Operación Kitchen
Cospedal se desentiende de 'Kitchen' y niega que el PP tuviera interés en hacerse con documentos de Bárcenas
La ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal se ha desmarcado totalmente de la operación Kitchen y ha asegurado no haber tenido ningún tipo de conocimiento sobre este operativo que se puso en marcha en 2013 para espiar al extesorero Luis Bárcenas y así sustraerle documentación que se habría llevado del partido tras ser despedido y que podía comprometer a dirigentes de la formación como el propio expresidente Mariano Rajoy. Es más, ha llegado a decir que el PP no tenía ningún interés en la información que pudiera tener Bárcenas y cree que grabaciones que el extesorero dice haber tenido sobre Rajoy son "mentira".
Según han informado a infoLibre fuentes presentes en el interrogatorio como imputada de Cospedal ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón, la exdirigente también ha negado haber contratado al comisario jubilado José Manuel Villarejo, aunque sí ha reconocido que se reunió con él varias veces, siempre a petición del expolicía. Tampoco podía decir otra cosa, ya que existe al menos una grabación de una conversación entre ambos en 2009, cuando Cospedal recibió al expolicía en su despacho de la sede central del PP.
En esa charla, en la que estuvo presente el marido de ella, el empresario Ignacio López del Hierro, y que tuvo lugar meses después de que estallara el caso Gürtel, Villarejo le facilitó información sobre el caso y le dijo que los investigadores tenían múltiples indicios contra Bárcenas. También hablaron de encargos “puntuales”. Sin embargo, según las fuentes consultadas, Cospedal ha afirmado que jamás le contrató o le pagó y que su interés en reunirse con él es porque éste parecía tener muchos contactos con periodistas y a ella le preocupaban las filtraciones que estaban saliendo en prensa.
Ha explicado que a Villarejo se lo presentó su marido porque el comisario tenía "una consultora muy importante" con la que hacía labores de investigación, ya que se encontraba en excedencia en la Policía. El expolicía sí estaba en activo en ese momento, ya que había vuelto al Cuerpo a principios de los noventa. Según Cospedal, López del Hierro también le había hablado de las "magníficas relaciones" de Villarejo con medios de comunicación y que "conocía a todo el mundo".
La ex secretaria general ha estado declarando algo más de hora y media en la Audiencia Nacional y ha contestado a las preguntas del juez, los fiscales anticorrupción y su defensa. Ha aprovechado para subrayar que Bárcenas es un "mentiroso", por lo que no da credibilidad a nada de lo que pueda decir, y para manifestar sus sospechas de que no se haya investigado a fondo el origen de la fortuna del extesorero en Suiza. Como ya ha dicho en anteriores ocasiones, ha defendido que los apuntes de Bárcenas con la contabilidad opaca son los papeles del extesorero, no del partido.
Su interés, ha insistido, cuando estalló el caso Gürtel es que se depurasen responsabilidades y que Bárcenas asumiese su responsabilidad por las graves imputaciones que pesaban contra él, que se conociera "la verdad". Según las fuentes consultadas, Cospedal no ha mencionado en ningún momento el nombre del extesorero, sino que se ha referido a él como "esa persona".
Defensa de su comisario de confianza
En cuando a los pormenores de la operación Kitchen por los que le han preguntado tanto el juez como los fiscales, Cospedal ha dicho que no tiene ni idea de la contratación del chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, como confidente de los policías implicados en el espionaje al extesorero y que no había oído hablar de él hasta que su nombre empezó a salir en la prensa con la apertura de esta causa. Incluso, duda de la posible implicación de su comisario de confianza, Andrés Gömez Gordo, en las maniobras para colocar a Ríos como conductor.
Tampoco sabe decir qué significan las anotaciones de Villarejo que apuntan a que la informaba de los avances de la operación a través de terceros. En todo momento, la exdirigente conservadora ha querido dejar claro que si ha habido otros imputados que han reconocido el fichaje de Ríos para el espionaje es un asunto que tiene que ver con la Policía, pero no con el PP.
De igual modo, Cospedal dice desconocer la interlocución de abogados del PP con Bárcenas en la cárcel y que ella sólo comentaba con la defensa del partido los pormenores que le afectaban en el caso Gürtel, información que luego trasladaba a su "superior"caso Gürtel, esto es, Mariano Rajoy.
De los dos políticos aparte de ella imputados por la operación Kitchen, el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz y el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez, Cospedal ha venido a decir que no tenía una estrecha relación con ninguno de ellos. Sobre Martínez, asegura que la "única vez" que se reunió con él fue con motivo de unas elecciones, cree que las de 2016; mientras que sobre Fernández Díaz, ha afirmado que le aprecia "mucho" y considera que está siendo tratado "injustamente", pero que su relación era de "compañeros de partido".