Alemania
El ministro del Interior alemán aboga por controlar con tobilleras electrónicas a manifestantes violentos
Una semana después de que tuvieran lugar violentas protestas en Hamburgo durante la cumbre del G20, el ministro del Interior de Alemania, Thomas de Maizière, abogó por la introducción de tobilleras como medida de control de potenciales criminales, según ha hecho saber en declaraciones a los medios del grupo Funke recogidas por Europa Press.
"Los manifestantes subversivos no deberían poder acceder a aquellos lugares donde tienen lugar las protestas", señaló el político conservador, miembro de la Unión Cristianodemócrata (CDU) que preside la canciller Angela Merkel.
"Deberíamos imponerles la obligación de comparecer ante la Policía cada cierto tiempo y, si fuese necesario, colocarles tobilleras. Con personas altamente agresivas, como algunos aficionados al fútbol, también procedemos de esta manera", matizó.
De Maizière insistió en que el hecho de que potenciales criminales se personen de forma regular ante las fuerzas de seguridad constituye una "medida relativamente suave pero muy eficaz", dado que su violación está sujeta a sanciones. Para poner freno a los vándalos, la prevención es fundamental, explicó el ministro.
La ola de violencia y destrucción en la que se vio envuelta Hamburgo días atrás durante la cumbre del G20 hizo aumentar en Alemania las voces que reclaman mayor dureza contra los manifestantes incendiarios y puso en el punto de mira a los miembros de la extrema izquierda y de tendencia anarquista, a quienes mayormente se culpa de los disturbios perpetrados en la ciudad del Elba.
Según datos de los servicios internos de inteligencia de Alemania (BfV), en el país hay unos 28.000 extremistas de izquierda, de los que unos 8.500 están considerados violentos.
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"Los extremistas de izquierda están ahora más dispuestos que antes a responder con violencia contra sus opositores políticos y también contra la Policía", alertó por su parte el director de la BfV, Hans-Georg Maassen en una entrevista publicada este sábado en el diario regional Neuen Osnabrücker Zeitung.
"Los extremistas de izquierda consideran al Estado y a la Policía como instrumentos de represión y opresión y aprueban contra ellos cualquier tipo de violencia", manifestó.
Asimismo, rechazó las críticas vertidas en los últimos días que acusaban a las fuerzas de seguridad de mirar durante años para otro lado y no tener controlada a la extrema izquierda. "Miramos en todas las direcciones, hacia la izquierda, hacia la derecha, en dirección al islamismo o al extremismo extranjero y también a otros grupos que intentan poner en cuestión el Estado", recalcó.