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FINANZAS

La banca española bate récord en 2023: gana 26.000 millones, 20 veces más de lo pagado por el impuesto

La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, durante la presentación de los resultados del 2023.

La gran banca española, la integrada por Banco Santander, BBVA, Bankinter, Caixabank y Banco Sabadell, ganó músculo extra en 2023, a pesar del impuesto al sector impulsado por el Gobierno. Se embolsó 26.088 millones de euros, esto es, 5.115 más que en el ejercicio de 2022, con un alza de casi el 27% que permitió la mayor cifra de su historia para cada una de las entidades y en conjunto. En concreto, el Santander logró 11.076 millones, lo que supuso un incremento de algo más del 15%, el BBVA anotó 8.019, un 22% más, Caixabank alcanzó los 4.816 millones, rozando el 54% ; Sabadell, de su lado, registró 1.332 millones, un 55%; y Bankinter, 845, lo que supuso un 51% más. Estas entidades no quedaron fagocitadas por el nuevo gravamen gracias al cual el Ministerio de Hacienda recaudó el pasado ejercicio en torno a 1.263 millones. Es más, ingresaron más de 20 veces más.

Fuentes de sector financiero apuntan que estas ganancias han sido posibles gracias a “un contexto generalizado de alzas de tipos de interés –el Banco Central Europeo los llevó al 4,5% el pasado año, nivel en el que continúan–“, lo que implicó “un beneficio para los márgenes y comisiones de la banca”. Pero hay otro elemento que, según indican, ha contribuido a las cifras de récord: “La remuneración de los depósitos permaneció contenida”. 

El responsable del Sector Financiero de CCOO, Javier de Dios, también cree que las ganancias históricas se han soportado en buena medida en “la subida de los tipos de interés y en la no remuneración del pasivo”. “Las entidades están obteniendo más ingresos en base a intereses a sus clientes, pero no están remunerando el pasivo, con lo que tienen un margen de cuatro puntos que están sacando solamente por el dinero”, argumenta. A ello suma que “se ha reactivado la economía, está fluyendo más el crédito y el trabajo que se está haciendo por las plantillas en las oficinas de generar más negocio bancario y de captación de cliente. Todo ayuda. Es un cúmulo de todo, pero una de las grandes patas es, sin duda, la subida de tipos de interés”, incide. De Dios asevera que “la clientela ya ha empezado a quejarse de que no le remuneren el pasivo” por lo que “las entidades tendrán que ver qué hacen para este ejercicio 2024, que tampoco se prevé que sea malo”. 

Otras fuentes del ámbito de la banca ponen la lupa en que los bancos españoles registran en el país “márgenes superiores a los de otras de sus áreas internacionales de negocio”. El Santander, por ejemplo, percibió unos ingresos totales –margen bruto– en 2023 de 57.423 millones, esto es, 10,2% más que el año precedente. El grueso de esa cuantía, 43.261 millones, corresponde a los ingresos por intereses -margen de intereses, que resta los pagados de los ingresado por su actividad-, que se elevaron un 12% más. Y no fue la única que creció por esa vía. Por lo general, las principales entidades bancarias han seguido esa estrategia, pero no todas lo han hecho al mismo nivel. Mientras Caixabank ha aumentado dichos márgenes un 54%, lo que le ha supuesto unos beneficios de 10.113 millones de euros, en el caso del BBVA la elevación ha sido del 21%, lo que le ha reportado 23.089 millones. Al Sabadell, como al Santander, se asocia una subida de márgenes del 12%, lo que se ha traducido en 4.723 millones. En general, el margen de intereses se ha expandido entre las entidades bancarias españolas un 20%, hasta trepar a los 84.000 millones. 

En la idea de que los bancos están cobrando más por las hipotecas a las familias, pero no están abonando más el ahorro de éstas incide el responsable del Sector Financiero estatal de UGT, Victoriano Miravete.Cobran a los hipotecados, pero no pagan a los ahorradores. Ganan dinero por las subidas de tipos de interés y no lo pagan por los saldos de los clientes a la misma velocidad, lo suficientemente rápido que en el resto de Europa”, manifiesta. Encadenan otras fuentes sindicales del área financiera que “el margen de intereses, que recoge el diferencial entre los 0 euros que te paga el banco si les llevas 5.000 euros, por ejemplo, y a cuánto pagan, si con ese dinero da un préstamo, se les ha desmadrado”, por eso “las entidades que tienen más peso en banca nacional, como Caixabank –la última en presentar sus resultados y que distribuirá un dividendo de 2.890 millones–, o Sabadell, tienen un mayor incremento de beneficios”, argumentan. Y engarzan para finalizar: “El año pasado si pedías una hipoteca era un 3% y hoy es un 4%”. Aunque, el análisis de resultados bancarios es complejo y otras fuentes señalan que, en lo relativo al BBVA, el año pasado "el 55% del beneficio vino de México y el 28% de España", si bien apostillan que "es cierto que el margen de intereses subió en 2023 un 49,8%" en suelo español y "un 31,9%" en el país azteca.

Puntos calientes en 2024

De cara a este año, las previsiones vuelven a ser optimistas para la banca. Las entidades financieras tendrán que afrontar el primer desembolso del impuesto que les atañe en el primer trimestre, con la vista puesta en el ejercicio 2023. Durante las presentaciones de números, los distintos presidentes de los bancos han vuelto a ser duros con una tasa que, dicen, "no es buena para la economía", la "daña", es "discriminatoria" o es "pegarse un tiro en el pie". Pero, a la luz de las cuentas de resultados, parece asumible. Más allá del impuesto, tienen otro frente abierto: las plantillas en ebullición.

UGT, CCOO y FINE han convocado un paro parcial de dos horas el lunes 26 de febrero y no descartan una huelga de 24 horas el 22 de marzo, ante "el inmovilismo de las patronales del sector financiero en la negociación de los convenios de Banca, Ahorro y Cooperativas de Crédito, coincidente con la publicación de beneficios récord". Antes, el próximo 8 de febrero armarán una manifestación en Madrid, a la que se han sumado organizaciones sindicales portuguesas del sector. ¿El objetivo? "Combatir el boicot a la negociación colectiva y a la precariedad que tratan de imponer las instituciones bancarias a sus profesionales". Unos músculos crecen y otros se encogen.

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