El PSOE echa en cara a Rajoy su "inexistente" actividad legislativa

La portavoz del Partido Socialista en el Congreso de los Diputados, Margarita Robles, echó en cara este miércoles a Mariano Rajoy la "inexistente" actividad legislativa del Gobierno en los últimos 13 meses. "Viven en el país de Alicia en el país de las maravillas", llegó a decir la parlamentaria a los conservadores en el último Pleno de control al Ejecutivo en la Cámara Baja antes del parón navideño.

En va de legislatura, recordó la parlamentaria del principal partido de la oposición, el Gobierno sólo presentado 14 proyectos de ley. Nueve a instancias de la Unión Europea, es decir, transposiciones de normativa comunitaria y el resto relativos al cupo vasco y al concierto económico. A juicio de Robles, el Gobierno se comporta "con la soberbia de la mayoría absoluta".

infoLibre ha informado de que el año que está a punto de culminar pasará a la historia como uno de los de mayor sequía legislativa en el Congreso de los Diputados. La Cámara Baja ha aprobado únicamente nueve leyes en todo 2017, a pesar de que ha estado funcionando durante todo el año. Además del atípico 2016 (dos leyes orgánicas aprobadas), cuando el Gobierno de Mariano Rajoy estuvo diez meses en funciones y por tanto sin capacidad de proponer iniciativas legislativas, sólo hay otros dos registros peores desde que se aprobó la Constitución hace cuatro décadas: en 2004 y en 2008, en ambos casos con las Cortes disueltas durante casi tres meses por la convocatoria de elecciones generales, y cuando se aprobaron 7 y 6 leyes, respectivamente.

"Lo importante es que [las leyes] sean buenas", dijo el presidente cuando Robles le recordó el pobre balance legislativo y los 44 vetos del Gobierno a iniciativas de la oposición. "No sólo no hacen, sino que no dejan hacer la oposición", llegó a decir la portavoz de los socialistas.

El balance "razonable" de Robles

Previamente, Robles había preguntado al presidente por el "balance" que hacía de los 13 meses de Gobierno. Y Rajoy había recurrido al término "muy razonable" para responder antes de instalarse en el discurso de la recuperación económica.

Así, el líder del Partido Popular, sostuvo que el crecimiento de España es del 3%, que las exportaciones han crecido el 9%, "un máximo histórico", dijo. Señaló también que ha habido "récord" de turistas, que hay 637.000 empleados más que hace un año, que la tasa de paro juvenil ha caído 6 puntos y que hay 555.000 parados de larga duración menos.

Tras señalar que las prestaciones por dependencia "están en máximos históricos", añadió como broche de su balance que se ha defendido la unidad nacional, en alusión a la situación en Cataluña.

Iglesias y la defensa de la Constitución

Por otra parte, Rajoy recurrió a la ironía para felicitarse de la "vuelta" del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, "al redil constitucional", y le retó a acudir al Tribunal Constitucional a denunciar todos los incumplimientos de la Carta Magna que le echó en cara durante la sesión de control.

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"Es una pena que usted no hubiera colaborado y que haya decidido ir al Tribunal Constitucional, que será el que nos diga si se aplica o no y cómo se aplica la Constitución. Y eso tiene un aspecto muy positivo, que es que usted ha utilizado un instrumento que le permite la Constitución, lo cual es una muestra más de que se aplica", dijo Rajoy recordando el recurso de Unidos Podemos a la aplicación del 155.

En respuesta, Iglesias sostuvo que el Gobierno usa la Constitución "como si fuera una bandera" y negó que el PP sea constitucionalista, porque se están incumpliendo, a su juicio, derechos recogidos en la Carta Magna como la vivienda o la libertad de expresión. El líder de la formación morada insistió en que si la se hace una reforma de la Constitución como la del artículo 135, su partido planteará un referéndum. Este es precisamente uno de los temores del PP a la hora de mostrar reservar para abrir el melón de la reforma constitucional.

Por otra parte, el presidente del Gobierno aseguró que espera tener un "diálogo normal y civilizado" con el nuevo Ejecutivo catalán que surja de las urnas el 21D. Esta fue su respuesta después de que el portavoz parlamentario del PdeCAT, Carles Campuzano, le instase a abandonar el autoritarismo y a dialogar "con las instituciones de Cataluña".