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El futuro del PSOE

La Conferencia Política de los socialistas no aprobará el reglamento de las primarias

El PSOE entra en tiempo de descuento. Está ya a menos de una semana del comienzo de la Conferencia Política, el gran cónclave que reunirá en Madrid del 8 al 10 de noviembre a más de mil participantes y que tiene como misión remozar todo el andamiaje del partido para toda una década, presentar un corpus ideológico completo que supere las barreras de un programa electoral, como tanto se empeña en decir la dirección. Pero como también se afana en recalcar Ferraz, de allí no saldrá ni la fecha ni un reglamento tasado y cerrado de las primarias abiertasla cuestión orgánica que más enreda a los dirigentes–, ni tampoco se abordará la discrepancia con el PSC por el derecho a decidir que volvió a estallar esta semana. El curso oficial de la Conferencia basculará en torno a los grandes ejes temáticos (economía y empleo, Estado del bienestar, Unión Europea, regeneración democrática y modelo de partido). Otra cosa es lo que ocurra, y se diga, en los pasillos del Palacio Municipal de Congresos de Madrid, la sede de la convención socialista. 

Como explicaba el pasado jueves a los periodistas Óscar López, secretario federal de Organización, la Conferencia Política 2013 se parece mucho a la Conferencia Política 2001, aquella que se celebró un año después de la victoria de José Luis Rodríguez Zapatero en el 35º Congreso, y que sentó las "bases" del nuevo proyecto del PSOE que él encarnaba, que abrió un "tiempo nuevo" y dibujó "las líneas maestras" que luego perduraron y se llevaron al Gobierno. 

Ferraz es consciente del interés que rodea la principal revolución orgánica pactada ya en el congreso de Sevilla de 2012, las primarias abiertas para la elección del candidato a la Moncloa, más si cabe por la debilidad del liderazgo de Alfredo Pérez Rubalcaba y por la presión interna a poner una fecha lo antes posible. Pero nada quedará cerrado del todo en la Conferencia. López reiteró, una vez más, que el cónclave no aprobará un reglamento detallado del funcionamiento de las primarias, artículo por artículo. "Eso no va a salir", zanjó. La dirección, y con ella las federaciones –Andalucía, por descontado–, entiende que sólo el Comité Federal debe ser quien apruebe la letra pequeña, porque para eso es el máximo órgano de poder entre congresos y en la convención participan y votan incluso delegados que no son del partido y no pueden decidir sobre él. Para la próxima reunión habrá que esperar a mediados de diciembre (se baraja el día 14) o principios de enero, y será entonces cuando se acuerde la fecha de las elecciones internas. La misma ponencia marco ya deja claro que el Comité Federal se encarga de todas las concreciones. 

"Pensar bien" la designación del líder por las bases

¿Qué discutirá la Conferencia, por tanto? "Principios" generales, no concreciones. Las condiciones para ser candidato, las garantías del proceso, la inscripción de los ciudadanos que quieran participar, si habrá una vuelta o dos... o una orientación sobre el número de avales requeridos, mínimos y máximos. La ejecutiva federal, según dijo López, es partidaria de "flexibilizar los requisitos, de hacer las primarias lo más abiertas posibles". Hoy en día, en las primarias normales –o sea, las restringidas a militantes–, existe un mínimo de apoyos para poder aspirar a ser candidato: un 10% del censo en el ámbito federal, 15% en el autonómico (el listón en las de Andalucía, en julio pasado) y 20% en el municipal. Las primarias abiertas, por cierto, están previstas para el nombramiento del candidato a la Moncloa, aunque se abre la puerta a los aspirantes autonómicos si lo pide la federación y lo aprueba Ferraz, y no son posibles en las ciudades. 

Otras dos cuestiones centran la discusión sobre el modelo de partido. Uno, la elección del secretario general por el voto directo de los militantes, un avance que se rechazó en el congreso de Sevilla. Como ya anunció el propio López en abril, cuando Ferraz tenía abierto el conflicto con la federación gallega, la ejecutiva federal es "conocedora de que el debate se ha abierto paso y se muestra partidaria" de que los afiliados designen por primarias a su líder. Dado que es una cuestión estatutaria, aprobarlo o no depende de un congreso. El secretario de Organización, no obstante, recordó que "hay precedentes" de cambios en las normas internas poco antes de un cónclave o al comienzo del mismo. Antes del de Sevilla se redactó un reglamento que permitió que hubiera precandidatos –Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón–, y en 2000, se modificaron los estatutos en el mismo congreso para elegir de forma separada al secretario general y a la ejecutiva. "Si hay un consenso y se quiere hacer algo para que se tienda a ello, se buscan fórmulas. Esto no es una gestoría", advirtió el número tres. 

Nuevas formas de afiliación

La designación del jefe de filas por voto directo de las bases no resulta pacífica en el partido, porque el poder que adquiriría el secretario general sería "descomunal". "Es un cambio radical en la estructura del PSOE, tanto que requiere pensarlo bien". Por ello, deberían diseñarse fórmulas de contrapeso al número uno, para impedir que cuaje un modelo cesarista o que pierdan poder los territorios, siempre muy potentes en el partido. 

La última cuestión interna que suscita debate son los nuevos formatos de afiliación. Además de las figuras de militante y simpatizante, se añadiría la del afiliado directo (el que no participa de la vida de las agrupaciones de base) y la del militante 2.0. La formación de Rubalcaba quiere "aprovechar el viaje de las primarias" para "ampliar la base social del PSOE".

De las 12.617 enmiendas recibidas a la ponencia marco entre septiembre y octubre, 2.459 (el 19,49%) están ligadas a cuestiones orgánicas. Y el 80,51% restante, 10.158 aportaciones, se refieren al "modelo de país": 6.040 (47,87%) sobre regeneración democrática; 2.497 (19,79%), sobre economía y 1.621 (12,85%), sobre bienestar social. 

¿Y cuántas hablan de primarias? Según detalló López, aluden a ellas "unas 50". Y de ese paquete, "sólo cinco o seis hablan del calendario": dos piden que sean después de europeas, una antes y las restantes recalcan que sea el Comité Federal el que fija la fecha.

Enmiendas apegadas a la ponencia marco

Además del recurrente asunto de las primarias, el PSOE sufrió esta semana otra vez una convulsión por la ruptura de la disciplina de voto del PSC por el derecho a decidir, provocado por una moción de UPyD. Pero este tema no entrará en la Conferencia Política. Óscar López y Ramón Jáuregui, el coordinador del documento marco, reiteraron que el partido ya aprobó que la cuestión del modelo de Estado, la apuesta por una España federal, se abordaría en un Consejo Territorial, que reúne a Ferraz con los barones. Y eso se hizo en Granada el pasado 6 de julio. Aquel día se consensuó un nuevo texto, de modo que el cónclave de la próxima semana no cuenta con ninguna comisión ni ninguna enmienda que debatir sobre la arquitectura territorial del Estado. "Ese tema está cerrado y bien cerrado en el PSOE", apostilló el número tres de forma categórica. 

¿Teme Ferraz que la Conferencia quede eclipsada por los asuntos que no entran estrictamente en el menú? La convención "tiene mucho contenido". "Ahora bien, ¿se puede evitar que alguien diga algo? ¿Alguien con más proyección mediática? No, no se puede evitar, pero otra cosa es lo que piensa el partido. El espíritu de la gente es que la Conferencia salga bien y vaya de lo que tiene ir. La gente sabe cómo funciona el partido y sabe que será el Comité Federal el que ponga fecha. El tema territorial tuvo un pico esta semana, pero ya está", aseguró López. No lo nombró, pero el aparato federal recela de dirigentes como Tomás Gómez, líder del PSM, que hace una semana dijo en un desayuno informativo en Madrid que la Conferencia sí tenía que hablar de la fecha de los comicios internos y añadió que las quería para febrero de 2014. 

La dirección explicó que la mayoría de las enmiendas recibidas, que todavía se están estudiando, "coinciden mucho con la ponencia marco", "más que caminar en sentido contrario, piden precisar algo más". Y están apegadas al texto original, enfatizó, porque se hizo un esfuerzo "integrador" en los diálogos monográficos que han precedido a la Conferencia, desde el pasado febrero. 

¿Qué traslucen esas aportaciones? Ferraz ofreció algunas pistas: 

  • 53 enmiendas se refieren a la forma de gobierno del Estado, a monarquía y república. Parte de ellas pide caminar hacia un Estado republicano, pero otra parte "sustantiva" de añadidos piden "reforzar la transparencia de la Corona". 
  • 33 aportaciones orbitan en torno a la laicidad: desde revisar los acuerdos con la Santa Sede, debatir la fiscalidad de la Iglesia, aprobar una nueva Ley de Libertad Religiosa...
  • Partidos políticos y profundización democrática. "Bastantes enmiendas" piden garantizar la financiación pública de las formaciones políticas y acabar con las donaciones privadas. Otras reclaman que se extiendan las primarias a todos los partidos, que se ilegalice a las fuerzas de ultraderecha, que se revise la institución del indulto, que se rebaje muy sustancialmente el número de firmas necesarias para presentar una iniciativa legislativa popular (ILP), que se amplíen los beneficiarios de la Justicia gratuira y se reduzcan las tasas...
  • Reformas constitucionales. Es "abrumadora" la preocupación por blindar los derechos sociales que están "en peligro", como la sanidad y educación públicas, el sistema de dependencia, la igualdad, el medio ambiente...
  • En economía, es amplio el "apoyo a la ponencia marco". Si acaso, según relataron fuentes de la dirección, se pide un "mayor énfasis" en la lucha contra el fraude y los paraísos fiscales, incidir más en el civismo tributario, ser duros con la banca (impuesto a las transacciones financieras), ahondar en la fiscalidad verde... Hay algunas enmiendas "en relación con el contrato único", que la ejecutiva federal rechaza. 
  • Educación. Se insiste en reforzar el modelo de educación pública y laica, aumentar las becas, reducir las tasas. 
  • Sanidad y bienestar social. Se reclama derogar el decreto sanitario de 2012 que introdujo el copago farmacéutico y restringió la tarjeta sanitaria. Asimismo, se aboga por aprobar un suelo mímio de gasto social o fotalecer el sistema público de pensiones. 

En los próximos días, Ferraz irá dando a conocer qué enmiendas se van asumiendo tal cual, cuáles se transaccionan y cuántas deja vivas para la Conferencia Política, para que se debatan allí y se voten. "La voluntad nuestra es acordar el máximo número posible de aportaciones", indicó la dirección.

La convención, que reunirá a un total de 2.500 personas, entre delegados e invitados, comenzará el próximo viernes con un foro de jóvenes militantes y cargos públicos del PSOE. El sábado por la mañana, la apertura oficial –no se ha adelantado a cargo de quién estará–, y después, cuatro foros abiertos sobre municipalismo, emprendedores y empleo, laicidad y cambio climático. Por la tarde, al tiempo que se desarrollan las cuatro comisiones a puerta cerrada, las que deberán discutir las enmiendas (economía, Estado social, UE y democracia y PSOE), se celebrarán dos foros más. El de globalización lo dirigirá Felipe González, y el de igualdad, José Luis Rodríguez Zapatero. En la mañana del domingo, la clausura, oficiada por Rubalcaba. 

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