García Montero reivindica el “orgullo” de IU y su discurso de “izquierda” y “justicia social”

La candidatura del poeta Luis García Montero para la Presidencia de la Comunidad de Madrid echa a andar definitivamente. Y lo hace con la promesa de la firma de un "contrato social" con los ciudadanos, un documento en el que le asesorará el Consejo Cívico, un núcleo de 17 personalidades del mundo de la cultura, los sindicatos, la universidad y los movimientos sociales. Una comisión que también se encargará, durante la próxima legislatura, de velar por el cumplimiento del programa.

El candidato de Izquierda Unida-Comunidad de Madrid (IU-CM) presentó este viernes, en el Ateneo de la capital, a su Consejo Cívico, que "es algo más que un comité de sabios, es también un consejo de ciudadanos y de referentes sociales". Y lo hizo rodeado de algunos de sus miembros, como el exjuez Baltasar Garzón, el exlíder de CCOO y exdiputado socialista Antonio Gutiérrez, el párroco de la iglesia roja de San Carlos Borromeo Javier Baeza, el exdelegado del Gobierno para la Violencia de Género Miguel Lorente, la periodista Teresa Aranguren, el exrector de la Complutense Carlos Berzosa o la feminista Begoña San José. Ante ellos dio algunas puntadas de las líneas estratégicas de su candidatura y de la campaña electoral. La prioridad, "expulsar" al PP de las instituciones madrileñas. E incidiendo en el discurso clásico de IU, "la importancia de la palabra izquierda" y la "justicia social". García Montero también se propone, para "recuperar el orgullo" de IU, conquistar un valor que "no es tan tradicional" en la federación, "la hermandad", "superar las peleas internas".

El escritor encabeza la lista de IU-CM en un momento crítico para la federación, sumida en los últimos meses en una batalla sin cuartel. Su propia candidatura se planteó como una solución superadora del conflicto tras la marcha de la ganadora de las primarias del 30 de noviembre, Tania Sánchez. Su tarea, ahora, es intentar que las heridas internas se suturen y que las expectativas electorales crezcan.

IU no nace con la crisis

García Montero recordó que IU "no es un partido que haya surgido de la crisis", como Podemos (al que no mencionó). "No sólo pretendemos recoger a indignados por la crisis. Llevamos mucho tiempo comprometidos en cambiar el modelo que ha provocado la crisis. Tenemos experiencia y hemos estado en las luchas sociales y por eso respetamos a los referentes sociales que nos marcan con su experiencia y sabiduría el camino", sintetizó.

Esos "referentes" son los integrantes del Consejo Cívico. Cada uno de ellos se encargará de elaborar un compromiso con los votantes en distintas materias. Así, Garzón asume la regeneración democrática; Javier Baeza, con la abogada de la parroquia roja de Entrevías (Vallecas), Patricia Fernández, la defensa de los derechos humanos; el doctor Marciano Sánchez Bayle, cabeza de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, conduce el compromiso con la sanidad de todos; el sindicalista de CCOO y activista de la marea verde Agustín Moreno, el área de educación pública; el escritor Eduardo Mendicutti, el despliegue del compromiso con la igualdad; Miguel Lorente, la carpeta de violencia de género. Carlos Berzosa dirige el compromiso con la economía social y Antonio Gutiérrez, con el nuevo modelo productivo, y la abogada Cristina Almeida, exdirigente de IU y excandidata socialista, pilotará las políticas de memoria democrática... La lista comprende más nombres [consúltalos todos aquí en PDF].Todos prepararán el contrato social que el candidato firmara y que se presentará el próximo 26 de abril en la sala La Riviera de la capital, en un concierto protagonizado por Miguel Ríos y Joaquín Sabina.

Esta composición del Consejo, y el reparto de áreas pretende lanzar un mensaje diáfano: "Hay que desmantelar las políticas del PP en Madrid, una por una", y no sólo por la corrupción, dijo, sino por su labor de desmontaje de los derechos públicos y de aumento de la "brecha social y la desigualdad".

La "conciencia de clase"

García Montero recalcó que afronta la campaña "con mucho respeto" a sus adversarios –básicamente, Cristina Cifuentes (PP), Ángel Gabilondo (PSOE) y José Manuel López (Podemos)– y con "mucha conciencia" del valor que "singulariza" IU, que es "la importancia de la palabra izquierda", "la conciencia de clase y la apuesta por las garantías democráticas", que son "irrenunciables". "Una democracia no puede convertirse en un discurso hueco que renuncie a la justicia social, ni esta puede poner en peligro ninguna de las garantías democráticas". Además de esta "línea tradicional" de IU, el candidato se marca como objetivo "recuperar el orgullo" de la organización tras meses de guerra interna, y para ello ha de lograr "la hermandad", "cerrar los capítulos y dejarlos en el pasado". "Comprender que todos nos necesitamos y todos estamos en el mismo barco", dijo.

Y aunque sea "antipático" hablar de pactos en campaña, García Montero subrayó que la "prioridad" de la izquierda ha de ser "expulsar" al PP de las instituciones. Y cada formación deberá hacerlo, avisó, "en función de sus fuerzas e intereses".

Durante el acto de presentación del Consejo Cívico, intervinieron también algunos de sus miembros para anticipar algunas líneas de trabajo. Baltasar Garzón prometió buscar cauces que permitan una "democracia más viva y directa". La constitucionalista Cecilia Rosado, encargada del compromiso constituyente, articulará una propuesta de reforma del Estatuto de Autonomía, para ampliar los derechos ciudadanos, incluir instrumentos de participación y plantear una financiación basada en "la equidad y la eficacia". Asimismo, se sugerirá un cambio del reglamento de la Asamblea de Madrid, para hacerla "más ágil".

Las promesas de los miembros del comité

La joven Irene Zugasti, politóloga y periodista, que asume el compromiso con el futuro, se centrará en la promesa de "emancipación y autonomía personal", en políticas de empleo, vivir da, educación y derechos sociales para los jóvenes. El párroco Javier Baeza insistió en la necesidad de preocuparse por la situación de "pobreza", no sólo en la capital, sino en muchos pueblos de la Comunidad. Miguel Lorente recordó que el combate contra la violencia de género necesita "prevención y participación de toda la sociedad", porque la sufren "todas las personas", sean víctimas directas o no. Begoña San José denunció cómo los Gobiernos del PP se han puesto "a la vanguardia" en las políticas de desigualdad y Marciano Sánchez Bayle, cómo han acometido una "destrucción sistemática" de la sanidad pública.

Antonio Gutiérrez, mientras, alabó al candidato, porque no forma parte de la "coalición de necios y malvados" que "recorre todos los partidos". García Montero, señaló, no va de "listillo", sino que es "imperfecto" y, como tal, "decente".

Otros miembros del Consejo Cívico no pudieron acudir, como Carlos Berzosa, Agustín Moreno o Cristina Almeida, que tenían que atender compromisos cerrados anteriormente. Entre el público sí se encontraban el dirigente confederal de CCOO Ramón Górriz y el jefe del sindicato en Madrid, Jaime Cedrún, así como miembros de la ejecutiva federal de IU –Antonio Cortés, Tasio Oliver, ambos de Izquierda Abierta– y de la cúpula regional, e intelectuales como Almudena Grandes.

Dos listas y no una

En la sala también se podía ver a varios dirigentes de IU-CM. Incluso algunos de los que, como luego se comprobó por la tarde, irían en las listas a la Asamblea y al Ayuntamiento de la capital, que se aprobaron por la tarde en el Consejo Político Regional (CPR).

Al final, no hubo acuerdo para presentar una candidatura unitaria, pese a que las negociaciones estuvieron desplegándose hasta este mismo viernes, incluso en el Ateneo, después del acto de García Montero. De un lado, se defendió una lista integrada por dirigentes de SomosIU –la vieja guardia, el sector próximo a Ángel Pérez– y del grupo próximo al exsecretario de Organización federal Miguel Reneses. De otro, la de Espacio Plural, la corriente afín a Julián Sánchez-Vizcaíno. Quien no puso sobre la mesa ninguna lista, porque no reconoce a los órganos, fue Cambiar Madrid, la plataforma que orbita en torno al secretario general del Partido Comunista de Madrid (PCM), Álvaro Aguilera, y en la que hasta hace una semana se encuadraba Mauricio Valiente, el ganador de las primarias municipales. Este ya es candidato en Ahora Madrid. En los últimos días, hubo presión por parte del líder del PCE, José Luis Centella, para que se incluyesen en la lista miembros de la plataforma, pero al final el diálogo fracasó. 

El Consejo Político primero blindó los puestos 1, 2 y 3 de la candidatura autonómica. Así, salvó de la confrontación a Luis García Montero, a su persona de confianza, Montse Muñoz –coportavoz federal de Izquierda, partido al que ambos pertenecen– y al sindicalista Agustín Moreno. También procedió a ratificar a Raquel López como candidata al Ayuntamiento de la capital, en sustitución de Valiente. López fue la aspirante oficialista en las primarias, afín a Ángel Pérez, y las perdió contra Valiente. En el CPR, fue respaldada por 101 votos a favor, uno en contra y tres abstenciones, según indicaron desde la cúpula regional. Además, se blindaron cuatro asientos entre los 21 primeros puestos de la candidatura autonómica para los trabajadores de Coca-Cola, Telemadrid, y las mareas blanca y verde. 

La lista a la Comunidad defendida por SomosIU, y que encabezaba la diputada Libertad Martínez, obtuvo 100 votos, por los 39 de la liderada por el médico José Andrés Llamas (de Espacio Plural), más 3 blancos y 4 nulos. La candidatura municipal capitaneada por Julián Sánchez Urrea (coordinador de IU en Chamartín y dirigente de la confianza de Reneses) fue apoyada por 96 votos a favor, la de Lali Vaquero (del grupo de Vizcaíno) recabó 38 respaldos, y se registraron 7 blancos y 6 nulos. En función de esos resultados, se repartieron los puestos proporcionalmente.

Las primeras plazas de la candidatura autonómica para los comicios del 24-M son las que siguen:

Y la lista al Ayuntamiento de Madrid es esta, en sus primeros puestos: 

Las listas, pues, son prácticamente monocolores, porque si se salvan los puestos reservados, no tienen ningún contrapeso del sector crítico. SomosIU, Izquierda Abierta, el grupo de Reneses y Espacio Plural, así como Miguel Ángel Gómez están integrados en la dirección. Agustín Moreno apoyó a Valiente y es del gusto del PCE y del PCM, aunque fue propuesto por García Montero. Y en cualquier caso, su cuota era insuficiente para satisfacer a Cambiar Madrid, que en señal de protesta tampoco quiso acudir este viernes al CPR.

Durante la reunión del Consejo Político también se aprobaron los ejes programáticos [consúltalos aquí en PDF]. IU-CM sabe que no lo tiene fácil de cara a los comicios de mayo. Su objetivo es salvar los muebles y superar la barrera del 5% en el Ayuntamiento y la Asamblea, umbral necesario para entrar en el reparto de escaños. La cúpula calcula que podría llegar a ese listón con cierta facilidad en la Cámara regional –y si es así, colocaría a seis diputados de golpe– y que estará más complicado en el Consistorio –un 5% le daría tres ediles–. La competencia con Podemos y las luchas internas han hecho mella. 

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