PP y Ciudadanos se disputan la bandera de Venezuela en vísperas de la campaña electoral

Una parte importante de la precampaña para las elecciones generales del próximo 26 de junio se está jugando a muchos kilómetros de distancia de España. En Venezuela. En las últimas semanas, el Partido Popular Partido Populary Ciudadanos han mantenido una pelea de gestos y declaraciones, una competición, encaminada a demostrar cuál de las dos formaciones agita mejor la bandera de la defensa de la democracia en aquel país. Cuál hace mejor labor de oposición al presidente Nicolás Maduro. Una carrera que, en clave nacional, tiene el objetivo de desgastar a Podemos y ubicar a esta formación en el radicalismo.

El último episodio de este duelo tuvo lugar este jueves, horas después de que Albert Rivera, líder de Ciudadanos, aterrizara en el aeropuerto madrileño de Barajas procedente de Caracas, donde había pasado un par de días. Allí había intervenido ante la Asamblea Nacional y se había reunido con familiares de Leopoldo López, el líder opositor encarcelado desde hace más de dos años. Un referente también para el partido de Mariano Rajoy, que ha contado con algunos de ellos en sus actos de partido.

En una situación inédita, según señalan fuentes conocedoras del contenido de estas reuniones consultadas por infoLibre, el Gobierno en funciones anunciaba, para este viernes, la convocatoria del Consejo de Seguridad Nacional con la situación en Venezuela como plato fuerte. Se trataría de la primera vez que este órgano presidido por Mariano Rajoy aborda este tema desde su creación en 2013 y también la primera en la que se habla de un país de forma tan concreta y se informa previamente a los medios de comunicación de los contenidos que van a abordarse. 

En un comunicado del Ministerio de la Presidencia, se precisa que la introducción de la situación en Venezuela en el orden del día de este Consejo de Seguridad Nacional "ordinario" tiene lugar "tras la declaración del estado de excepción". Y se hace "desde la óptica de los intereses españoles en dicho país". Fuentes de Moncloa señalan que en este país hay unos 200.000 españoles y que son muchas las empresas españolas con intereses en territorio venezolano. Además, lo desvinculan de una "competición" con Ciudadanos. "El Gobierno trabaja por el interés de todos los españoles", señala un miembro del Ejecutivo intentando marcar distancias con las decisiones que podrían tomarse a nivel del PP.Desde noviembre sin reunirse

Desde noviembre sin reunirse

Pese a que la reunión se ha vendido como "ordinaria", choca la convocatoria si se tiene en cuenta que este órgano, tal y como puede consultarse en su página web oficial, debe reunirse "a iniciativa del Presidente del Gobierno como mínimo con carácter bimestral o cuantas veces lo considere necesario, así como cuando las circunstancias que afecten a la Seguridad Nacional lo requieran". La última vez que se reunió fue el 14 de noviembre de 2015, cuando quedaba poco más de un mes para las elecciones. ¿Por qué no se ha reunido desde entonces? Por el parón electoral, subrayan, y porque no había previsión de que el Gobierno en funciones iba a extenderse tanto.

Desde su creación en 2013, el Consejo de Seguridad Nacional se ha reunido en once ocasiones de forma ordinaria y una de forma extraordinaria.

Para intentar vestir de normalidad la cita que Rajoy preside este viernes y a la que están citados diez ministros, además del Jefe del Estado Mayor de la Defensa y el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), en Presidencia del Gobierno destacan que en el orden del día hay otros temas como el análisis de la crisis migratoria, el estado de la amenaza terrorista en España o la aprobación del informe anual de seguridad nacional de 2015.

No será esta, no obstante, la primera vez que la situación en Venezuela sea tratada en una reunión de Rajoy con sus ministros. Hace sólo una semana el Consejo de Ministros aprobó dos reales decretos por los que se concedía la nacionalidad española, por carta de naturaleza, a la hermana y al cuñado de Leopoldo López, "que se encuentra en prisión condenado a casi catorce años de cárcel tras un juicio repleto de irregularidades", figuraba en la referencia de esta reunión. Esta decisión tenía como fin, según Moncloa, "que puedan afrontar con mayores garantías democráticas la especial situación familiar y personal motivada por la persecución política y judicial a la que están sometidos".

Fuera de Moncloa, en el frente partido, los conservadores también han aprovechado la visita de Rivera a Venezuela para sacar pecho de su discurso en esta materia y, de paso, afear las relaciones de Ciudadanos con Podemos en el ámbito municipal.

La política de pactos

En una entrevista concedida a Radio Nacional de España (RNE), el vicesecretario de Organización y Electoral del PP, Fernando Martínez-Maillo, confió en que la visita de Rivera a Caracas tenga efectos en algunos ayuntamientos en los que se puso junto a PSOE y Podemos. "Granada sería el primer paso", dijo en alusión a la reciente pérdida de este consistorio por parte del PP. Tras Granada citó los casos de Santa Pola, Benalmádena, Torrevieja, Gandía o la Diputación de Toledo.

A juicio del número tres de los conservadores no se podría entender que se criticara a los "populistas" a un lado del Atlántico y que se pactara con ellos en el otro. "Podemos sentarnos con Ciudadanos para solucionar estas cosas y dejar gobernar a las listas más votadas".

El PP, muy molesto por el pacto de investidura sellado entre Pedro Sánchez (PSOE) y Rivera tras el 20-D confía ahora en que el líder de Ciudadanos recapacite y permita gobernar a la lista más votada. Un asunto espinoso si se tiene en cuenta que el partido naranja señala con insistencia que no apoyará un Ejecutivo liderado por Mariano Rajoy.

En la misma entrevista, Martínez-Maillo destacó que el Gobierno había apoyado esta visita, como ya había hecho con las anteriores de los expresidentes socialistas José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González. No obstante, no perdió la oportunidad de subrayar que el PP lleva apoyando a la oposición durante 14 años. "No somos nuevos en la defensa de la libertad", dijo.

En esta misma línea, el vicesecretario de Organización de los conservadores recordó que el PP ha presentado 54 iniciativas parlamentarias al respecto, tanto en Congreso, como Senado, como Parlamento Europeo. Además de 14 viajes a Venezuela pero sin "tanto vídeo", un dardo a Ciudadanos en toda regla.

Rivera ejerce de interlocutor

Albert Rivera, por su parte, intentó mantener vivo este jueves su viaje a Venezuela. A última hora de la tarde, desde Ciudadanos informaron de que había llamado al ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, para trasladar al Gobierno sus impresiones sobre el viaje. 

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Fuentes del partido aseguraron que Rivera había defendido el diálogo entre ambas partes, un diálogo "con condiciones". "Ya que para que este diálogo sea sincero y en igualdad de condiciones es necesaria la liberación de los presos políticos y el reconocimiento de que el país atraviesa una crisis humanitaria", añadieron.

También informó al ministro de las "trabas" que el Gobierno de Maduro está poniendo al mecanismo constitucional del revocatorio y le agradeció el respaldo recibido por el Gobierno a través de su ministerio.

Los planes de Rivera son trasladar, además, tanto a Felipe González como a José Luis Rodríguez Zapatero sus impresiones tras el viaje. El domingo pasado, antes de viajar a Caracas, Rivera se había reunido con el ministro Margallo y con Zapatero, que acudió la semana anterior a Venezuela junto a varios políticos lationamericanos para intentar que se abriera un diálogo entre Gobierno y oposición.