El Parlamento gallego investigará los supuestos contratos irregulares de la Xunta de Feijóo
El Parlamento de Galicia realizará una investigación política de los contratos de la Xunta con empresas vinculadas al PP y a los familiares del expresidente Alberto Núñez Feijóo y del sobrecoste de 470 millones de euros del hospital de Vigo. No será a través de la vía ordinaria de creación de comisiones de investigación, apoyada por BNG y PSdeG pero rechazada este martes por la mayoría absoluta del PP, sino gracias a la única posibilidad extraordinaria que tiene el BNG en toda la legislatura de activar una investigación. Así lo anunció en el Parlamento la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón.
La petición ordinaria de investigación, tumbada por el PP, fue defendida en el pleno de este martes por Pontón, quien aseguró que "sólo quien tiene algo que ocultar tiene miedo de una comisión de investigación". La nacionalista criticó tanto el "multimillonario sobrecoste del hospital de Vigo" certificado por el Consello de Contas como las dudas existentes sobre la forma en que se tramitaron "miles de contratos adjudicados a dedo a familiares y empresas amigas vinculadas con el PP", especialmente durante la pandemia del covid-19.
En cuanto a los contratos, Pontón reclamó analizar las contrataciones millonarias de la administración gallega con Eulen, en la que Micaela Núñez Feijóo, hermana del expresidente de la Xunta, es directora para el noroeste peninsular. En el ámbito sanitario, también puso el foco en que el principal adjudicatario de los contratos de emergencia durante la pandemia fue Soporte Universal, una empresa de telemarketing con la que la Xunta contrató durante meses los servicios de rastreo telefónico de contactos del covid-19. En esa empresa el director comercial es Ignacio Cárdenas, hermano de la pareja de Feijóo. También recordó que la segunda empresa con mayor contratación de emergencia, Mape Asesores, compró parte del material que importaba de China a una empresa catalana, FCS, que tenía como intermediario a la pareja de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso.
La propia Pontón asumió en su intervención que la mayoría absoluta del PP tumbaría su petición ordinaria de investigación, por lo que ella misma anunció que activará con este asunto la única posibilidad que tiene en toda la legislatura de crear una comisión de investigación en solitario gracias a que el grupo parlamentario del BNG tiene 25 escaños, un tercio del hemiciclo. "Esta vez el final no lo escribirá el PP, los gallegos y gallegas tienen mi palabra de que habrá una comisión de investigación", dijo, para asegurar que "utilizaremos la fuerza de los votos que nos dieron 25 escaños para investigar los contratos". "Digan lo que digan hoy, habrá una comisión de investigación", sentenció Pontón.
A la espera de esa vía extraordinaria, en el debate de este martes de la vía ordinaria la petición del BNG recibió el apoyo del PSdeG, cuya diputada Elena Espinosa criticó la fragmentación ilegal de los contratos por parte de la Xunta para poder adjudicarlos sin concursos públicos. Por el contrario, el PP desestimó cualquier irregularidad al asegurar que los contratos ya habían sido auditados por el Consello de Contas, pese a que este organismo sólo analizó una muestra de ellos y no todos.
Durante su intervención, el portavoz popular, Alberto Pazos Couñago, utilizó referencias a la situación política en Venezuela y a supuestos recortes a los que tendría que recurrir el Gobierno de coalición PSdeG y BNG que gobernó entre 2005 y 2009 si no hiciese el hospital con el modelo concesional con sobrecoste elegido por el PP. Pazos Couñago también retó a Pontón a promover la vía extraordinaria para investigar los contratos y el hospital de Vigo, insinuando que sus conclusiones serán desfavorables para el BNG. Hacía ver así de forma implícita que, aunque el BNG pueda crear la comisión de investigación, será el PP y su mayoría absoluta quien pueda imponer las comparecencias, el ritmo de trabajo y las conclusiones.
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Antes del debate de este martes, el BNG ya había solicitado en agosto, con el apoyo del PSdeG, la comparecencia del presidente Rueda en un pleno extraordinario para dar explicaciones sobre el hospital de Vigo. También en ese momento, el PP tumbó la petición gracias a su mayoría absoluta argumentando que la Xunta "decidió priorizar la salud de los gallegos por encima de los costes financieros del proyecto".
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