Muerte digna
El presidente del comité público de bioética carga contra la Ley de Eutanasia desde un foro de la Conferencia Episcopal
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El presidente del Comité de Bioética de España, Federico de Montalvo, participó este martes en unas jornadas organizadas por la jerarquía católica sobre el acompañamiento al final de la vida y planteadas de una forma abiertamente contraria a la Ley de Eutanasia y su aplicación, a la que la Iglesia se opone incluso en sus centros concertados. De Montalvo participó en calidad de presidente del órgano público asesor del Gobierno, del que según su propio reglamento "ostenta la representación". Fue presentado con ese cargo en la web de la Conferencia Episcopal (CEE), cuyo departamento de Pastoral de Salud organizó las jornadas, y también en el propio acto, en el que tomó la palabra tras el obispo de Girona. De Montalvo, en su intervención, cargó contra la Ley de Eutanasia y defendió el derecho de la Iglesia a objetar institucionalmente, lo que supone la posibilidad de los hospitales católicos de imponer su ideario a todos los trabajadores, incluidos aquellos que quieran colaborar en la aplicación de la norma.
Se trata de una posibilidad, la imposición de la objeción, excluida por la ley y rechazada de plano por el Gobierno pese a la publicación de un informe a favor de las pretensiones de la Iglesia del propio Comité de Bioética. Este organismo, cuyo presidente ha participado ahora en las jornadas, ya fue criticado por el PSOE y la Asociación Derecho a Vivir Dignamente, en el primer caso por elaborar un dictamen basado en las "creencias" de sus miembros, en el segundo por ser una "herramienta" del episcopado.
De Montalvo, que además de presidente del Comité de Bioética es vicerrector de la Universidad Pontificia Comillas, trabaja con la Orden de San Juan de Dios y ha colaborado con las Hermanas Hospitalarias, según explicó. Ante los delegados de la Pastoral de la Salud en las diócesis, afirmó que está "en contra" de la norma. De la ley dijo que es "bastante mala en su redacción" y que genera las condiciones para una "pendiente resbaladiza" que puede provocar hasta 20.000 muertes al año. También dio indicaciones sobre cómo actuar ante la ley: "Creo que exige un esfuerzo por los que colaboramos con la Iglesia por dejar determinadas ideas claras", por ejemplo el "acompañamiento". "La obligación de todos los que estamos aquí, de las instituciones de la Iglesia, y yo trabajo en una organización de la Iglesia, la Universidad Pontificia Comillas, es reflexionar sobre cómo podemos ayudar a [...] evitar la pendiente resbaladiza [en la aplicación de la ley]".
En declaraciones a infoLibre, De Montalvo afirma que su participación no era "contra la Ley de Eutanasia", sino para dar libremente su opinión como la ha dado también, hablando del pasaporte covid, en la Fundación Alternativas, de signo progresista. Defiende su intervención en lo que entiende como un mero "foro de salud", donde ha hablado "en libertad" y sin que nadie le indique lo que debía decir. "Me sitúo en el plano jurídico, muy aséptico", afirma. Su posición en contra de "cargarnos un sistema que funciona", como a su juicio es el que incluye los conciertos con instituciones católicas, "no es hacer clericalismo, es bioética".
CEE: "Una ofensa contra Dios"
Las jornadas organizadas por la CEE consisten en un encuentro online de los delegados de Pastoral de la Salud en las diócesis, que se celebra este miércoles y jueves, con el tema "Sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso (Lc 6, 36). Acompañar al que sufre". "La ley de la eutanasia también hace más urgente, como recuerdan los obispos en el documento Sembradores de esperanza, 'buscar el sentido del sufrimiento, acompañar y reconfortar al enfermo en la etapa última de su vida terrenal [...]'", señala la CEE sobre las jornadas. Dicho documento, Sembradores de esperanza, considera la eutanasia "éticamente inaceptable" e "ilícita", además de "una ofensa" contra el ser humano y, por tanto, contra Dios". "Esta es la razón por la que Dios pronunció el precepto 'no matarás'", señala el texto, enlazado en la presentación de las jornadas en la web episcopal.
Las jornadas se iniciaron con la bienvenida de Francesc Pardo Artigas, obispo de Girona y responsable de Pastoral de la Salud. Presentó a De Montalvo el director del Departamento de Pastoral de la Salud, José Luis Méndez Jiménez, que abrió la jornada con una oración: "Oh, Dios, tú quisiste que tu hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para manifestar el valor de la enfermedad y la paciencia humana". También está prevista la participación de Francesc Ramis Darder, miembro de la Asociación Bíblica Española, así como representantes del Servicio Interdiocesano de Pastoral de la Salud, los Profesionales Sanitarios Cristianos (Prosac) y la Federación Española de Hospitalidades de Lourdes.
La oposición de la Iglesia
¿En qué contexto se produce la participación del presidente del comité asesor del Gobierno en las jornadas? En un contexto de incertidumbre por el papel de la Iglesia católica y sus instituciones, contrarias a la aplicación de la eutanasia en sus centros y al mismo tiempo claves en el mapa sanitario español.
La Ley de Eutanasia, aprobada en marzo con el voto en contra de PP y Vox, reconoce el derecho a la objeción de conciencia, pero recalca que es "una decisión individual". Ello choca con las pretensiones de la CEE, que ha solicitado el reconocimiento de los hospitales y residencias católicas como "zonas libres de eutanasia".
Además, cinco agentes católicos de peso en el mapa sanitario han suscrito un manifiesto de rechazo a la aplicación de la norma, que advierten no estar "dispuestos" a aplicar: la Orden de San Juan de Dios, la Federación Nacional Lares, Hospitales Católicos de Madrid, la Orden de Religiosos Camilos y la Conferencia Española de Religiosos (Confer).
Más contexto. La aprobación de la ley ha puesto en alerta a la jerarquía católica, donde se han multiplicado las voces de denuncia de las principales voces de la Iglesia en España. El propio papa Francisco, en una entrevista en la Cope, vinculó la eutanasia con una "cultura del descarte". "Los viejos son material descartable. Molestan", lamentó.
El aval del comité
El Comité de Bioética, a través de un informe de julio, ha dado aval a las posiciones de la Iglesia y los grupos católicos, que a juicio de la asociación Derecho a Morir Dignamente van a "generar problemas" para la aplicación de la ley. El comité que preside De Montalvo defiende la objeción institucional y concluye que el "ideario" de una "persona jurídica" se puede "imponer" a sus trabajadores, que así no podrían aplicar la norma en los centros católicos. El comité defiende además que las entidades religiosas objetoras deben poder seguir recibiendo dinero público por conciertos.
Tras la publicación en infoLibre de su posición a favor de la objeción colectiva, el comité ha sido acusado por la exministra de Sanidad María Luisa Carcedo (PSOE) de guiarse por "las creencias personales de sus miembros" y por Javier Velasco, presidente de Derecho a Morir Dignamente, de ser usada como "herramienta" por la "jerarquía católica".
La intervención de De Montalvo
Retomemos la intervención de este martes de De Montalvo, que afirmó que la ley es "un tanto extraña", por haber sido tramitada como proposición de ley del PSOE y no como proyecto de ley del Gobierno, lo que a su juicio podría deberse al deseo de evitar informes como el del Consejo General del Poder Judicial. Además, es "bastante mala en su redacción", añadió.
Su pronóstico, a partir del caso holandés, es que en España acabará habiendo entre 35 y 50 muertes por eutanasia al día o incluso que podría llegar a haber 20.000 casos al año. "Si dentro de cinco años digo 'esta ley se ha aplicado sólo a unas pocas personas que lo querían y con unas garantías', reconoceré que me equivoqué en mi predicción", afirmó, después de advertir que "pueden ser los hijos los que sin intención animen a la persona a adoptar una solución rápida" o los propios enfermos los que quieran morir para no ser una carga para sus hijos. "Hay que pensar que esta ley se implanta en un momento en que vamos a afrontar unas enormes dificultades socioeconómicas", recalcó. De Montalvo lanzó la sospecha de intenciones ocultas en la ley, que "a lo mejor viene bien porque permite tapar otros problemas de mayor calado que tiene que afrontar nuestra sociedad". Y señaló que le parece "insólito" que se haya aprobado "en un momento en que han muerto tantas personas" por el covid-19.
"¿Cómo nos alientas, o qué caminos podíamos hacer en la Iglesia, en clave positiva, para vivir y propiciar más el final de la vida en su sentido más amplio?", le preguntó uno de los asistentes a las jornadas al presidente del organismo. "Todos tenemos que luchar para evitar la pendiente resbaladiza, todos tenemos que luchar para que esta ley no se aplique fuera del marco que es algo impreciso en el que está prevista aplicarse. Eso exige un esfuerzo de todos. Creo que exige un esfuerzo por los que colaboramos con la Iglesia por dejar determinadas ideas claras", respondió el presidente del comité.
"Los que nos pronunciamos en contra [de la norma] parece que hemos encontrado un punto de encuentro, y que todos estamos dispuestos a defender la sedación paliativa en el sufrimiento existencial refractario, como ha hecho la Orden San Juan de Dios en una publicación muy interesante", señaló De Montalvo, que explicó que acaba de ser nombrado vicerrector y secretario general de la Universidad Pontificia de Comillas. Además, trabaja con la Hermandad San Juan de Dios y ha colaborado con las Hermanas Hospitalarias, explicó.
El presidente del Comité de Bioética defendió el derecho de las organizaciones religiosas a la objeción de conciencia institucional, sin que ello suponga la pérdida de conciertos públicos, de forma que no dejen de prestar su "magnífico" servicio. "¿Qué pretende la objeción constitucional? Garantizar que quienes están prestando de manera extraordinaria el servicio lo puedan seguir prestando pese a esta ley sin la necesidad de ofrecer la eutanasia". Se trata, dijo, de evitar la "tentación" de alguna consejería de sustituir a la entidad católica por otra, que podría ser "un fondo privado". "No lo hago desde el punto de vista de defensa de Iglesia, o porque esté en una institución que es de la Iglesia. Es que me preocupo por los pacientes", afirmó De Montalvo, que durante la respuesta a las preguntas planteadas por los asistentes se mostró en contra del "mito" laicista español. "En España pensamos que la mayor expresión de democracia es el Estado laico [...]. Confundimos laicismo con democracia, es una cosa que no pasa en el resto del mundo", dijo.
La explicación del presidente del comité
"Lo que yo evito es el extremismo, en cualquier lado, los blancos o negros. He hablado con libertad", señala De Montalvo en declaraciones a este periódico. La reflexión sobre la eutanasia, afirmó, "trasciende la ideología" y no entenderlo es "empobrecer el debate". "Yo creo en los grises, todo tiene sus matices. Me sitúo en el plano jurídico, muy aséptico. Es un tema muy controvertido, no es dicotómico". A su juicio, su participación como presidente de un organismo público en el acto no es inadecuada porque ha sido en la Pastoral de Salud, ante "personas que trabajan en los hospitales ayudando a cumplir un derecho, que es la asistencia espiritual". "No me han invitado al congreso nacional del PP o de Vox. Estaban médicos, sanitarios y los capellanes que están en los hospitales, que cumplen un papel esencial", dijo.