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Dime qué estudias y te diré si tendrás trabajo: así es la brecha de ocupación laboral entre los jóvenes

Juan Ramón Fuertes, durante la presentación del informe 'Jóvenes, oportunidades y futuros en España y Portugal' del Observatorio Social de la Fundación ”la Caixa”, este martes.

"La brecha de ocupación entre jóvenes con formación superior frente a la básica aumentó 8 puntos en 20 años". Es una de las conclusiones presentes en el estudio Jóvenes, oportunidades y futuros en España y Portugal del Observatorio Social de la Fundación "la Caixa", que trae luz sobre futuro laboral de los jóvenes en ambos países en comparación con los Estados de la Unión Europea.

El estudio ha sido presentado este martes en un acto en CaixaForum Madrid. "Ha sido un trabajo extenso de 15 meses", ha comentado Juan Ramón Fuentes, director general adjunto de la Fundación "la Caixa", que junto a Arantxa Ribot, directora del Observatorio, han sido los encargados de presentarlo. Estaban presentes también algunos de los protagonistas de una investigación dividida en tres estudios a su vez, cada uno de ellos orientado a una temática concreta.

En el informe La educación y sus efectos sobre las oportunidades de la juventud, Lidia Ferr, investigadora de la Universidade do Porto, y Pedro Abrantes, investigador de la Universidade Aberta e ISCTE de Lisboa, han sido los portavoces de un estudio que analiza la evolución educativa de los jóvenes españoles y el impacto de la misma sobre sus oportunidades de trabajo.

En el análisis, se expone, tal y como explica Abrantes, que en España existe un "riesgo añadido de desigualdad y exclusión" debido a que "el nivel formativo se ha vuelto un elemento aún más decisivo" de cara a las opciones laborales de los jóvenes. Según los datos del estudio, obtenidos de la OCDE y Eurostat, en el 2021, último año analizado, existe una diferencia del 19% en tasa de ocupación en favor de los estudios universitarios en comparación con los estudios básicos (primaria o ESO), mientras que en la UE la diferencia es del 29,1%. En el primer año analizado, 2001, la diferencia en ambos países era del 11,1%, mientras que en el resto era del 22,7%. La brecha, más de seis puntos, también se produce entre los jóvenes con educación universitaria y educación secundaria superior (Bachillerato y FP). Es decir, un aumento acelerado en nuestro país en los últimos 20 años de la dependencia universitaria para trabajar "deja en situación endeble a los que no llegan a esa cualificación", apunta Abrantes, pero también deriva en una "evidente mejora laboral para los jóvenes".

Otra tarea pendiente que señala el estudio se centra en resolver la polarización latente en relación a los niveles educativos, siendo la media en España superior a la media europea. "Hay grandes tasas de jóvenes con altas y bajas cualificaciones, lo que implica que muchos jóvenes no tengan la remuneración o incluso el trabajo conforme a su formación", indica Ferro que también ha apuntado como una de las causas de este desequilibrio el estigma de la edad, que "funciona de forma negativa a la hora de insertarse en los sectores públicos y privados". "La educación sigue un camino pero la economía otro, por eso jóvenes cualificados buscan trabajo en otros ámbitos", concluye.

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El trabajo también profundiza en la importancia de las reformas laborales en la mejora del empleo juvenil en el estudio ¿Las reformas laborales han reducido la temporalidad de los jóvenes? Alejandro Godino, investigador del Centre d¨Estudis Sociologics sobre la Vida Quotidiana y la Universitat Autonoma de Barcelona, ha sido el encargado de resolver la disyuntiva. Así, se ha referido a la reducción de la temporalidad juvenil a partir de la reforma laboral realizada en diciembre de 2021, estimada en 2022 en un 10,4%.

Sin embargo, explica Alejandro Godino, "ha habido un efecto positivo con la estabilización de los contratos jóvenes en España" y con la reducción del desempleo al 9%, y "se ha podido estabilizar el efecto composición, heredado de las crisis de 2008 y 2020, basado en la expulsión de los más vulnerables, en este caso los jóvenes. "Con la reforma del 2021, lejos de incentivar una ola de destrucción de empleo, se ha llegado a una limitación legal de la contratación temporal que ha venido acompañada de un ciclo de creación y consolidación de puestos de trabajo. Esto contrasta con los resultados de anteriores reformas, que se focalizaban en medidas de incentivo a contratos indefinidos", ha concluido el investigador.

En el último estudio, Las relaciones personales de los jóvenes con su entorno, Joan M.Verdú, investigador del Centre d¨Estudis Sociologics sobre la Vida Quotidiana y la Universitat Autonoma de Barcelona, se pone sobre la mesa el factor del aislamiento social en la búsqueda de empleo que, según el experto, se da en mayor medida en "jóvenes inmigrantes, desempleados y con mayor vulnerabilidad económica".

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