Francis Lorenzo dejaría sin vacaciones a Montoro

Para el actor gallego Francis Lorenzo (Pontevedra, 1960) los escenarios ya no esconden ningún secreto. En los casi 30 años que lleva actuando ha interpretado de todo: Para toda una generación siempre será Alfredo, el profesor del Azcona en Compañeros, o puede que Julio, el mejor amigo de Emilio Aragón en Médico de familia, que además fue uno de los papeles que le catapultó a la fama. Los espectadores más jóvenes tal vez no puedan olvidarse de su papel como Hernán Mejías el malvado comisario de Águila Roja o Ernesto Sandoval, el padre amanerado de Mis adorables vecinos. Roles que le han reportado grandes éxitos profesionales, además de un gran cariño del público.

En el año 1989 debutó en la gran pantalla con la la película Las cosas del querer de la mano del director Jaime Chávarri. Desde entonces ha continuado trabajando con reputados cineastas como José Luis Cuerda, Manuel Gutiérrez Aragón, José Luis Garci o Icíar Bollaín. A través de la pantalla, ya sea grande o pequeña, ha logrado convertirse en uno de los rostros fácilmente reconocibles de la ficción española. El actor afronta el verano como un periodo de descanso, aunque reconoce que en esto de la actuación “siempre hay algo que leer”. A poder ser en Pontevedra: la morriña manda.

Pregunta. En verano, ¿descanso o trabajo?

Respuesta. Descanso.

P. ¿Un rincón para refugiarse del mundanal ruido?

R. Galicia, concretamente Pontevedra.

P. ¿Cuál es el momento de las vacaciones con el que sueña?

R. La vuelta de un partido de golf con mis amigos, después de habernos jugado las cervezas y las cenas con los amigos.

P. Ahora toca hablar del más momento temido…

R. El momento que más temo es que me lo corten por tener que ir a grabar.

P. ¿A quién dejaría sin vacaciones?

R. Sin ninguna duda a la mitad del Gobierno, porque me han robado. Especialmente a Montoro.

P. ¿Se lleva algún Cuadernillo Rubio, algunos deberes para septiembre?

R. He sido siempre de los que suspendía en junio. Ahora siempre me llevo algún libro o guiones de nuevos proyectos, en verano aprovecho para leer con calma.

P. ¿Hay algo que le quite el sueño en estos meses?

R. La verdad que no. No hay nada que me preocupe lo suficiente para llegar a ese punto.

P. ¿Qué le espera a la vuelta?

R. A la vuelta me espera volver a la cruda realidad. Toca volver a trabajar para pagar a Montoro.