Las farmacéuticas pagaron 564 millones de euros a médicos y organizaciones sanitarias en 2017

Los laboratorios farmacéuticos que operan en España realizaron pagos por valor de 564 millones de euros a médicos y organizaciones del ámbito sanitario tanto para desarrollar proyectos de investigación en el sector biomédico como para financiar la organización y asistencia de congresos científico-profesionales. Los datos, difundidos este jueves por la patronal Farmaindustria, corresponden al ejercicio de 2017.

Es el tercer año consecutivo que la industria del medicamento hace pública esta información, que también difunden las propias compañías en sus páginas web de forma desglosada. Además, este es el primer año que los laboratorios dan a conocer el nombre de cada médico u organización profesional a la que han realizado algún tipo de aportación por colaboraciones, viajes o participaciones en congresos, ya sea en efectivo o en especie. 

En comparación con el año anterior, cuando los pagos totales alcanzaron los 501,5 millones de euros, estos últimos datos reflejan un incremento del 12,5% que viene determinado principalmente por la subida de las aportaciones que los laboratorios realizan en el ámbito de la I+D. En concreto, para el diseño o ejecución de estudios preclínicos, ensayos clínicos y estudios de postautorización. Esta partida pasó de 194 millones de euros en 2016 a 251 en 2017, un aumento del 29,4% que Farmaindustria atribuye a la "creciente complejidad y costes de los nuevos ensayos clínicos". En los últimos tres años el dinero total invertido en I+D alcanza los 635 millones de euros. 

En todo caso, más de la mitad del dinero aportado por los laboratorios durante el año pasado, 285 millones de euros, se destinó a la organización o asistencia a congresos tanto en España como en el extranjero a través de diferentes vías. Por un lado, pagando las cuotas de inscripción, los viajes y los alojamientos a los profesionales beneficiados, para lo que la industria dedicó 115 millones de euros el año pasado. Y, por otro, aportando dinero a diferentes entidades –sociedades y colegios médicos, asociaciones de pacientes, fundaciones de hospitales e incluso universidades públicas y privadas– para que organicen estas citas. Para esto último la aportación fue de 90,5 millones en 2017. 

En los citados 285 millones de euros también se incluyen los 79,5 millones de euros que las farmacéuticas que operan en España pagaron durante el año pasado tanto a profesionales sanitarios como a organizaciones del sector en concepto de contraprestación "por labores de asesoramiento, consultoría y ponencias en congresos". Según la patronal, estas colaboraciones permiten a la industria "conocer el comportamiento de los nuevos fármacos en la práctica clínica". En conjunto, el dinero aportado para potenciar el desarrollo de estas citas científico-profesionales alcanza los 830 millones de euros en los últimos tres años, un 30% más de lo dedicado a I+D.

La partida que más se ha reducido en el último años es la de las donaciones y subvenciones a organizaciones sanitarias que prestan servicios de asistencia sanitaria social o humanitaria, que alcanzaron los 28 millones de euros el año pasado, un 21% menos que en el anterior, cuando fueron 35,5. Estas aportaciones, que responden a peticiones de las propias beneficiarias, pueden ser desde aportaciones dinerarias para proyectos de investigación hasta donaciones de medicamentos a instituciones humanitarias.

La patronal asegura que estas donaciones son siempre desinteresadas y recuerda que el Código de Buenas Prácticas subraya que no pueden constituir un incentivo para "la recomendación, prescripción, compra, suministro, venta o administración de medicamentos". En los últimos tres años, los pagos realizados por este concepto por los laboratorios que operan en España ascienden a 96,5 millones de euros. Es, sin duda, la partida más exigua. 

Tributación  

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La forma de tributación de los viajes que la industria farmacéutica paga a los profesionales sanitarios –la "inmensa mayoría" de ellos médicos, según admite la patronal– para asistir a congresos estuvo en el punto de mira precisamente hace un año después de que la Agencia Tributaria concluyera en un informe que la asistencia a esas citas con gastos pagados por las compañías farmacéuticas debía tener la consideración de retribución en especie.

El informe, que se basaba en una resolución previa del Tribunal Económico-Administrativo Central realizada bajo el criterio de la Dirección General de Tributos, fue recibido con preocupación en el colectivo médico, donde la asistencia a estos congresos es una práctica habitual. Finalmente, el Ministerio de Hacienda se comprometió a modificar el reglamento del IRPF para que quede claro que "los cursos de formación del personal sanitario, financiados por empresas" ni tributan ni van a tributar como renta. En los últimos tres años, los diferentes laboratorios han dedicado 346 millones de euros a financiar estos viajes. 

Según Farmaindustria, los congresos científicos son "esenciales" para que los facultativos puedan mantener actualizados sus conocimientos sobre su especialidad y por ello cada año miles de especialistas acuden a estas citas en España y en el ámbito internacional. Por ejemplo, el Congreso Europeo de Cardiología (ESC), celebrado en agosto de 2017 en Barcelona, contó con la participación de 31.000 médicos, y el Europeo de Oncología Médica (ESMO), en septiembre en Madrid, recibió a 24.000.