Las familias numerosas con rentas altas tendrán en 2024 las ayudas a la luz y el gas que Ribera prometió limitar
Las familias numerosas de rentas altas seguirán por ahora recibiendo las ayudas para pagar el recibo de la luz y el gas, pese a que la Ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, prometió hace casi un año que establecería un límite por ingresos. Según confirman las asociaciones que representan a este colectivo, en enero de 2024 se mantuvo el descuento que reciben en la factura de la luz —cubre hasta el 65% del recibo— y se espera que las familias numerosas también reciban este año el del gas natural, independientemente de la riqueza de la familia.
En marzo de 2023, Ribera anunció que retocaría "lo antes posible" la rebaja de las facturas energéticas para sacar de ellas a las familias pudientes, después de que infoLibre revelase que Enrique Ossorio, entonces vicepresidente de la Comunidad de Madrid —hoy presidente de la Asamblea— disfrutó de ambas ayudas en 2022. También las cobró Alfonso Serrano, número dos del PP de Madrid, y Mónica García, ahora ministra de Sanidad y líder de Más Madrid.
El anuncio de Ribera llegó durante el pico mediático de estas publicaciones. Prometió que las familias numerosas con una renta superior a 26.000 euros no podría acceder a las ayudas energéticas. Pero la reforma se terminó posponiendo por la llegada de las elecciones generales de julio y la presión que ejerció este colectivo: hay 250.000 familias numerosas acogidas al bono social. En abril, la Federación Española de Familias Numerosas se reunió con la ministra para suavizar la reforma, y pedir que el máximo de renta fuese mucho más elevado que 26.000 euros, con el argumento es que el tamaño medio de estos hogares es de cinco personas y casi un tercio tiene problemas para llegar a fin de mes.
Hace tres semanas, la titular de Transición Ecológica anunció en una comparecencia en el Congreso que elaborará una nueva Estrategia Nacional de Pobreza Energética, donde introducirá criterios de renta, según dejó caer Ribera. "Sí, tenemos una propuesta trabajada [sobre la modificación del bono social] con las asociaciones de familias numerosas", dijo la vicepresidenta tercera tras ser preguntada por la promesa de corrección de la norma. Aunque por ahora no hay fecha para la reforma de la Estrategia, y la vigente caduca este año.
El bono eléctrico, 500 millones a cargo de los consumidores
El bono social eléctrico consiste en un descuento directo sobre la factura de la luz en el recibo mensual, pero no se considera una subvención pública porque no va a cargo de los Presupuestos Generales. Se cubre con un recargo que pagan todos los actores del sistema eléctrico, aunque son los generadores y los consumidores los que pagan prácticamente todo el coste del bono. En 2024 supondrá 2,29 euros al año para cada hogar y empresa, incluidos en el apartado de cargos del recibo. El coste es muy reducido porque realmente disfrutan del bono social eléctrico una pequeña proporción de la población: 1,51 millones de hogares, según el último dato de junio de 2023, frente a los más de 30 millones usuarios de electricidad que hay en España. De ese millón y medio, 250.000 son familias numerosas. En 2024, la CNMC espera que se acojan a esta ayuda en total entre 1,38 y 1,6 millones de familias, algo más que el año pasado.
La cuantía que pagará cada consumidor en 2024 para cubrir esta ayuda ha caído un 83% respecto a 2023 (cuando se pagaron 14,03 euros) porque la electricidad es mucho más barata que el año pasado, y como el bono cubre un porcentaje del total del recibo, la ayuda es menos cuantiosa. Otro motivo es que en los últimos dos años la CNMC —la encargada de estimar el coste del bono eléctrico y su cargo en la factura— ha acumulado un enorme superávit por este concepto, ya que estimó que la luz sería más cara de lo que terminó siendo, especialmente el año pasado.
A finales de 2023, el regulador tenía acumulado un superávit de 354 millones de euros, mientras que la estimación del coste del bono social eléctrico para 2024 es de entre 220 millones de euros y 500 millones, en función de cuánto cueste la electricidad y cuantas familias se acojan este año a la ayuda. Por lo tanto, los hogares y empresas pagarán este año 147.234.000 euros para garantizar la cobertura del bono eléctrico. En 2023 esta ayuda costó a todos los consumidores unos 412 millones de euros.
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Desde 2021 y hasta el 30 de junio de 2024, el bono social eléctrico ha sido potenciado para cubrir un 65% del coste de la factura en consumidores vulnerables y un 80% para vulnerables severos, aunque hay un máximo de consumo cubierto. Para formar parte del primero basta con ser familia numerosa (tres o más hijos, o dos hijos y uno con discapacidad) independientemente de los ingresos de los padres; mientras que para ser vulnerable severo la renta de la familia numerosa debe ser inferior a 16.800 euros. El bono eléctrico automático para familias numerosas se da desde 2009.
El bono térmico lo cubre el Estado
El bono que cubre una parte de la factura de gas natural sí que es una subvención pública, ya que se costea con los Presupuestos Generales. La reciben automáticamente quienes tienen el bono eléctrico, por lo que se entrega también a familias numerosas, pero no supone un descuento en el recibo, sino que se trata de un pago anual que suele llegar con más un año de retraso. Su coste total fue de 453 millones en 2023, y los presupuestos están prorrogados a 2024, por lo que la cuantía será la misma.
La ayuda depende de si el hogar es vulnerable o vulnerable severo, y de si la vivienda se encuentra en una zona más fría o más cálida. Parte de los 40 euros al año hasta un máximo de 375 euros.
