PSOE DE ANDALUCÍA
“Susana se deja usar por el PP como Felipe”: el PSOE-A se revuelve contra la expresidenta andaluza
La Velá de Santa Anta es uno de los momentos mágicos de Sevilla. Última semana de julio, cae la noche. Los trianeros se reúnen en la calle Betis, en la plaza del Altozano y en San Jacinto. Buscando algo de brisa del río Guadalquivir. Un pequeño oasis en mitad del abrasador verano en la capital andaluza. La felicidad de las noches de estío con música de fondo y cucaña.
Pero la Velá de este año, que se celebrará a partir del día 20, ha hecho explotar otra vez al PSOE de Andalucía. El Ayuntamiento de Sevilla, en manos del popular José Luis Sanz, ha decidido otorgar a la expresidenta de la Junta, Susana Díaz, el reconocimiento de Hija Predilecta de Triana, su barrio. Ella está feliz, pero entre la mayoría del socialismo del sur ha sentado como una auténtica patada en el estómago. Y desde Almería hasta Huelva cargos y militantes del partido critican en sus conversaciones esa distinción.
Para dirigentes socialistas consultados se trata de toda una afrenta para el socialismo en un momento en el que precisamente el PSOE-A trata de recuperar su dignidad moral tras las revisiones de penas por parte del Tribunal Constitucional de exaltos cargos de la Junta de Andalucía por el caso de los ERE, muchos de ellos precisamente trabajaron codo con codo con la expresidenta en los diferentes gobiernos de José Antonio Griñán.
Además, varias fuentes del PSOE-A ponen de relieve que el premio a Díaz ha sido aprobado por José Luis Sanz, exalcalde de Tomares y uno de los hombres más duros contra el PSOE andaluz. De hecho, está situado en una posición más extrema que el actual presidente de la Junta, Juanma Moreno, y se ha movido siempre alineado con Juan Ignacio Zoido y María Dolores de Cospedal.
"Yo sinceramente renunciaría"
Las críticas se suceden en privado en las ochos provincias, con el convencimiento de muchos de que ella tendría que haber rechazado la distinción. Pero la voz la ha alzado de manera clara el actual presidente del PSOE-A, Manuel Pezzi, que ha hecho varios apuntes en la red social X, donde le señaló a Díaz: “Yo sinceramente renunciaría hasta que pidan perdón por su montaje y persecución de inocentes, víctimas utilizadas para conseguir arrebatarle la Junta de Andalucía”.
En otro mensaje Pezzi subrayó que Sanz fue “partícipe activo de la gran cacería del PP a una militante del PSOE, ex presidenta del Gobierno socialista de la Junta y ahora senadora socialista”. “Que te lo mereces, que es tu barrio, que los quieres, que te hace ilusión y te hace feliz… seguro que sí. Pero los que te reconocen nos están acusando a todos de ladrones, a ti también como socialista. Yo de este lado, del PSOE de Andalucía. Comprendo que tertulianos y plumillas de derechas me den para el pelo. Cincuenta años recibiendo, ya estoy acostumbrado. Pero cuando la derecha me aplaude, sé que me estoy equivocando”, reflexionó. En público el líder del PSOE-A, Juan Espadas, en cambio, no ha querido echar leña al fuego y ha dicho que entiende "perfectamente" el reconocimiento: "Ejerce de trianera".
El premio se une, como denuncian fuentes socialistas, a la estrategia también del Partido Popular de capitalizar antiguas figuras del socialismo andaluz. “Ella se está dejando usar por el PP de Moreno Bonilla como Felipe González”, indica un alto dirigente del PSOE-A. Este movimiento recuerda al episodio polémico de la entrega del V Premio Iberoamericano Torre del Oro el pasado mes de septiembre, cuando el presidente de la Junta y la plana mayor de los populares andaluces arroparon al dirigente socialista en plena ofensiva de críticas contra Pedro Sanchez por la negociación con los independentistas para su investidura.
El PP mima a históricos socialistas contra los que cargó durante décadas
Ese día se visualizó la distancia abismal de la militancia con González, con grupos de personas en las puertas con pancartas en las que se podía leer: “Siempre con el PSOE, antes con Felipe, ahora con Pedro Sánchez”. Pero dentro ganaban los populares para ver a González, que durante décadas fue su bestia negra en política. Allí estaban Jesús Aguirre, Javier Arenas, Ana Mestre y Juan Bueno.
La estrategia de Moreno pasa por descapitalizar al PSOE de parte de su historia en Andalucía y apropiarse de algunas banderas del propio socialismo después de haber llegado al Palacio de San Telmo prometiendo un giro tras más de cuarenta años del PSOE-A. De esa manera ahora da mimos a Felipe González y también al exvicepresidente Alfonso Guerra, a los que aplaude y jalea cada intervención que tenga que ver contra el nacionalismo y Pedro Sánchez.
Aunque Felipe González apenas tiene tirón ya entre la militancia, miembros del PSOE-A reconocen que esto hace daño en el sentido de que se roba la historia del propio partido. En el socialismo sureño no tienen banderas a las que agarrarse para reivindicar lo que han supuesto sus gobiernos. Lamentan algunos dirigentes que es una frustración no poder reivindicar con éxito pasos tan importantes como el levantamiento del Estado del Bienestar o avances sociales tan importantes como la ley trans que se aprobó muchos años antes que la nacional por la falta de referentes. No tienen un Rodríguez Zapatero para que levante la moral en los mítines, actos y medios de comunicación.
Manuel Chaves y José Antonio Griñán fueron los antecesores de Díaz y sus figuras quedaron totalmente tocadas políticamente tras sus condenas por el caso de los ERE en la rama política. Ahora esperan la revisión en breve de esas penas por el Alto Tribunal, que previsiblemente seguirán los mismos pasado que con otros ex dirigentes como Magdalena Álvarez y Carmen Martínez Aguayo.
A pesar del ruido interno que ha generado, Díaz está totalmente encantada con su reconocimiento por parte del Ayuntamiento de Sevilla y no va a rechazarlo. En declaraciones a la Ser tras conocerse el galardón indicó: “Estoy feliz. desde que me llamó el alcalde. Agradecida, no me esperaba. Pensé en mi padre y en lo contento que estaría hoy en su barrio. Está en el cielo, pero mi madre me acompañará. Es una de las cosas más bonitas que le puede pasar a un trianero. Siempre he llevado mi barrio a gala”.
En cambio, rechazó motivos políticos y celebró esa supuesta transversalidad: “Me da mucha alegría que los políticos huyamos de trincheras. Levantar muros lo hace cualquiera, tender puentes entre ciudadanos es más complicado. Eso lo hace la gente con corazón y pasión por la política más allá de las ideas. Se lo agradezco a José Luis, conmigo fue muy sincero. Para mí es un honor, estoy muy agradecida, tengo una buena relación con él desde hace años. Nos tenemos que respetar y dar ejemplo a la gente. Es mucho más lo que nos une que lo que nos separa. Conmigo ha tenido un detallazo”.
El PP se envuelve en banderas andalucistas
El PP andaluz desde que llegó a la Junta ha desplegado una política en la que tiene especial importancia a antiguos votantes socialistas y al centro político, con la idea de no dar miedo y asentarse en esa parte del electorado. Moreno Bonilla siempre ha tenido la obsesión de desprenderse de la imagen de un partido de señoritos, que durante años dominó el espíritu del partido ante los ciudadanos. Y se ha envuelto en la bandera blanca y verde adoptando todos los grandes símbolos del andalucismo que durante años rehuyó.
De esta manera, el PP está afianzando su espacio electoral. En las últimas elecciones europeas los populares de Moreno Bonillo ganaron por primera vez en su historia una cita continental en Andalucía, imponiéndose con algo más del 37% de los votos, lo que supuso quedar cinco puntos por encima del PSOE-A. Estos datos han sido analizados con preocupación por parte de la dirección de Ferraz, donde creen que esa federación debería aportar más papeletas en el siguiente ciclo electoral. En cambio, los populares han logrado imponerse tanto en las generales como en las últimas autonómicas con mayoría absoluta.