguridad cuenta con cinco miembros permanentes –EEUU, Reino Unido, Francia, China y Rusia–, con derecho de veto, y diez no permanentes, que son elegidos por periodos de dos años y tienen derecho de voto. A los cinco Estados elegidos este jueves (Angola, Malasia, Nueva Zelanda, Venezuela y España), se suman los que continúan como miembros rotatorios durante un año más (su bienio es el de 2014-2015): Chad, Chile, Jordania, Lituania y Nigeria. Del Consejo salen, pues, Argentina, Australia, Luxemburgo, Corea y Ruanda.