Corrupción política
El PP abre un expediente al senador Agramunt tras el 'escándalo Azerbaiyán'
El Comité de Derechos y Garantías del Partido Popular abrió este viernes expediente informativo al senador del PP Pedro Agramunt, un día después de que la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa aprobase una resolución pidiendo la dimisión en esta institución del conservador y del diputado del PDeCAT Jordi Xuclá, tras una investigación que apunta que infringieron el código de conducta para observadores internacionales en las elecciones parlamentarias de 2015 en Azerbaiyán.
El órgano del PP encargado de resolver los procedimientos disciplinarios que en el orden interno se sigan contra afiliados del partido informó en un comunicado que quedará a la espera de la audiencia a la que se someterá Agramunt ante el Comité de Reglamento del Consejo de Europa, que tendrá lugar en mayo en París.
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El informe de actividad encargado por el Consejo de Europa a la comisión independiente que investiga supuestos casos de corrupción en el organismo, y dado a conocer este martes, afirmaba que existían “fuertes sospechas” de que el senador conservador y expresidente de la Asamblea fue partícipe de “una actividad de naturaleza corrupta”. En concreto, le acusó de haber favorecido en sus decisiones en la institución al régimen de Azerbaiyán, país que le habría aupado a la presidencia de la Asamblea con respaldo incluso financiero. Además, mencionaba diversos “regalos”, sobornos en metálico y con prostitutas.
Agramunt negó las acusaciones, que calificó de “falsedades que sus autores reconocen estar basadas en sospechas sin ninguna clase de evidencia o fundamento”. Así, denunció la existencia de una “caza de brujas” contra su persona: "Ojalá yo pudiera hacer esas cosas, pero uno ya no está para eso", expresó en declaraciones a La Ser.
El PP en el Senado dio credibilidad el mismo martes a las explicaciones de Agramunt. El portavoz del PP, José Manuel Barreiro, informó de que había hablado con el senador y descartó emprender acciones hasta que se resuelviera el caso, tras considerar que las argumentaciones del senador valenciano tenían “base", "solidez" y eran "coherentes".
