El sector mayoritario plantea la abstención como mal menor y los críticos piden mantener el 'no' por coherencia

El Comité Federal del PSOE, reunido este domingo para determinar la posición que mantendrá el partido en la investidura del candidato del PP, Mariano Rajoy, debate a estas horas dos resoluciones. La primera de ellas propone, en síntesis, votar no en la primera ronda y abstenerse en la segunda. Ha sido presentada por la eurodiputada Elena Valenciano. El segundo de los textos, que ha sido defendido por el socialista vasco Txarli Prieto, defiende el no es no.

El texto presentado por Valenciano (consultar aquí en PDF) propone mostrar un “rechazo frontal a las políticas” del PP votando no en primera votación y abstenerse en la segunda votación “con el objetivo de desbloquear la situación institucional que sufre el país”. Además, fija los objetivos que los socialistas consideran “inaplazables” en esta legislatura: derogar la reforma laboral, convocar el pacto de Toledo, derogar la LOMCE, abordar el conflicto con Cataluña y reformar la financiación autonómica, luchar contra la corrupción, que las mujeres “recuperen” los derechos perdidos en relación con el aborto, un pacto contra la violencia de genero y derogar la Ley Mordaza.

La resolución argumenta apunta que “se ha producido una situación excepcional” y que “si no se desbloquea este escenario, en ocho días estaríamos ante la disolución automática de las Cortes y la convocatoria de unas terceras elecciones” con “consecuencias que irían en perjuicio de las instituciones y de las personas”. El texto enfatiza que en los últimos comicios los socialistas obtuvieron “los peores resultados de la historia reciente” y que no fue posible articular un “gobierno transversal”, mientras que el PP ha logrado un acuerdo que alcanza los 170 diputados.

“Resulta incuestionable que no hay más que dos alternativas: o unas nuevas elecciones o el PSOE contribuye a desbloquear la situación”, dice la resolución, que apunta que “una nueva repetición de las elecciones (…) es el peor desenlace posible” en “tres planos”: porque sería “dañina para la salud de la democracia”, porque “es perjudicial para el interés de España y el de los españoles y españolas” y porque puede “tener efectos muy negativos también para el PSOE”, que aparecería como “principal responsable de un bloqueo que nadie desea”.

Mientras tanto, la segunda de las resoluciones (consultar aquí en PDF), que aboga por el no es no, argumenta que el Comité Federal debe tener en cuenta “la palabra dada por el PSOE (…) contraria a la investidura de Rajoy y la petición del voto para poner en marcha un cambio”, las “dos resoluciones previas” del propio comité contrarias a facilitar un Gobierno conservador, “la demanda social progresista” para poner en marcha dicho Gobierno de cambio”, “el precedente de la consulta a la militancia” tras el pacto PSOE-Ciudadanos y “la multitud de asambleas locales” para “solicitar” al Comité Federal “que mantenga su no a la investidura de Rajoy”.

En ese sentido, el texto sostiene que “el principal problema es tener cuatro años más un Gobierno de la derecha que siga elevando nuestra deuda y déficit públicos mientras carga sobre las espaldas de nuestro Estado de Bienestar todo el esfuerzo del recorte”, así como que “persista en las polacas recentralizadoras”, se cierre “en banda” a toda posible reforma constitucional y que los socialistas no pueden “permitir” que recaiga sobre sus espaldas la “responsabilidad” de que siga adelante un Gobierno del PP, pues este partido “ha sostenido y amparado tramar corruptas”.

La resolución defendida por Txarli Prieto apela a la coherencia con los “principios” del PSOE y con “la palabra dada”: “Fuimos a las elecciones diciéndoles a los ciudadanos que ni un solo voto socialistas serviría para investir a Rajoy”, recuerda. “Ese caudal de confianza es nuestro principal capital y no podemos perderlo. permitir la investidura de Rajoy supondrá lastrar el futuro del PSOE y condicionar la capacidad de nuestro partido para competir con éxito en el futuro”. Finalmente,a argumenta que abstenerse sólo retrasaría “unos meses” otras elecciones, porque “o bien el PSOE da estabilidad” a la derecha, o “lo más seguro es que en primavera” Rajoy convoque de nuevo a las urnas”.