Montero acusa al PSOE de “fraude electoral” por el “abstencionazo” y dice que Podemos tiene las puertas “abiertas”

La dirigente de Podemos y portavoz adjunta en el Congreso, Irene Montero, denunció el "abstencionazo" y el "fraude electoral" que, a su juicio, está a punto de cometer el PSOE si finalmente permite gobernar al PP PPy, aunque se mostró "muy respetuosa" con la crisis interna que esta cuestión está generando en las filas socialistas, recordó que su formación siempre tiene "las puertas abiertas para todo el mundo que quiera aportar".

En una entrevista concedida a Europa Press, Montero aseguró que desde Podemos no pueden invitar ni a los dirigentes ni a los militantes críticos con la Gestora del PSOE y la posible abstención a unirse a Podemos si consideran que ese partido ya no representa sus intereses, pero añadió que, si lo decidieran, el partido morado tiene sus puertas abiertas.

"Tenemos las puertas de Podemos y del espacio político que representa abiertas para todo el mundo que quiera aportar, y eso es una decisión que tendrán que tomar ellos en su caso. Pero quiero ser muy escrupulosa y muy respetuosa", reafirmó.

La jefa de gabinete del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, aseguró que en su formación no entienden la crisis del PSOE como algo de lo que puedan beneficiarse, en la medida en que la forma de resolverla con ese "abstencionazo" implica "un intento de cierre oligárquico que beneficia a los privilegiados y no a la mayoría social castigada por la crisis".

El reto, "liderar la oposición"

"La crisis del PSOE no es algo de lo que sentirnos felices y orgullosos o algo de lo que aprovecharlos porque, para nuestro país, que el PSOE se abstenga es una mala noticia", lamentó. Eso sí, aseguró que esa deriva del PSOE no es "su responsabilidad" y que el deber de Podemos es trabajar para ser capaces de "liderar la oposición parlamentaria".

"Lo que tenemos que hacer ahora es asumir con mucha responsabilidad dentro de las instituciones la oposición parlamentaria, que es la que nos han otorgado. Tenemos que ser capaces de liderar esa oposición y luego tenemos que hacer un trabajo de fortalecimiento de los sectores de la sociedad civil organizada", matizó.

Aunque Montero da por hecho el inminente "abstencionazo", defendió que el PSOE debería consultar a sus bases la decisión de abstenerse en la previsible investidura de Mariano Rajoy, porque si no, estará cometiendo ante sus votantes "un fraude electoral".

"Van a hacer justo lo contrario de lo que decían en campaña. Están traicionando el voto de una manera muy clara porque en campaña dijeron 'no es no' y ahora van a entregarle el gobierno al partido de la corrupción", denunció.

"Si fuese votante del PSOE, querría que me volvieran a preguntar"

De hecho, la jefa de gabinete de Iglesias va más allá y considera que los votantes socialistas, no ya los militantes, preferirían que se les preguntara "otra vez" porque cuando dejaron sus papeletas en las urnas lo hicieron convencidos de que el PSOE no permitiría un gobierno del PP; es decir, Montero cree que los votantes socialistas preferirían unas terceras elecciones antes que una abstención que permita que Rajoy siga en La Moncloa.

"Si yo fuese votante del PSOE, preferiría que, antes de entregarle un gobierno al PP habiendo dicho en campaña que no iban a hacerlo, me volviesen a preguntar, porque yo cuando he votado al PSOE lo he hecho pensando que el 'no' era una realidad. Si fuese votante del PSOE de alguna manera me enfadaría mucho con este fraude electoral", avisó.

A su juicio, un gobierno del PSOE con Unidos Podemos "tendría muchísimo más apoyo". No obstante, Montero aseguró que los socialistas nunca quisieron realmente formar un Ejecutivo progresista con ellos, ni siquiera el sector del exsecretario general, Pedro Sánchez, y sus afines que, según apuntó, primero querían gobernar con Ciudadanos y, tras los comicios de junio, "repetir elecciones a ver si ganaban por cansancio".

"No había ningún PSOE que quisiera gobernar con nosotros", enfatizó, al tiempo que aseveró que en ningún momento Sánchez les trasladó "una propuesta en firme" durante las conversaciones que mantuvo con Iglesias tras las elecciones del 26 de junio. "Eso nunca se produjo. Había una conversación más fluida, pero nunca hubo una propuesta por parte del PSOE", aseguró.

En esta línea, Montero considera que Podemos acertó con su decisión de no abstenerse tras las elecciones del 20 de diciembre para permitir un gobierno de Sánchez, basado en su pacto con Ciudadanos, aunque "entonces a lo mejor no se entendiera", e incluso algunas voces del partido morado defendieran esa posibilidad, tal y como reconoció.

"Acertamos" tras el 20D

"Ahora todos los ciudadanos entienden que nosotros calibramos bien que ese acuerdo no estaba preparado para un gobierno de progreso entre el PSOE y Podemos sino para ponerle la alfombra roja al PP", apuntó.

"Lo cierto es que Pedro Sánchez yo creo que nunca tuvo la voluntad real de hacer un gobierno progresista con nosotros. Lo que querían era repetir elecciones a ver si ganaban por cansancio lo que no había ganado hasta ahora. Esa era la clave, y luego había otro PSOE que es el que da el golpe de régimen, y que lo que quiere es que gobierne el PP", ahondó.

Según Montero, esos sectores del PSOE partidarios de la abstención y, por lo tanto, de dejar gobernar al PP, son cómplices del "golpe de régimen" que se articuló, a su juicio, desde "las élites políticas y económicas", con el objetivo principal de "que Podemos no gobierne" para "seguir aplicando recortes".

La dirigente del partido morado acusó así al PSOE de pretender usar ese "abstencionazo" para lograr de esta forma lo que no consiguieron en las urnas: mantener intacta esa "situación de turnismo" y la "alianza de los sectores del régimen" para seguir aplicando recortes e impedir que avance el cambio.

"Quieren un abstencionazo para garantizar que gobierne el PP e ir a una situación de turnismo por abstención, y que lo que no han logrado en las urnas, lo logren a través de alianzas de sectores del régimen", enfatizó.

De hecho, Montero acusó directamente al presidente de la Gestora del PSOE, Javier Fernández, de querer "aplicar las políticas del PP", al tiempo que censuró el tono empleado por el también presidente asturiano para dirigirse a Iglesias, al que llamó "farieso" y "caifás".

No obstante, aseguró que no es el tono que empleen los socialistas o en Podemos para dirigirse los unos a los otros lo que hace difícil el entendimiento, sino "que quien manda ahora en el PSOE está a favor de las políticas del PP".

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"Ya ni disimulan" su acercamiento al PP

Además, criticó que Fernández y los partidarios en el PSOE de la abstención ya no se preocupan ni por disimular su acercamiento "a la derecha", tal y como se demostró, a su juicio durante los actos de celebración del 12 de octubre. "No se vio tanta distancia y había hasta cierta distensión, alegría y compadreo entre esas élites del PSOE que le quieren entregar el gobierno al PP", lamentó.

"Recuerdo una chirigota de los carnavales de Cádiz que decía: tenga cuidado el PSOE, a ver si se va a colocar a la derecha con disimulo. El 12 de octubre ya no había tanto disimulo. En según qué momentos un poco de oficialidad o de elegancia, pero poco disimulo para colocarse del lado del partido más corrupto, me atrevería a decir de la historia de Europa", sentenció.