Aguirre ataca a Carmena por la actuación de su marido pero la exjueza no le echa en cara los negocios del suyo

Fue un cara a cara cargado de tensión. Esperanza Aguirre tenía enfrente, en los platós de Telemadrid, a quien considera su principal rival, Manuela Carmena, la cabeza de lista de Ahora Madrid (AM) al Ayuntamiento de Madrid, e hizo todo lo que pudo para entrar en el cuerpo a cuerpo, afeándole su trayectoria, ligándola a los "totalitarismos" y a una supuesta "equidistancia" con los presos de ETA cuando era jueza de Vigilancia Penitenciaria. Más aún, embarrando el terreno de juego desde el primer minuto, la acusó de liberar etarras. Toda la artillería para desacreditarla, una sucesión de golpes bajos. Y sin privarse de sacar a relucir, también, la actuación del marido de la candidata de AM, el arquitecto Eduardo Leira, con sus trabajadores. Carmena no quiso entrar al trapo de las acusaciones personales de Aguirre, y rehusó incluso preguntarle por los negocios de su esposo, Fernando Ramírez de Haro, conde de Bornos. Pero sí le pidió que no siguiera su carrera política, porque ha hecho "mucho daño" a los ciudadanos durante su larga carrera en el poder. 

La candidata del PP hiló su ataque a Carmena en el debate de Telemadrid –el quinto de este martes, la segunda ronda de 21 choques entre los aspirantes a la Alcaldía de PP, PSOE, Ahora Madrid, Ciudadanos, IU, UPyD y Vox– cuando hablaba sobre corrupción, insistiendo en que esta existe "en todos los ámbitos de la vida". "Yo me imagino que usted no estará muy contenta de tener todo su patrimonio libre de cargas y los trabajadores de su marido no pueden cobrar". Aguirre se refería a uno de los temas que más ha usado en su campaña contra su rival de Ahora Madrid: su denuncia de las prácticas empresariales de su marido. El asunto más polémico es que el esposo de Carmena, Eduardo Leira, había empleado a falsos autónomos en su estudio de arquitectura (I3 Consultores). También se supo que Leira había sido denunciado por varios extrabajadores como presunto autor de un delito de alzamiento de bienes, aunque este tema fue archivado en los tribunales. 

Aguirre se agarró en días pasados a que la lectura de aquella sentencia le sirvió para conocer que su oponente tenía unos terrenos en El Espinar. "Los trabajadores de su marido han sacado hoy una nota diciendo que no la acusan a usted de nada jurídico. Entienden que no es ético que se quede con una finca en El Espinar y una casa que vale 1,1 millones de euros y que no se pague a los trabajadores del despacho de su marido, que ya sé que es el despacho. Y que es una desgracia, que a todas las empresas les puede pasar eso, por supuesto, pero lo importante es que todos defendamos el sistema democrático". 

"¡Qué pena me da!"

"¡Qué pena me da que utilices las descalificaciones! ¡Qué pena me da que no seas capaz de dirigirte y hablar de política, pero yo sí lo voy a hacer!", respondió Carmena, prefiriendo no responder al ataque directo de Aguirre y sin sacarle a su vez las noticias de los negocios del marido de esta, y de los que lleva informando infoLibre en los últimos días. Este martes desvelaba que Corrales Nuevos Artesanos, una sociedad creada por el marido de Aguirre y dos hijos, colocó sus productos lácteos en las cafeterías de tres instituciones públicas: el Congreso, la Asamblea de Madrid y el Club de Campo Villa de Madrid (propiedad en un 51% del Ayuntamiento de la capital). Y lo hizo a través del Grupo Cantoblanco, propiedad de Arturo Fernández, amigo desde la infancia de Aguirre, expresidente de la patronal madrileña (CEIM) y financiador del PP de Madrid a través de la fundación Fundescam. El Grupo Cantoblanco regentó los restaurantes y cafeterías de dichas instituciones hasta 2014.

Sólo en 2012 y 2013, según los datos en poder de este periódico, la empresa del marido de Aguirre facturó a Cantoblanco más de 12.000 euros en quesos con destino a las cafeterías de la Cámara baja, de la Asamblea y del Club de Campo Villa de Madrid. Ramírez de Haro tiene el 52% de las participaciones de Corrales Nuevos Artesanos SL, mientras que sus hijos Fernando y Álvaro suscribieron un 24% cada uno. Desde el momento de creación de la sociedad, el esposo de la dirigente del PP no ha cumplido con la obligación de presentar las cuentas anuales en el Registro Mercantil. 

Este diario también informó de cómo se benefició de la supresión del Impuesto de Patrimonio que aprobó el Gobierno regional, cuando lo presidía entonces su mujer. 60.000 euros al año desde 2011. Después, este diario descubrió que Ramírez de Haro llevaba siete años ocultando las cuentas de la empresa Savial SL, incumpliendo la Ley de Sociedades de Capital. Algo que la candidata llevó a calificar de mero "defecto administrativo". 

Los trabajos como 'lobista'

En 2014, el marido de Aguirre trabajó como lobista para la empresa Herrero y Asociados (H&A), una de las principales agencias españolas de gestión de la propiedad industrial. Una labor por la que cobraba una comisión del 10% sobre la facturación lograda por H&A gracias a su presión. Buena parte de su trabajo de cabildeo lo realizó Ramírez de Haro con empresas relacionadas con la Comunidad de Madrid. "Mi marido es absolutamente admirable", dio la candidata como única respuesta, sin explicar sobre su actuación como lobista.

También este periódico descubrió que tanto Savial como otra empresa del marido de Aguirre, Ganadera Bornos SC, se habían embolsado 2,5 millones en subvenciones de la Unión Europea. La presidenta del PP madrileño, que defendió en su día con entusiasmo la necesidad de acabar con "los subsidios, subvenciones y mamandurrias", simplemente dijo que las sociedades de su esposo recibían subvenciones porque cumplían con sus obligaciones fiscales, pero ni un comentario sobre el hecho de que entrasen en casa 2,5 millones de ayudas que eran definidas antes como "mamandurrias". 

Aguirre ataca por ETA, los Grapo y Podemos

Carmena no echó mano de ese material porque quería llevar el debate al terreno municipal y a las propuestas para Madrid. Justo lo que no quería Aguirre, que tenía muy claro desde el comienzo del duelo televisivo que quería utilizar la diferenciación ideológica y el reproche de trazo grueso con su oponente. 

"¿Te importa que te tutee?", comenzó Carmena el debate, que enseguida se explayó en lo micro, en lo que sucede en un distrito humilde como Villaverde, al sur de la capital, y le preguntó a la dirigente del PP qué pensaba hacer para resolver los problemas de los vecinos. Aguirre no estaba interesada y sólo muy al final del careo presumió de haber llevado el metro y más infraestructuras a la zona. Prefirió lanzarse enseguida a su cuello: la acusó de decir que los etarras sufren "demasiado", le echó en cara que hubiera liberado a una persona del GRAPO condenada por 48 años y de haber hecho lo mismo con un miembro de ETA que, tras su excarcelación, dijo que no se arrepentía de sus crímenes, le dijo que llevaba "abertzales" en sus listas. Aguirre sacó ETA en todos los bloques temáticos. 

"Pena" por las "simplezas" de Aguirre

"Usted es un poquito equidistante. Aquí todos somos buenos. Iguales los verdugos que las víctimas. Tendría que dedicarse un poquito más a las víctimas del terrorismo", le reprochó a Aguirre, recurriendo a uno de sus temas favoritos. Y, por supuesto, la homologó con Podemos, cuando Ahora Madrid es una candidatura en la que se integra el partido de Pablo Iglesias, pero en la que está incluidos Equo, exmiembros de IU y activistas sociales. La jefa del PP madrileño la acusó así de tener como "único objetivo" llegar al poder, para aplicar lo mismo que los "totalitarios", que es "la mentira y el disfraz". Igual que le reprochó que defendiese los escraches o que su "jefe político" impidiese a Rosa Díez hablar en la Complutense. La obsesión de la expresidenta regional era insistir en que "Podemos, PSOE e IU" se presentan a estas municipales con "un único programa": desalojar al PP. "¿Qué piensa hacer, además de ser buena, muy buena, buenísima? Porque todos somos buenos. ¿Por qué dice que los etarras han sufrido mucho?", insistió. La presentadora, Ana Samboal, no hizo nada para cortar las constantes interrupciones de la aspirante conservadora. 

Carmena dijo sentir "pena" por la "cantidad de simplezas" que le estaba tirando Aguirre. Y a las acusaciones por su pasado como jueza subrayó que lleva luchando "desde los 17 años" por la democracia y la libertad. "Soy profundamente demócrata", se reivindicó. 

La candidata de Ahora Madrid centró su combate a su rival en la corrupción, visto que además, en el bloque de regeneración democrática, que abrió la lideresa, no había dicho "ni una palabra" del asunto. Carmena recordó la "corrupción terrible" que ha "nacido, desarrollado" en su Gobierno regional, y en el que ella se "apoyó". "No comprendo que habiéndonos hecho tanto daño quieres seguir gobernando, has hecho un daño enorme a la democracia", le soltó. Y puso como ejemplo de un acto de "personalismo, de exhibición política" que la Comunidad gastase "1,5 millones de euros" en colocar la primera piedra de la Ciudad de la Justicia, un proyecto hoy abandonado. Como le recordó la Gürtel, la Púnica y la detención de Francisco Granados, quien fuera su hombre de confianza en el partido y en el Gobierno. "¿Cómo no vas a tener responsabilidad?", le preguntó. Al menos, "in vigilando", porque era su equipo. "No sigas, nos has hecho mucho daño", reiteró. 

Ella o los "herederos de Zetapé"

Aguirre se escudó en su justificación habitual: que no hay corrupción, sino corruptos, y que a estos hay que denunciarlos, juzgarlos y hacer que devuelvan lo robado, pero que no por ello se puede atacar "al sistema democrático". 

"Me sorprende esa actitud de no reconocer ese gran mal que has hecho a la democracia", volvió a la carga Carmena. Siempre intentando buscar una fórmula de respeto, incidiendo en que la expresidenta es una mujer "inteligente". "Me da pena a tu edad que no lo asumas". La jueza, de hecho, le recriminó que en el debate de ayer con la candidata de IU, Raquel López, le faltase "el respeto", cuando le dijo que no tenía estudios. "No somos súbditos, todos somos iguales", le espetó. Aguirre ni contestó. 

La candidata del PP se reservó la traca final para sus últimos 30 segundos frente a Carmena: los madrileños, dijo, tienen la oportunidad entre optar por el proyecto que ella encabeza y "los herederos de Zetapé [José Luis Rodríguez Zapatero]". 

El marido de Aguirre colocó productos de una empresa familiar en el Congreso y la Asamblea de Madrid

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Guiños de PSOE y PP a C's

La de este martes era la segunda jornada de debates. Tocaban siete: PP, PSOE e IU contra el aspirante de Vox, Javier Ortega-Smith, y PP y PSOE contra las cabezas de Ahora Madrid y Ciudadanos, Manuela Carmena y Begoña Villacís. Ortega-Smith sí confrontó con Aguirre, pero el PSOE situó contra él a la dos de la lista, Puri Causapié, e IU, a su número cinco, Daniel Morcillo. Mañana será el remate, el fin de los 21 careos impuestos por la propia Aguirre y que Telemadrid compróTelemadrid compró.

En los duelos de este martes se visualizó la cercanía del socialista Antonio Miguel Carmona con la número uno de AM, y también el intento de atraerse a Villacís: se dijo "seguro" de que pueden "hacer todo bien" si trabajan "juntos", y aplaudió que entre "aire fresco" al Ayuntamiento. Claro que Aguirre tampoco desaprovechó la oportunidad de echar el lazo a la aspirante de C's: los dos partidos, auguró, se pondrán"de acuerdo en muchas cosas" al estar "condenados" a entenderse. Pero Villacís le recordó que antes hay que pasar por suscribir el pacto anticorrupción que propone su formación.